Opinión

La calle y las urnas

Antonio Regalado 

Pie de foto: En Madrid no se han manifestado -como asegura Sánchez- españoles radicales que quieren volver a la España de blanco y negro sino una Nación de ciudadanos libres de rojo y gualda

Hoy estamos en la calle contra Sánchez  y mañana lo haremos en las urnascontra el PSOE”.Con esta idea-fuerza, miles y miles de ciudadanos –desde luego muchos más de los 45.000 que anunció la Delegación del Gobierno-, se manifestaron indignados este domingo en el corazón de Madrid y en varias capitales de provincia para exigir al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que cumpla su palabra en el discurso de la moción de censura y que convoque elecciones cuanto antes.   La Plaza de Colón y las calles adyacentes se llenaron de personas de toda clase y condición, envueltos en la bandera nacional gritando  un mensaje muy claro: ¡Váyase, señor Sánchez! ¡Dimita! ¡La unidad de España no se negocia!

¡Calle de Génova, colapsada!, ¡calle de Goya, colapsada!, ¡Castellana, colapsada!, gritaba el animador mientras el frio y el viento multiplicaban el mar de banderas que portaban los congregados. No era cuestión de partidos; era cuestión de banderas. De una bandera: de la bandera común  de todos los españoles. 

El poder de la unidad

A la convocatoria de los tres grandes partidos constitucionalistas, se unieron UPyDFOROPAR y los nacionalistas canarios. No estaba el PSOE de Ferraz  pero sí socialistas que aman la Constitución. Más allá de las diferencias políticas, CasadoRiveraAbascal, aplazaron sus diferencias para dar un abrazo infinito a los manifestantes llegados de todos los puntos cardinales de España. 

Somos un pueblo unido, unos ciudadanos libres con un denominador común: el amor a España. Porque el dilema es sencilla con el sanchismo: o se está con la Carta Magna o se está con el Frente Popular, que intenta romperla. Democracia o autoritarismo. La mayoría y los mejores estamos con la ley y con la libertad. ¡España no se vende, España se defiende! y ¡No más traición¡ fueron algunos de los eslóganes más  celebrados.

Esta multitudinaria manifestación confirma que España no se romperá.  Los líderes políticos sacrificaron el protagonismo y cedieron la palabra a la sociedad civil. 

Los periodistas Carlos CuestaMaría Claver y Albert Castillón leyeron el comunicado en defensa de la Nación que en lo esencial, dice lo siguiente: “Por la Unidad de España, Elecciones Ya”. Se pasó revista a todas las cesiones de Pedro Sanchez, desde recibir en Moncloa a Torra con el lazo amarillo a su renuncia a preservar la unidad nacional. Rechazo absoluto a que se ponga en peligro la integridad nacional, defensa de la Carta Magna del 78 y del estado de derecho, respaldo sin fisuras  a las FSE. “Dentro de la Constitución, todo tiene cabida. Fuera de ella, nada es ni será aceptable”. 

Se constató que España es una nación de ciudadanos libres  y de que nadie tiene el mandato de romper la igualdad, la solidaridad y la libertad que nos dimos hace 40 años. Compromiso  con la Justicia ante el juicio del procès y los ataques que soportan los magistrados desde el Gobierno y desde el  independentismo. 

El manifiesto, interrumpido por aplausos en varias ocasiones, concluía así: “Hoy estamos reunidos para decirle al Gobierno de España que no estamos dispuestos a tolerar más traiciones ni concesiones frente a aquellos que quieren destruir nuestra patria. Estamos aquí para decir alto y claro que la unidad nacional no se negocia y  que la soberanía corresponde a todo el pueblo. Por todo ello, exigimos al presidente del Ejecutivo la convocatoria inmediata de elecciones generales para que todos los españoles puedan decidir su futuro. ¡Viva la Constitución! ¡Viva España!

(Aplausos y banderas rojas y gualdas ondeando al  viento. El frío  fue el mejor aliado de este histórico 10-FTodos nos sentíamos arropados y protegidos por la Carta Magna, la bandera y por el Rey) 

El acto se cerró con el himno nacional. Y un ¡Viva al Rey!, atronador.Las emociones de civismo, orgullo y patriotismo confirman que la “concordia deSuárez es todavía  posible”. Lástima que no tenga letra para gritarla a los cuatro vientos.

Convocantes en la misma onda

Los periodistas acreditados pudimos acceder fácilmente a las declaraciones de los líderes convocantes. Abascal, no defraudó. Pidió la supresión de la autonomía catalana y exigió el procesamiento de los CDR. El líder de Ciudadanos, Albert Riveratras dar las gracias a todos los convocantes, y anunciar que habrá más movilizaciones si no hay elecciones, sentenció: “No podemos seguir ni un minuto más con un presidente capaz de cualquier cosa”.  Y Pablo Casado, satisfecho del desbordamiento de ciudadanos en este encuentro, ha pedido que “dentro de 100 días acudamos a las urnas “para que el resultado sea una censura a la actuación entreguista de este Gobierno

Aquí se juega

De nada sirvió que tras el Consejo de Ministros la vicepresidenta Carmen Calvo culpara de la ruptura del diálogo  a los separatistas al no atenerse al “marco  de seguridadjurídica”–vulgo violar la Constitución impunemente- al exigir un referéndum de autodeterminación. ¿Se entera ahora el Gobierno de esta condición? ¿Nos tratan como idiotas? Nos tratan como a súbditos. No hay que creerse nada de este teatro del absurdo (lleno de  mentiras y de falta de transparencia) porque Sánchez y asociados solo quieren  ganar tiempo para que se aprueben los PGE. 

Los portavoces de la Generalidad han desmentido que ellos hayan roto ninguna negociación y siguen  atornillados a la “mesa de partidos” con un relator (o mamporrero) que permita la balcanización de España tras cargarse la Monarquía Parlamentaria.

En este túnel sin salida, este Ejecutivo sin cabeza ha presentado un documento oficial  (Bases) en el que reconoce que ya ha aceptado cinco de los puntos del chantaje secesionista. Como este gobierno vive en una montaña rusa, parece que ha escuchado las declaraciones de Felipe González y otros socialistas sensatos y, sobre todo, les ha dolido las protestas en la calle. Porque esto no acaba aquí. No se puede estar engañando a todos tanto tiempo. Nos tratan como a esclavos  no como a ciudadanos libres. Y además todos menos ella, la gran sacerdotisa de Cabra, somos ignorantes. ¡Qué escándalo, he descubierto que aquí se juega!, suspiraba  la señora Calvo imitando al capitán Renault en Casablanca. Hipocresía de una persona incompetente. 

A su manera

Nadie en menos tiempo – apenas 200 días- ha hecho más daño a España y a los españoles que Pedro Sánchez Pérez-Castejón.El hombre del “no es no” -¿qué parte del no, no entiende?-sabe perfectamente que su tiempo político se ha acabado. Y que nuestra nación permanecerá unida aunque el inquilino de La Moncloa sea el mayor colaboracionista de los separatistas y golpistas catalanes y vascos. 

PP, Ciudadanos y VOX –el bloque constitucional- ha unido fuerzas para denunciar con una sola voz que el hombre que accedió al poder pactando con los que quieren romper España, nos humilla ahora insultando a la democracia española y  nombrando un “mediador” para pagar la factura de su nombramiento legal pero ilegítimo. Este pacto (incluido el panfleto de las 21 condiciones del catanazi Torraes una traiciónpara todos los que creemos en nuestra Patria y en nuestra Constitución. No han roto, insisto, es solo una puesta en escena para el victimismo. Todo está congelado por el juicio ante el TS.

Está  visto que el doctor Sánchez ¿supongo? acumula tantas horas en el Falcon que ya le ha dado tiempo para dictar un libro a una negra -“la llamanlabien pagá”-pero es incapaz de acudir al Congreso y al Senado a dar cuentas de su errática política interna y externa. Por lo visto solo cree en el CIS de Tezanos pero es tan cobarde –ya ha superado a Rajoy- que con esa mayoría tan absoluta que le conceden los sondeos oficialistas no tiene coraje de confrontarse  en las urnas. Si Sánchez no quiere escuchar en las instituciones, no ha tenido más remedio que escuchar lo que le gritaban los españoles en toda España. El cesar resiliente (aguantador y oportunista) no es inmortal. Ya están cerca los idus de marzo.   

Ocho meses de cesiones

Sanchez dicen algunas de las escasas  personas que tienen acceso a él, vive en otra galaxia. Vive a su manera, como si fuera el gran Sinatra. Desde el minuto uno, todo han sido concesiones a sus socios parlamentarios. Recordamos que el primen Consejo de Ministros retiró el control previo por parte del Estado de los pagos de la Generalidad. Cuarenta y ocho horas después propuso “recuperar” las competencias anticonstitucionales anuladas por el TC al Estatuto. Y sugirió una reforma de la Carta Magna y un “referéndum” de autogobierno. Alentó el traslado de los políticos presos por el golpe de estado a cárceles catalanas cuyo servicio está transferido, convirtiendo las prisiones en centros de peregrinación separatista.

La ministra de Justicia, de cuyo nombre prefiero no acordarme –la que bebe vino de la copa del prevaricador ex juez Garzón,  y amiga de Vilarejo-, se mostró reacia a defender al juez Llarena, instructor del 1-0, ante la demanda que el prófugo Puigdemont le presentó en Bélgica. Paralelamente, el ministro del Interior, Grande-Marlasca –que calló vergonzantemente ante el responsable del gobierno catalán cuando en rueda de prensa  conjunta calificó a los  golpistas de  “presos políticos”-ha permitido que los lazos amarillos sigan en los espacios públicos de Cataluña y no ha tomado medida alguna cuando los CDR han cortado las carreteras o han invadido las vías del AVE. Y está muy preocupado porque los golpistas no tienen quienes les lleven  las maletas a las cárceles madrileñas. ¡Qué pena tan grande!

Por si fuera poco el colaboracionismo, el ínclito José Borrell–“no voy a dimitir por una corrupción de 9.000 euros”- confirma a preguntas de la BBC que “en efecto, Cataluña es una nación”, impide que se reforme la Ley  de Acción Exterior y permite que Torra siga abriendo embajadas por medio mundo con nuestro dinero. 

En la misma línea de apaciguamiento chamberliano, el primer secretario de los socialistas catalanes, Miquel Iceta se pronuncia a favor del indulto para los golpistas; y le siguen la vicepresidenta incapaz para hacer un relato creíble  y varios ministros (plenipotenciarios) como Pablo Iglesias. Siguiendo órdenes directas de Pedro Sánchez, la Abogacía del Estado no acusó a los golpistas de rebelión, sino de sedición, que implica rebajar las penas a casi una tercera parte. El abogado jefe, Edmundo Bal,  se negó a firmar el escrito en el que se retiraba la palabra violencia y las acusaciones de rebelión y fue cesado ipso facto por la sectaria ministra de Justicia.

La cumbre bilateral de Pedralbes  exigida por el Gobierno regional de Cataluña confirmó la sumisión de todo el gobierno central al chantaje separatista. Darle rango de igual a igual, como si de un jefe de un país extranjero se tratara, con un protocolo extravagante, fue una de las mayores humillaciones que hemos contemplado en directo. Allí se le entregó a Sánchez ese panfleto de condiciones irrenunciables –un chantaje permanente-, que Moncloa ha ocultado al PSOE, a buena parte del gobierno y a toda la oposición. “Es papel mojado”, propalaban los exégetas del doctor del “corta, copia  y pega”. Hasta que el escándalo saltó por el eslabón más débil: el relator internacional. Un mediador entre partidos para hurtarle la verdad al Parlament, al Congreso y al Senado. (Una Asamblea Constituyente como la de Maduro) Todo a unas horas de que el TS juzgue a algunos de los autores de un golpe de Estado. Otros están huidos.

 Chantaje y traición

El Debate de los Presupuestos, en el que se destinaban cantidades ingentes de dinero para el  gobierno supremacista  ha hecho aflorar el chantaje al por mayor de los catalanazis. Primero con el ultimátum  de 8 días para que P.S.  moviera ficha político-judicial, como si aquí no hubiera separación de poderes;  después exigiendo que se les perdone la deuda  de 71.000 millones del FLA y, tercero, firmando dos enmiendas a la totalidad de los PGE. Un chantaje en toda regla.

Y el gobierno, tragando. Objetivo: permanecer en el poder y en el despilfarro hasta el último día: todo un manual de resistencia para un presidente y una vicepresidenta que rayan lo inmoral y  lo antidemocrático porque nunca  cumplen lo que prometen. Y jamás dan la cara. Triunfadores, Mentirosos y escapistas. El viernes, tras el Consejo, era el momento de que Pedro Sánchez contara la verdad al pueblo español. No lo hizo ni lo hará. El sábado nos  tachó de radicales. Este es el político moderado y dialogante, aliado a lo peor del nacionalismo excluyente.

Este equipo contaminado ampliamente  por la corrupción solo busca su medro personal. Los españoles les importan un bledo. Han traspasado todas las líneas rojas de la decencia. Y de la legalidad. Este hombre, que llamó inmoral  en TV a Rajoyestá deslegitimado para seguir al frente del Gobierno de España ni de representarnos en ningún sitio. Tiene como rehén a la nación española pero él es el único cautivo de su ambición desmedida.

Hay que tener unas tragaderas enormes y desconocer todo planteamiento ético en política para hasta hace unos minutos “trabajar ambos gobiernos” en buscar soluciones a los chantajes catalanistas. .  “No se puedegobernar contra Cataluña”,  la primera condición. (Ojo no habla de ciudadanos, habla de pueblo, un solo pueblo como en el nazismo); hay que reconocer y hacer efectivo el derecho de autodeterminación”, (del pueblo de Cataluña, naturalmente) No importa que el derecho no exista ni que atente directamente contra el artículo 2 de la Carta Magna. “Es necesario un mediadorinternacional”,  que facilite una negociación en igualdad. ”La vía judicial debe quedar atrás”,  (aquí paz y después gloria y hasta el próximo golpe subvencionado) ¿Cuál es el motivo por el que este infame e indigno gobierno sigue con las negociaciones bajo el fraude de la ruptura?  La explicación de ésta felonía presidencial está en el  Falcon 950 D.  El síndrome de la Moncloa le ha trastornado. Un césar calcinado.

La desfranquización de España -otra pretensión  inaceptable cuando estos tipos mafiosos protegen a los Pujol, la familia más corrupta de Europa-, la política efectiva da de fosas comunes,  la nulidad de los juicios franquistas, el aislamiento a los grupos neofascistas… todo está escrito a imagen y semejanza de los separatistas para blanquear su imagen de suprermacistas corruptos.

Digámoslo sin complejos: estas condiciones (este panfleto) es la agenda batasuna para que Sánchez  siga en Moncloa tras las próximas elecciones generales. Y el PNV siempre colaborando con los traidores, reafirmando su trayectoria y su linaje: ha alcanzado un acuerdo con este gobierno traidor para recibir 31 transferencias estatales, entre ellas, las de política penitenciaria para que todos los terroristas de Eta vuelvan a casa por Navidad. Se quejan de que no han conseguido romper la Caja de la Seguridad Social. Cuestión de tiempo porque este gobierno se bajará los pantalones sin rechistar.

¿Cuáles son los diques que bloquean este golpe de los separatistas con la confluencia del inquilino de la Moncloa? La judicatura y la Monarquía. De ahí, la inquina del valido de Puigdemont contra los jueces y contra Felipe VI.Si recordamos bien, no ha mucho tiempo Sánchez era partidario de dejar al rey desnudo de inmunidad mientras los golpistas quieren llevarlo ahora al Supremo. La lección del 3 de octubre del 2017  y la manifestación en Barcelona del glorioso día 8, cambiaron el curso de la historia. Y España y los españoles, no van a consentir que estos demagogos marxista-leninistas con piel y alma de milicianos de las SS-CDR protagonicen otra noche de los cristales rotos. No hay más que releer las leyes de desconexión para confirmar que su ideología es totalitaria. Los chantajistas y los traidores no van a cercenar la democracia española. La calle ha hablado este segundo domingo de febrero. Y lo refrendará en las urnas en el último de mayo.

España es la agenda electoral

España es el reclamo supremo de las agendas electorales en los comicios de primavera. La lección aprendida en Andalucía ha marcado el camino. PP, Ciudadanos y VOX  deben protagonizar el futuro para que el Constitucionalismo no se vea amenazado por los nacionalismos excluyentes e insolidarios. Habrá que legislar tras los nuevos comicios con leyes que blinden nuestros derechos y libertades impidiendo que tipos como Artur Más, después de propugnar un referéndum ilegal, pueda seguir en política dentro de un año. Un golpista que vuelve porque le sale gratis. 

 Como decíamos, España –la indisoluble unidad de España- será el eje principal de los comicios locales, autonómicos y europeos. Y  si no, que se lo expliquen a los barones socialistas que están preocupados por la deriva de su gran señorito de Ferraz. Un secretario general aliado con lo peor de cada casa, atrapado en un chantaje el que no puede salir y que impide que el tema territorial se discuta en el seno del partido. 

Eso es democracia interna. Como el nombramiento digital de Pepu Hernández a la alcaldía de Madrid. Primarias ¿para qué? Todo un canto a la propaganda digital. Todo marketing.

Quizás, los partidos  constitucionalistas –el sanchismo se está cargando al PSOE- tras el rugido de este domingo en la calle exigiendo nuevas elecciones- tengan que forzar una nueva moción de censura (constructiva) que obligue a algunos diputados socialistas decentes (unos 10 justos) a retratarse. De seguir el mandato del jefe, las urnas no tendrán piedad en los próximos comicios. Socialistas moderados como PageVaraFernández,  Lambán o Susana Díaz tienen que amotinarse y decir: hasta aquí hemos llegado, señor secretario general. El pronóstico de Alfonso Guerra, ha sido nítido: “estamos” –enfatizó leyendo- ante un obsceno chantaje que calcina la democracia”. 

Ni blanco ni negro; rojo y gualda

Los que hemos cubierto informativamente muchas concentraciones en este lugar frente la atenta mirada del Descubridor, siempre aprendemos algo nuevo: y es que cada manifestación es diferente. Y esperanzadora. Los asistentes han regresado a casa entendiendo que hoy, diez de febrero, marca un antes y un después en la vida española: conviene recoger para contárselo a nuestros hijos y a los hijos de nuestros hijos, algunas sensaciones y eslóganes  que se palpaban en el ambiente. “Golpistas a prisión”; “Sánchez, traidor a la patria”, “Nos llaman fascistas por pedir democracia”, “Pedrito, eres un hipócrita”; “Somos socialistas pero no chorizos como tú”. “No somos fachas, somos españoles” y “Cataluña es España”.

Estábamos todos. Para defender España no sobra nadie. En Madrid, señor presidente, no nos  manifestamos radicales que quieren volver al blanco y negro sino ciudadanos libres que aman una Nación de rojo y gualda. 

Stop a Sánchez. Por manirroto y colaboracionista con los separatistas. No a la negociación con los golpistas. ¡Dimita! ¡Váyase muy lejos, señor Sánchez! Si es posible con su profesor Zapatero. Y llévese a su vicepresidenta la egabrense. Legitímese en las urnas. España no va a olvidar esta jornada del 10-F ni  esta humillación. Jamás. Volveremos. Volveremos, si preciso fuera,  antes de que lleguen los idus de marzo.