Barham Saleh: “Estabilizar Irak sería dar un paso al frente en la lucha contra el terrorismo”
Después de muchos años de inestabilidad en Irak, la esperanza pasa por sentarse a negociar y encontrar acuerdos. No sólo por parte de los países involucrados, claro está. La ayuda de toda la comunidad internacional es esencial para acabar con un conflicto que lastra al Estado iraquí. “El mundo entero debería tener especial interés en que la transición en Irak sea fructífera”, afirmaba el presidente de Irak, Barham Saleh. Lo ha hecho en la segunda jornada de la semana de ponencias organizada por Brookings Foreign Policy denominada “Oriente Medio y la nueva Administración de Estados Unidos”, que en esta ocasión ha comenzado analizando la tensa situación que lleva años atravesando la región que engloba Irak, Siria o Irán, entre otras.
La amenaza terrorista supone una constante desde hace tiempo en Oriente Medio, y superar la peligrosidad a la que está sometida la población rodeada por grupos armados como Al-Qaeda o el autodenominado Estado Islámico, debe ser tarea común de todos los países, no sólo de aquellos que lo viven de forma más próxima. Y lo debería ser porque la amenaza existe en todo el planeta, no sólo en esta región. Vencer el potencial de organizaciones terroristas tan peligrosamente preparadas como estas es tarea imposible para un grupo específico de países. Lo dejaba claro el presidente iraquí: “Si no actúa toda la sociedad internacional junta, será imposible poner fin a la amenaza terrorista”.
También ha querido hacer referencia a la relevancia que tiene en su país el sector más joven de la población que, según Saleh, ya demanda una nueva generación de jóvenes líderes políticos que den un cambio a la situación que llevan años atravesando. Es por eso por lo que la educación supone un pilar esencial en la futura reconstrucción de Irak, aunque el presidente clarifica que de nada servirá si no consiguen su objetivo fundamental como es crear empleo e incrementar su poder económico. No obstante, para esto último el Estado Iraquí cuenta con la vital ayuda de Estados Unidos, ya que como dice, “Sabemos que Joe Biden estará ahí para ayudar a nuestro país”.
Estados Unidos sabe que debe asumir un papel importante como mediador en esta serie de conflictos, como lo es el que mantiene unidos históricamente a su aliado, Israel, y a Palestina. Y no sólo eso, desde diferentes sectores demócratas se reclama una mayor implicación en cuanto a ayuda humanitaria se refiere. El hecho de no mantener unas buenas relaciones con Palestina no debería ser motivo para no contribuir a paliar las terribles consecuencias que sufre la población: “es una cuestión de humanidad”, manifestaba Gregory Meeks. Aunque también se mostraba crítico con Israel ya que cree deben tener una mayor implicación y poner más de su parte si de verdad quieren resolver sus diferencias con el país liderado por Mahmud Abás: “La solución del conflicto palestino debe ser cosa de los dos”.
Pero no sólo quiso hacer referencia al conflicto que involucra a los de Netanyahu con Palestina, también quiso hablar del importante proceso en pro de la democracia que se está llevando a cabo en Libia: “La transición libia la debemos hacer todos juntos. Es un buen momento para apostar por ellos”, dijo Bourita. Tras el Foro de Diálogo Político Libio organizado en Ginebra, el proceso hacia una verdadera democracia continúa y la ratificación de los nuevos componentes del Gobierno libio sólo es el preámbulo de las elecciones previstas para finales de este año, concretamente el 24 de diciembre.