El sueño olímpico de Qatar

Doha, Qatar - PHOTO/PIXABAY
El país del Golfo busca ser la primera nación de Oriente Medio en albergar unos Juegos Olímpicos después del hito de acoger el Mundial de fútbol de 2022

Qatar se ha fijado el reto de albergar los Juegos Olímpicos de 2036, lo que le convertiría en el primer país de la región MENA (Oriente Medio y Norte de África) en organizar una cita olímpica. 

El país qatarí confirmó de esta forma su candidatura oficial para acoger los Juegos Olímpicos de Verano de 2036 en su capital de Doha, algo que también han hecho Estambul (Turquía), Ahmedabad (India), Nusantara (Indonesia) y Santiago (Chile). 

La capital de Doha sería la sede de los JJ. OO. si los acaba organizando el país qatarí. Precisamente, la nación dirigida por el emir Tamim bin Hamad Al-Thani tiene un gran poderío económico y financiero, derivado sobre todo de su industria del gas natural, y posee el principal atractivo de que el 95 % de las instalaciones requeridas para organizar la mayor cita deportiva del mundo lo tiene ya completado en la propia capital, como se asegura de manera oficial por parte del Estado qatarí. 

Qatar confiere una gran importancia al hecho de poder albergar en un futuro una cita tan importante como unos Juegos Olímpicos. En este sentido, el jeque Joaan bin Hamad Al-Thani, presidente del Comité Olímpico qatarí, afirmó que esta medida “refleja una visión nacional que considera al deporte como un motor de desarrollo y una plataforma para promover el entendimiento mutuo y la paz entre las naciones”. 

Qatar ya invirtió unos 300.000 millones de dólares en la construcción de estadios, hoteles, infraestructuras viarias y de transporte y una nueva red de metro en Doha como preparación para el pasado Mundial de fútbol, el cual recibió halagos por la buena organización que hubo, suponiendo en este caso la celebración por primera vez en la historia de una Copa del Mundo en un país de la región MENA. Precisamente, la capital qatarí de Doha será la sede de los Juegos Asiáticos de 2030, con unas instalaciones que podrían utilizarse durante los posteriores Juegos Olímpicos de 2036, según el propio Comité Olímpico de Qatar. 

Qatar ya recibió elogios por el despliegue realizado para el Mundial de fútbol de 2022 debido a la eficiencia logística que se dio en la cita mundialista y a la innovación e instalaciones de vanguardia desplegadas. Ahora, el objetivo es volver a destacar en la organización de un evento deportivo de magnitud mundial como son unos Juegos Olímpicos, con el reto de poner en valor la sostenibilidad y la innovación en las infraestructuras dispuestas. 

Este tipo de eventos sirve también para potenciar la imagen nacional del país organizador y serviría nuevamente a Qatar para consolidar su posición geoestratégica a nivel mundial como actor relevante globalmente, aprovechando en este caso el gran músculo económico y financiero del que dispone. Una estrategia de poder blando que también han seguido otras naciones muy destacables del ámbito árabe y del Golfo como Arabia Saudí o Emiratos Árabes Unidos, a través de diversas iniciativas internacionales relacionadas con sectores como el deporte, la protección del medio ambiente, la mediación internacional, el turismo o la asistencia humanitaria.