Marruecos acelera su crecimiento económico y comercial y recibe apoyo de la UE

 

La economía marroquí va viento en popa. Su crecimiento sostenido desde hace varios años, el incremento del comercio y de  la innovación e internacionalización del sistema productivo y el apoyo de la Unión Europea (UE), han transformado el panorama económico y social  de Marruecos. Los agoreros y  partidarios del lema “todo es un desastre” dirán que el país aún tiene muchos problemas. Es cierto. La corrupción, la pobreza y las desigualdades y la baja productividad son algunos de estos problemas, pero hay que ver la botella medio llena y no medio vacía. Es la mejor manera de solucionar los problemas y ofrecer perspectivas a la sociedad. Desde este punto de vista, es absurdo, además de falso, afirmar que Marruecos no evoluciona económicamente. La mayoría de los datos macroeconómicos apuntan en esta dirección. Ciertamente la situación no es perfecta y la mitad del Producto Interior Bruto (PIB)  del país se concentra en cuatros regiones: el Gran Casablanca (20,7%), Rabat-Salé-Zemmur-Zaer (12,2%), Marrakech-Tensift-El Hauz (8,4%) y Chauia-Uardigha (8,2%). El resto del país -12 regiones- se encuentra muy por detrás en producción de riqueza, según las autoridades marroquíes. El diario económico ‘Les Eco’ señala que “las desigualdades aumentan entre las regiones” y el 40% de la actividad del sector servicios se concentra en las regiones de Casablanca y Rabat. Si en términos de desigualdad interregional Marruecos tiene todavía que hacer grandes esfuerzos para lograr una mayor cohesión, en el ámbito de la innovación, el país norteafricano ha realizado un progreso notable, aunque esté mal colocado en el  mundo árabe. Según el Índice Mundial de Innovación publicado en Ginebra por la Universidad Cornell y otras instituciones como la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), Marruecos se sitúa en el puesto número 84 sobre un total de 143 países estudiados. En este sentido, el Reino Alauí ha mejorado 32 puntos, pero se encuentra en peor situación que otros países de su entorno. 

 

El informe establece que hay un colectivo de 32.000 marroquíes expatriados y  altamente cualificados que ejercen como ejecutivos y profesionales en el sector privado. Se concentran principalmente en Francia (32%), España (20%),  Italia (12%), los países árabes (6%), Estados Unidos y Canadá (3%). En el mundo, Suiza, (por cuarto año consecutivo) encabeza la clasificación en innovación. Después, vienen el Reino Unido, Suecia, Finlandia, los Países Bajos, Estados Unidos, Singapur, Dinamarca,  Luxemburgo,  Hong Kong y China. España ocupa el puesto 27. El estudio tiene en cuenta factores como los ecosistemas de innovación, las inversiones en capital humano y los niveles  de creatividad. En el mundo árabe, los Emiratos Árabes Unidos (EAU) son el país mejor colocado (36); EAU se sitúa por delante de Arabia Saudí (38),  Catar (47), Jordania (61), Kuwait (69), Túnez (78), Marruecos (84), Egipto (99) y Argelia (133).

 

Asimismo, en integración comercial, Marruecos ocupa el puesto 53 sobre 131 países analizados. La apertura de Marruecos a la economía mundial contribuye al desarrollo del país. La buena marcha de la economía marroquí es tenida en cuenta por los mercados y los organismos internacionales. Tanto es así, que la Unión Europea (UE) concedió a Marruecos una donación de 60 millones de euros para financiar la segunda fase del programa de apoyo a la política del sector agrícola. Este acuerdo de financiación, que se firmó el pasado 18 de julio,  tiene como objetivo durante un plazo de cuatro años  contribuir a la mejora de los ingresos de los pequeños agricultores y reforzar   varios sectores de producción (aceitunas, dátiles, almendras y carne de cordero) en las regiones interesadas para integrar a más jóvenes y mujeres a los proyectos de la segunda etapa del Plan Marruecos Verde (PMV). Marruecos es también una potencia económica africana que invierte en el continente más pobre del planeta. Pero los intercambios comerciales siguen estando por debajo de las posibilidades del país norteafricano, según un estudio sobre la Alianza Marruecos-África publicado por el Instituto Amadeus. “Las numerosas y exitosas historias económicas marroquíes no pueden ocultar que los intercambios comerciales [entre Marruecos y África] son débiles. El volumen de intercambios en 2012 fue de 4.000 millones de dólares. Marruecos es el 46º socio comercial de África, está detrás de Argelia (41º) y Túnez (38º). En el ámbito internacional, África es el cuarto socio de Marruecos, con el 6,5% del comercio exterior total marroquí”, indicó en la presentación del estudio en Marruecos el presidente del Instituto Amadeus, Brahim El Fassi. Por otra parte, en Túnez, la situación económica es frágil, según  el Fondo Monetario Internacional (FMI). Para el FMI, la inflación relativamente alta -5,7% en junio-, los desequilibrios exteriores y  la depreciación del dinar ( divisa nacional) son elementos negativos que frenan el despegue económico. El FMI prevé para Túnez un crecimiento del 2, 8% en 2014.