Marruecos refuerza su Ejército con el sistema antiaéreo VL MICA y los todoterrenos Sherpa
Las Fuerzas Armadas del Reino de Marruecos (FAR) han recibido el sistema antiaéreo VL MICA y varios vehículos blindados Sherpa de Francia, dos años después de que ambos países acordaran el envío de estos sistemas. Con estas adquisiciones, las FAR siguen reforzando sus capacidades de defensa, modernizando aceleradamente sus Fuerzas Armadas.
El VL MICA es un sistema de defensa aérea de corto alcance y lanzamiento vertical con una cobertura de detección de 360 grados que permite la intercepción de aeronaves, helicópteros drones y misiles con un alcance de 20 kilómetros y 9.000 metros de techo de vuelo. Este sistema puede actuar en todo tipo de condiciones meteorológicas, y, según la empresa productora, MDBA, puede equipar tanto un cabezal de búsqueda de calor como un cabezal con radar activo, lo que, promete la empresa, “garantiza una probabilidad de destrucción excepcional”.
El sistema está compuesto de un centro de mando, un radar y entre tres y seis lanzadores verticales instalados en camiones, requiriendo, asimismo, de un vehículo de apoyo logístico. Con esta adquisición, Rabat se une a países como India, Francia, Emiratos Árabes Unidos, Qatar o Arabia Saudí, que ya cuentan en su haber con el VL MICA.
Este sistema, del que Rabat ha obtenido dos baterías por una suma de 192 millones, y pudiendo a acceder a otras cuatro según el contrato, se unirá a los sistemas chinos Sky Dragon y FD-2000B para completar las defensas aéreas marroquíes. Asimismo, Rabat espera la entrega del potente sistema norteamericano MIM-104F (PAC-3) Patriot, así como el Barak 8 israelí, estableciendo un potente escudo para asegurar los cielos del Reino.
Por el mismo contrato, el Reino también recibirá los Sherpa Light de la empresa francesa Arquus, los cuales ya habrían empezado a ser desplegados por el país. Este vehículo, habitual en las operaciones de la OTAN, es un todoterreno acorazado, que puede servir varias funciones, desde las patrullas al traslado de heridos. Armado con una torreta dirigida por control remoto, Rabat se habría hecho, principalmente, con las variantes de transporte de tropas.
Este no es el único equipo francés recibido por el país árabe. Francia es, junto a Estados Unidos, uno de los principales proveedores de armamento del Reino. Rabat ahora espera, también, la llegada de 36 cañones CEASAR 155mm, un potente sistema de artillería con un alcance de 40 kilómetros, que ha pasado a la fama por su eficaz uso por parte de las Fuerzas Armadas ucranianas.
Con un presupuesto militar superior al 4% del PIB, y en continuo aumento, Marruecos se ha convertido en uno de los mayores compradores de armas del continente, acompañando sus esfuerzos de modernización. Ante la inestabilidad de la región vecina del Sahel, el conflicto del Sáhara Occidental y la creciente rivalidad con Argelia, el Reino está apostando por incrementar sus capacidades, convirtiéndose en toda una potencia militar. Precisamente, alcanzar a su vecino argelino, tradicionalmente considerado como el Ejército más poderoso del Magreb, sería uno de los principales objetivos marroquíes.
Las relaciones entre los dos vecinos norteafricanos han empeorado rápidamente en los últimos meses, después de que Argelia cortara el suministro de gas al reino alauí y rompiera las relaciones diplomáticas, en el contexto de la ruptura del alto el fuego con el Frente Polisario en el Sáhara Occidental y de la recepción del apoyo de varios países, como Estados Unidos, España, EAU o Israel, a la propuesta de autonomía de Rabat.
Argel cuenta con una tradicional y profunda relación de defensa con Rusia, su principal proveedor de armamento, lo que le ha permitido establecer un potente Ejército. Y Argelia también está rearmándose rápidamente, aguantándole el pulso armamentístico al Reino, con potentes adquisiciones a la industria de defensa rusa, como el sistema antiaéreo S-400 Triumf, aeronaves Sukhoi Su-30 o tanques T-90S.
Mientras, Rabat sigue acercándose a los estándares occidentales, y aprovechando su renovada cercanía con auténticas potencias armamentísticas como Estados Unidos e Israel, abriendo la puerta de sistemas cada vez más modernos que ayuden al Reino a disuadir un potencial ataque argelino y a defenderse en caso de que la “guerra fría” que mantienen los dos países árabes derive en una “guerra caliente”.