El Gobierno griego airea la opción de 'urnas' ante las críticas en Syriza por cruzar 'líneas rojas'

Atalayar/Agencias

Pie de foto: Sonrisas del primer ministro griego, Alexis Tsipras, en el Cumbre europea

El portavoz del Gobierno griego, Gavriil Sakelaridis advierte a los críticos dentro de Syriza que el Gobierno "no podrá mantenerse" sin respaldo de sus diputados. En caso de no lograr el apoyo de los diputados de Syriza y del nacionalista Griegos Independientes, "la única salida son las urnas y el voto del pueblo". "¿Cómo se puede hacer un acuerdo que aumentará los suicidios y empobrecerá a la gente?", se preguntan dentro del partido Syriza.

Sakelaridis, ha defendido este martes las concesiones que ha hecho el Ejecutivo a los acreedores y advirtió a los críticos dentro de las filas de Syriza que el Gobierno "no podrá mantenerse" si no obtiene el respaldo de sus diputados y deberá acudir a las urnas. En unas declaraciones a la cadena de televisión privada Mega, Sakelaridis reconoció que las propuestas entregadas a las instituciones —Comisión Europea, Banco Central Europeo, Fondo Monetario Internacional— marcan una cierta "distancia" con el programa de Syriza, pero aseguró que siguen defendiendo un "reparto justo" de la carga social.

Sakelaridis señaló que una vez que se logre un acuerdo con las instituciones, este será remitido inmediatamente a los grupos parlamentarios donde todos los diputados "tendrán que asumir su responsabilidad". En caso de no lograr el apoyo de los diputados de la coalición gubernamental -el izquierdista Syriza y el nacionalista Griegos Independientes-, "la única salida son las urnas y el voto del pueblo", dijo. El plan presentado a los socios contiene concesiones que van claramente más allá de lo ofrecido hasta ahora y entre las medidas más duras figuran subidas del IVA en la factura de los hoteles, subidas de la carga fiscal de las empresas, así como de las cotizaciones a la Seguridad Social y de las contribuciones de los jubilados a los seguros de enfermedad.

Críticas en Syriza

Las reacciones en Syriza no se han hecho esperar. El vicepresidente del Parlamento, Alexis Mitrópulos, afirmó que las medidas "no se pueden votar, porque son extremas y antisociales". "Creo que este paquete no puede entrar así en el Parlamento", recalcó. Por su parte, el diputado de Syriza Yanis Mijeloyanakis calificó las nuevas propuestas de "lápida para Grecia" y opinó que el plan no pasará por los diversos órganos del partido. Según Mijeloyanakis, el nuevo plan es "peor que el primer rescate", ampliará la miseria social que Syriza se había comprometido a combatir. Asimismo, estimó que "con las nuevas medidas los griegos perderán dos salarios mensuales" e instó al Gobierno a decir "no" al compromiso, especialmente si no va acompañado de una reestructuración de la deuda y de un plan de inversiones. "¿Cómo se puede hacer un acuerdo que aumentará los suicidios y empobrecerá a la gente?", se preguntó. Mijeloyanakis dijo que él personalmente no apoyará un acuerdo con las características que se han conocido hasta el momento y fue aún más lejos al afirmar que "incluso diputados leales a Tsipras", que no pertenecen a ninguna corriente en concreto, no apoyarán un acuerdo de este tipo".

Pie de foto: Varias personas muestran banderas griegas en el Parlamento durante una manifestación convocada para pedir que Grecia continúe en la Eurozona, en Atenas, Grecia, el 22 de junio del 2015. (EFE/Yannis Kolesidis)

Las propuestas negociadoras

El nuevo plan griego contempla ingresos de 8.000 millones de euros entre 2015 y 2016 Las medidas abordan endurecimientos en el IVA y en las jubilaciones anticipadas que en el pasado Syriza se negaba a tocar. En concreto, el gobierno de Tsipras espera recaudar 680 millones en 2015 y 1.300 millones en 2016. El plan contempla restringir paulatinamente la jubilación anticipada, medida de la que espera ahorrar 60 millones de euros en 2015. Otras medidas tienen que ver con la cotización de las pensiones complementarias y el aumento de las contribuciones de los jubilados. La nueva propuesta presentada este lunes por Grecia a sus socios europeos contempla ingresos por un total de 8.000 millones de euros entre este año y 2016, según se desprende de la tabla que acompaña a las medidas, filtrada por los medios locales helenos. Una serie de medidas que aborda endurecimientos en el IVA y en las jubilaciones anticipadas que en el pasado Syriza se negaba a tocar.

Reforma de pensiones

El plan contempla restringir paulatinamente la jubilación anticipada, medida de la que espera ahorrar 60 millones de euros en 2015 y 300 millones en 2016. Además, prevé el aumento de las cotizaciones a las pensiones en un 3,9%, lo que arrojaría unos ingresos adicionales de 350 millones en 2015 y de 800 millones en 2016. El aumento del impuesto de lujo y de la propiedad de yates privados arrojaría 47 millones este año También aumentarían las cotizaciones a las pensiones complementarias, del 3% actual al 3,5%, lo que generaría ingresos de 120 millones en 2015 y de 250 millones en 2016. A ello, se suma el aumento de las contribuciones de los jubilados al seguro de enfermedad del actual 4% a un 5% para las pensiones regulares, y del actual 0% a un 5% en las pensiones complementarias. Con ello, el Gobierno espera recaudar, en el caso de las pensiones principales, 135 millones en 2015 y 270 millones en 2016; en el caso de las complementarias, no se esperan ingresos en este ejercicio, pero sí 240 millones el próximo año. En Grecia conviven dos sistemas en las pensiones, y además de la jubilación estatal (regular), existe un seguro adicional (complementaria) que engloba a las distintas profesiones y que, por regla general, se financia igualmente con contribuciones de empleados, patronos y del Estado.

Reforma del IVA

Con la reforma del impuesto sobre el valor añadido (IVA), que, según los medios, contempla algunas concesiones a los socios como la de elevar la carga fiscal a los hoteles, el Gobierno de Alexis Tsipras espera recaudar 680 millones en 2015 y 1.300 millones en 2016. Según la prensa local, el nuevo plan propuesto por el Gobierno griego mantendría tres tipos de IVA, el 6%, el 13% y el 23%, a diferencia de los dos que defienden las instituciones con las que debe negociar. Esta vez Atenas estaría dispuesta a cambiar la imposición sobre algunos productos o sobre los hoteles para aumentar los ingresos fiscales, como piden las instituciones, Comisión Europea (CE), Banco Central Europeo (BCE) y Fondo Monetario Internacional (FMI). En este sentido, en la tasa mínima del 6% (ahora situada en el 6,5%) quedarían solo los medicamentos, los libros y el teatro, mientras que los hoteles, actualmente en el 6,5 %, pasarían a tasarse con un 13%. El 13% se seguiría aplicando a los alimentos y a los productos energéticos y el resto se gravaría con un 23%. Según fuentes gubernamentales citadas por los medios griegos, la propuesta conlleva también la supresión del IVA reducido en las islas, una iniciativa que el socio de la coalición de Gobierno, Griegos Independientes, ha rechazado de pleno, amenazando incluso con su salida del Ejecutivo.

Otros impuestos

 Impuesto sobre beneficios y sociedades. Otro punto de la propuesta es la creación de un impuesto especial del 12% a todos los beneficios empresariales que superen el medio millón de euros anual, que permitiría recaudar 945 millones de euros en 2015 y 405 millones en 2016. La subida del impuesto de sociedades a partir del próximo año en tres puntos porcentuales, hasta el 29%, elevaría los ingresos en otros 410 millones de euros en 2016.

Impuesto de solidaridad. El Gobierno contempla además aumentar el impuesto de solidaridad, creado tras la firma del primer rescate en 2010, lo que elevaría los ingresos fiscales en 220 millones en 2015 y en 250 millones en 2016. Por otro lado, el Ejecutivo se compromete a reducir los gastos de defensa en 200 millones de euros en 2016.

Tasa televisiva.  Otra medida contempla introducir una tasa a la publicidad en televisión, que permitiría ingresar, según los cálculos del Gobierno, 100 millones de euros este año y otro tanto en 2016.

Impuesto de lujo. Finalmente, el aumento del impuesto de lujo y de la propiedad de yates privados arrojaría 47 millones este ejercicio y el mismo monto en 2016.