El Instituto de Crédito Oficial presenta en la feria IMEX Madrid sus herramientas de financiación para ayudar a las empresas que quieren salir al exterior

El 98 % de las operaciones de financiación del ICO en 2023 fue para las pymes

Julia Álvarez, del ICO, y José Terreros, director del IMEX - PHOTO/ATALAYAR

La tercera y última jornada de la feria IMEX Madrid, que se celebra en el Palacio de Cibeles, ha incluido numerosas charlas y mesas redondas destinadas a informar a las empresas sobre las herramientas que tienen a su disposición para encarar su internacionalización.

  1. La triple función del ICO
  2. Líneas de mediación
  3. Acuerdos con la banca privada
  4. Canal internacional

Éste fue el objetivo de la conferencia “Instrumentos de financiación del ICO para el apoyo a la internacionalización”, a cargo de Julia Álvarez, del Área de Mediación con Entidades Financieras del ICO.

Álvarez aclaró que “el ICO no tira de los Presupuestos Generales del Estado: su papel básico como banco público es acudir a los mercados de capitales para financiarse, emitiendo deuda (bonos, en este caso) que, al estar respaldados por el estado español, suponen una ventaja competitiva, porque le permite obtener precios más bajos y ofrecer mayores tipos de interés”.

Julia Álvarez, del Área de Mediación con Entidades Financieras del ICO

La triple función del ICO

La responsable de Mediación del ICO explicó la triple función que cumple este organismo, una entidad pública empresarial adscrita al Ministerio de Economía: “por un lado, ejerce como agente financiero del estado, distribuyendo los fondos FIEN y FONPRODE, o los avales que resultaron fundamentales durante las crisis del Covid y Ucrania; por otro, es un instrumento financiero de política económica, colaborando con la administración para movilizar recursos, especialmente fondos europeos; y en tercer lugar, es un banco público, que funciona con fondos captados en los mercados de capitales”.

Líneas de mediación

Como explicó Julia Álvarez, el ICO cuenta con líneas de mediación en dos bloques: una, destinado a cubrir las necesidades de las empresas dentro del territorio nacional, y otra que incluye productos específicos para las empresas que quieran invertir en el exterior.

“Tenemos la línea ICO Internacional, que se puso en marcha en 1993, destinada a cubrir las necesidades empresariales de todo tipo: inversiones, necesidades de liquidez, suministros, gastos de personal, alquileres, compras… Disponen de hasta 12,5 millones de euros, con amplios plazos de hasta 20 años, con tres de carencia”, aclaró.

A ésta se añade la línea ICO Exportadores, destinada a las necesidades a corto plazo, para disponer de liquidez, también con 12,5 millones de euros de máximo.

Líneas de financiación del ICO - PHOTO/www.ico.es

Acuerdos con la banca privada

Para que todas las empresas interesadas puedan acceder a estas líneas de financiación, el ICO ha suscrito acuerdos de colaboración con numerosas entidades financieras privadas españolas, en los que establece el tipo de interés máximo aplicable a las empresas que accedan.

De esta forma, el cliente pueda acudir a su oficina habitual y solicitar la línea que más se adapte a sus necesidades, facilitando la tramitación por medio de las redes de sucursales de las entidades.

Según Álvarez, “las ventajas de estas líneas de mediación son múltiples: gran flexibilidad de tamaños de empresas y sectores, y una tramitación muy fácil, ya que no se pide más documentación que la que necesite la propia entidad bancaria”.

La prueba de que estas fórmulas de financiación resultan muy atractivas para las pequeñas y medianas empresas es que, durante el año 2023, el 60% de las operaciones realizadas fueron con microempresas (menos de diez empleados), y el 98% con pymes.

Canal internacional

Por último, la responsable del ICO se refirió al Canal internacional de esta institución, que replica el esquema de financiación público-privado en los países donde se quieren implantar las empresas, trabajando con la banca local.

“No hay límites por el tamaño de la empresa o el sector, no hay establecido un tamaño máximo o mínimo. Solo se pide que exista lo que denominamos ‘interés español’, es decir, que la empresa tenga parte del capital social español; que adquiera bienes producidos por una empresa española; o que subcontrate algún proyecto a alguna empresa española. A día de hoy, hemos firmado más de 37 acuerdos con 20 contrapartes, movilizando más de 4.000 millones de euros”, concluyó.