La mayoría de los marroquíes se oponen al matrimonio homosexual

Paco Soto

Pie de foto: Activistas marroquíes participan, en Rabat, en un homenaje a las víctimas de un atentado homófobo en Orlando (Estados Unidos)/ Fadel Senna-AFP.

¿Qué piensan los marroquíes del matrimonio homosexual y de la homosexualidad en general? Según un estudio llevado a cabo por el Think Tank estadounidense Council on Foreing Relations sobre la aceptación del matrimonio homosexual en el mundo, en Marruecos, 65% de los ciudadanos están en contra. El informe también analiza la situación en otros países árabes. Los resultados del Think Tank estadounidense se han elaborado a partir de un sondeo llevado a cabo por la Asociación Internacional de Lesbianas y Gays (ILGA).

En Marruecos, únicamente 14% de los marroquíes estarían a favor de la legalización del matrimonio entre dos personas del mismo sexo. El estudio señala que en los Emiratos Árabes Unidos (EAU), 19% de la población sería favorable; en Egipto, 16%; y en Jordania, como en Marruecos, 14%. El estudio fue realizado en octubre de 2016, aunque los datos se hayan hecho públicos ahora. Respecto a las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo, 23% de los marroquíes contestan que es un fenómeno occidental, y consideran que la atracción entre dos hombres o dos mujeres es una “desviación”. La gente de la calle suele hablar de “enfermedad”.

El informe señala que 68% de los marroquíes estarían muy disgustados si uno de sus hijos fuera homosexual o transexual. Además, 72% piensan que no es normal que un hombre se vista con ropa de mujer; y en el caso contrario, 68% de los ciudadanos no lo verían con buenos ojos. Asimismo, 45% de las personas sondeadas consideran que sus ideas en materia de homosexualidad tienen una base religiosa. En las tres grandes religiones del Libro (judaísmo, cristianismo e islam), la homosexualidad es juzgada como un pecado. Desde el punto de vista judicial y sobre el acoso que sufren los homosexuales, la sociedad marroquí es más abierta y tolerante. 30% de los marroquíes entrevistados rechazan que los homosexuales sean detenidos por la Policía y condenados incluso a penas de cárcel por su opción sexual. Y 32% no aceptan que los homosexuales sean víctimas de acoso.

El artículo 489 del Código Penal castiga con penas de hasta tres años de encarcelamiento a quien cometa “actos contra natura con individuos del mismo sexo”.

Una sociedad conservadora

En términos generales, la sociedad marroquí es homófoba, y en formas de pensar y vivir está muy apegada a viejas tradiciones que tienen poco que ver con la cultura pero sí con la ideología machista y patriarcal dominante. Sobre la cuestión de la homosexualidad, que levanta pasiones, debates acalorados, aceptaciones y rechazos, la sociedad marroquí no es muy diferente de lo que eran hace cinco décadas, o quizá menos, países mediterráneos como España, Italia y Portugal en Europa Occidental. Ahora bien, hace tan solo 15 años un debate o información en los medios sobre una encuesta sobre la homosexualidad en Marruecos hubieran sido imposibles.

Pie de foto: Dos militantes marroquíes de la causa homosexual se besan en público en Casablanca.

¿Qué ha pasado entonces? Como dice el sociólogo marroquí Larbi Ben Malek, “nuestra país, aunque mayoritariamente sigue siendo muy conservador, no vive al margen del mundo. La modernidad, a trancas y barrancas, se ha abierto camino desde hace años, y en este contexto es lógico que debates que ya existen hace años en países más avanzados empiecen a plantearse en Marruecos. Marruecos es un país muy contradictorio, lleno de contrastes; la realidad es cambiante. Para analizar bien esta sociedad, además de usar una metodología correcta y las herramientas de análisis adecuadas, hay que huir de los tópicos y del exotismo orientalista que tanto gustan a los europeos.

La polémica del ministro Ramid

La realidad social le da la razón al sociólogo. Hace unas cuantas semanas, el ministro de Estado encargado de los Derechos del Hombre en el actual Gobierno, Mustafá Ramid, islamista extremista y dirigente del Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD), calificó a los homosexuales de “basura”. Como ya informó Atalayar en su momento, estas declaraciones homófobas fueron condenadas por 15 ONGs como la Organización Marroquí de los Derechos del Hombre (OMDH), la Asociación Marroquí de Lucha contra el Sida (ALCS), la Federación Nacional de Asociaciones Amazighs (FNAA) y la Fundación Aït Ljid por la Vida y la Lucha contra la Violencia. Las ONGs pidieron la intervención del Rey Mohamed VI en un comunicado y al primer ministro, Saad Eddine El Othmani, le exigieron que tomara medidas contra Ramid.

“En otra época, nadie se hubiera molestado por unas declaraciones tan lamentables, ni siquiera en la izquierda que defendía la emancipación social y política de los marroquíes”, apunta Larbi Ben Malek. En la última etapa de la historia de Marruecos han surgido colectivos, publicaciones, webs y personas que combaten la homofobia, el racismo, la opresión de la mujer y todo tipo de discriminaciones, sobre todo en ambientes universitarios y urbanos y en sectores de la clase media y media alta. Es el caso de grupos como la Asociación de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Marruecos (Kifkif), que cuenta con sólidos apoyos en España, el Movimiento Alternativo por las Libertades Individuales (MALI), o el joven escritor y cineasta Abdellah Taïa.