Omán insiste en la privatización de las empresas estatales
El Gobierno de Omán ha lanzado un programa de privatización de empresas gubernamentales, que está controlado por el fondo soberano.
Mascate está siguiendo los pasos de sus países vecinos, como Arabia Saudí y los Emiratos de Abu Dabi y Dubái, al vender diversos activos, como la energía, minería y otros, para lograr el mayor beneficio que es atraer a las inversiones extranjeras, sabiendo que son países ricos en minerales.
Vale, empresa de minera brasileña, realizó un anuncio sobre la compra de la participación del grupo global integrado de energía OQ en su empresa conjunta.
OQ, actualmente conocido por propiedad de la Autoridad de Inversiones y anteriormente como Oman Oíl Company, había comprado una participación en Vale Omán en el año 2010.
La idea principal de este acuerdo de OQ es conseguir atraer a las inversiones extranjeras y obtener alianzas para poder utilizar los recursos naturales del país.
Guillermie Reinisch, presidente de Vale Omán, dijo: "Brindamos orientación a la empresa sobre cómo tomar decisiones comerciales, para así obtener inversiones exitosas en la región". OQ tiene un papel muy importante en el apoyo a todos los socios en el Sultanato de Omán.
Además, se explicó que Vale Omán sigue obteniendo mejoras positivas en la expansión en el Sultanato y en la región de Oriente Medio, con el fin de lograr neutralidad global en carbono.
Vale Omán fabrica nueve millones de toneladas de mineral de hierro al año y tiene un centro de distribución con una capacidad de 40 millones de toneladas. La compañía apoya el desarrollo de la cadena del suministro local y a los proyectos de RSE con unas inversiones elevadas de 1.400 millones de dólares.
Para mejorar el entorno de negocios, OQ planea recaudar 224 millones de dólares mediante la compra de Abraaj, una unidad enfocada en la perforación en la industria de petróleo y gas. Algunos de los inversores que atrajo Abraaj fue Saudí Omaní Investment Company, propiedad total del Saudí Wealth Fund, la Oficina de Asuntos de la Corte Real de Omán y Schlumberger Omán, los cuales quieren participar en el 40% de la oferta.
El Gobierno definió sus planes para vender los activos, mientras trata con un déficit presupuestario después de que los precios del petróleo golpearan los ingresos. El objetivo es trasladar estas acciones a nuevos propietarios que sean adecuados para ellas.
Cabe destacar que, entre las compañías de energía, se encuentra Salalah Methanol Company, que fue fundada en 2006 y es propiedad de Omán Oil Company en un 90%, mientras que Takamul Investment Company posee el resto, señalando que para el Gobierno es muy importante y que se toma muy enserio la privatización y las inversiones de una empresa.
En 2020, el Gobierno se propuso un plan para poner fin a la dependencia de los ingresos energéticos mediante la diversificación de las fuentes de ingresos y por la crisis que produjo la guerra Ucrania-Rusia, lo que les dio una oportunidad a los funcionarios, ya que hubo consecuencias globales como por ejemplo el aumento de los precios del crudo en los mercados generales. Con esto se espera que el país logre un superávit financiero que no se había visto desde 2013.
La confianza en los mercados de deuda internacionales en medio de los crecientes ingresos petroleros ha ayudado a impulsar la agenda de reformas del Gobierno, que obtuvo un préstamo hace unos meses para ayudar a continuar con su plan para salir de la crisis financiera.
El pasado mes, Mascate completó el proceso de un préstamo de refinanciación, aumentando la financiación a 4.000 millones de dólares.