El peor partido en mucho tiempo obligó a Ancelotti a criticar a sus jugadores

El Real Madrid roza la tragedia ante el Leipzig el día de su 122 cumpleaños

Vinicius Junior durante el partido entre el Real Madrid CF y el RB Leipzig en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid el 6 de marzo de 2024 – PHOTO/JAVIER SORIANO/AFP

“Si cambiaba a todos los que estaban jugando mal, cambiaba hasta al entrenador”. Con esta frase de Carlo Ancelotti se podía resumir el partido del Real Madrid en los cuartos de final de la Champions. En los 120 minutos el equipo blanco fue peor que el Leipzig, tiró menos a puerta, llegó menos al área, dominó menos el balón, recibió más disparos en contra... una calamidad que no da para ganar la Champions.   

Con el PSG, el Bayern y el City ya en cuartos de final, este Real Madrid no llegaría vivo ni a los primeros 20 minutos. Lo mejor de todo es que queda un mes para ese cruce y el equipo blanco no puede jugar peor. Además, el cupo de suerte ya lo ha superado: el polémico gol del Leipzig en la ida y una amarilla a Vinicius, que rozó la roja, pudieron haber complicado la eliminatoria. El brasileño sigue pasado de revoluciones y Ancelotti ya no es capaz de calmarle. El futuro no pinta bien para él si llega Mbappé y su comportamiento no mejora.   

La autocrítica de Ancelotti se debió a una alineación inédita que debía jugar a un fútbol irreconocible. Cinco jugadores en el centro del campo, banquillo para Rodrygo y la intención de dominar el balón. Nada de eso lo sabe hacer el Real Madrid que acabó jugando sin ritmo y sin tensión con un montón de jugadores en el centro del campo que impedían que Kroos desplazase el balón limpiamente.   

El día empezó torcido para el club el día que cumplía 122 años. Bellingham fue sancionado con dos partidos por la roja que vio en Valencia. Tras el partido habló ante los medios para denunciar que: “Lo único que diré es que lo que pasó, pasó con el árbitro y su decisión de pitar. Hemos de recordar que es humano, pero yo también, deberían usar más el sentido común para juzgar mis acciones”.   

Vinicius Junior celebra el primer gol durante el partido entre el Real Madrid CF y el RB Leipzig en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid el 6 de marzo de 2024 – PHOTO/JAVIER SORIANO/AFP

Antes, la Fiscalía activó la maquinaria mediática contra Carlo Ancelotti por un supuesto fraude a Hacienda. El ruido fue pedir 4 años y 9 meses de cárcel para el italiano. Una sanción desproporcionada porque este caso es de 2015, Ancelotti ya ha depositado la multa y todo se reduce a un millón de euros, lo que corrobora la hipótesis de las “leyes del terror” como les llaman algunos abogados. Intimidar al acusado con la privación de libertad para que pague la multa y evitar el juicio y la exposición mediática. El afán recaudatorio contra este tipo de trabajadores se ha encontrado con Xabi Alonso y Ancelotti comentó tras el partido que seguirá sus pasos.   

Con todo eso el Real Madrid ponía el techo en el Bernabéu, previo visto bueno de UEFA, y con esa extraña alineación que nadie entendió, pero la inercia consiguió que una gran jugada entre Bellingham y Vinicius diera el primer gol a los blancos que, al final, sería decisivo porque Lunin paró más de la cuenta y Orbán anotó en un extraño cabezazo el 1-1. Dani Olmo tuvo en sus botas la prórroga en los últimos minutos, pero el larguero salvó a los blancos.

El entrenador alemán del Leipzig, Marco Rose (izq.), y el entrenador italiano del Real Madrid, Carlo Ancelotti, al final del partido entre el Real Madrid CF y el RB Leipzig en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid el 6 de marzo de 2024 – PHOTO/Pierre-Philippe MARCOU/AFP

Ancelotti no dio opciones a Brahim en un partido donde su control de balón hubiera sido esencial para dominar. Tras el partido, la periodista de Movistar+ Mónica Marchante anunció que Luis de la Fuente convocará al jugador para la próxima ventana de selecciones lo que provocará que tenga que decidir si elige a Marruecos o a España para su futuro internacional.   

Con todo esto, el Real Madrid se salvó de la tragedia en un mal día en la oficina en el que nadie acertó, pero el escudo le llevó a los cuartos de final, como dirían algunos. Los aficionados darán por bueno este resultado y el pobre juego si el equipo borra del mapa el mal mes de febrero y se pone a tono para afrontar el tramo final de temporada.