Sam Ben-Chétrit se describe a sí mismo como un orgulloso patriota marroquí, ha dedicado su vida a promover la cultura y los valores marroquíes

Ben-Chétrit, presidente de la Federación Mundial del Judaísmo Marroquí: “Israel tiene el deber moral de reconocer la soberanía de Marruecos sobre su Sáhara”

Sam Ben-Chétrit

“Es deber de Israel reconocer la soberanía de Marruecos sobre su Sáhara", declaró Sam Ben-Chétrit, presidente de la Federación Mundial del Judaísmo Marroquí. Nacido en Talsint, una comuna rural de la provincia de Figuig, en 1938, Ben-Chétrit se describe a sí mismo como un orgulloso patriota marroquí. Ha dedicado su vida a promover la cultura y los valores marroquíes en todo el mundo, pues su federación tiene filiales en Europa, Canadá y Estados Unidos. Aunque ahora vive en Israel, dice que ante todo es ciudadano marroquí. De hecho, su amor por Marruecos se expresa en cada palabra que pronuncia. Le gusta decir que uno de los objetivos de la Federación es transmitir a las nuevas generaciones de marroquíes en el extranjero el orgullo de la gloriosa Marcha Verde, que es una brillante ilustración del genio político del difunto Su Majestad Hassan II. 

Sam Ben-Chétrit

Ben-Chétrit, que también es presidente del “Comité Nacional para la Memoria del difunto SM Hassan II”, que fundó con el expresidente israelí Simon Peres, se emociona cada vez que recuerda sus diez encuentros en Rabat con el difunto SM Hassan II. Fue durante una de estas reuniones cuando Ben-Chétrit dijo que estaba dispuesto a ir a Marruecos con “40 oficiales judíos de origen marroquí” para defender la soberanía del Reino sobre el Sáhara marroquí. 

“Incluso, años después, sigo luchando para que la comunidad internacional reconozca la integridad territorial del Reino", declaró Ben-Chétrit. Además, según el presidente de la Federación Mundial del Judaísmo Marroquí, Israel tiene el “deber moral” no sólo de reconocer, sino también de promover en todos los foros internacionales la soberanía de Marruecos sobre sus territorios históricos. “Marruecos es sinónimo de tolerancia, paz, diálogo y cohabitación entre diferentes culturas y religiones. En Marruecos existe una verdadera libertad de culto. Debemos recordar que, en Europa, donde nació la Ilustración, los judíos eran perseguidos, mientras que Marruecos los protegía. Los judíos marroquíes y los judíos de todo el mundo debemos estar agradecidos al Reino de Marruecos y a sus soberanos, que a lo largo de su historia siempre se han negado a hacer distinciones entre sus súbditos”, reiteró Ben-Chétrit, en su despacho donde ondea orgullosa la bandera marroquí. 

Anna Mahjar-Barducci 

Investigadora y escritora marroquí-italiana.