David Henneberger, director de la oficina en España de la Fiedrich Naumann Foundation, repasó en "De cara al mundo", en Onda Madrid, los resultados de las elecciones en Alemania

David Henneberger: “Las generaciones más jóvenes de Alemania quieren reformas profundas para las próximas décadas”

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Las elecciones celebradas en Alemania han supuesto un cambio en la etapa política del país y por ende, para Europa. Estos comicios han sido los primeros en 16 años en los cuales no figuraba Angela Merkel, cerrando así su última y cuarta legislatura. Los resultados han dado la victoria al partido socialdemócrata, el SDP, en un contexto en el que se espera que los verdes y los liberales pacten un gobierno de coaliccón. Hablamos con David Henneberger quien nos ha dado las claves que representan estos nuevos resultados. 

En primer lugar, hay que felicitar a los liberales por el buen resultado de las elecciones que han otorgado a su partido un papel clave para la formación del gobierno.

La verdad que nos encontramos en un buen momento para el liberalismo alemán y estamos muy contentos al respecto. Ahora mismo, nos ponemos al servicio de los jóvenes donde somos la mayor fuerza entre los que votaron por primera vez. 

El Partido Liberal en Alemania, servirá de balanza entre un lado y otro para la gobernabilidad, un papel que los liberales han tenido siempre en la política de Alemania tras la Segunda Guerra Mundial.

Así es, en Alemania realmente existe un espacio de centro donde los liberales, desde hace décadas en la República Federal de Alemania, hemos gobernado tanto con la con la socialdemocracia como con los conservadores. La novedad es que hoy en día es más necesario que nunca que haya coaliciones entre el centroderecha y el centroizquierda. En Alemania existe un cordón sanitario con la extrema derecha, entonces simplemente por aritmética es necesario que el partido que gobierne use a la centroderecha y la centroizquierda. Además, ya no basta con dos partidos, hay que contar con la unión como opción. A nivel federal se requieren tres partidos para formar un gobierno con una mayoría absoluta en el Parlamento alemán.

Cabe recordar que durante las dos últimas legislaturas se produjo en Alemania una gran coalición entre socialdemócratas y conservadores, la opción del nuevo gobierno que popularmente se llama “semáforo” (por los colores de los tres partidos que integran la coalición). La coalición en este caso serían los verdes y liberales con los socialdemócratas de Olaf Scholz, que son los que han ganado las elecciones. No será fácil el acuerdo. ¿Qué condiciones se tendrán que cumplir?

Actualmente los tres partidos están en negociaciones, no para formar gobierno, sino en prenegociaciones donde los tres partidos intentan buscar un proyecto común para esa coalición de cuatro años. No se trata de encontrar compromisos al detalle sino de un proyecto en conjunto. El partido liberal comparte muchos valores en política social con el centroizquierda como puede ser el apoyo a las minorías, el rol que debe desempeñar la mujer en la sociedad, una política más liberal en drogas como el cannabis, etc. Con los verdes hay un acuerdo en el bloque referente a la política exterior, una visión digamos de un rol de mayor unión dentro de Europa, con una posición firme frente a Rusia y China. En mi opinión, los temas que van a ser más complicados son las finanzas, los liberales están absolutamente en contra de cualquier subida de impuestos, queriendo mantener el freno de endeudamiento que está en la constitución alemana.

Por otro lado, los socialdemócratas y los verdes quieren subir ciertos impuestos, los socialdemócratas además quieren introducir un impuesto sobre el patrimonio, ahí las negociones sufrirán puntos de fricción. De igual forma, otro punto complicado en las negociaciones será el gran tema de los verdes, el cambio climático. Sin embargo, bien es cierto que las metas de los tres partidos son bastante parecidos. La gran pregunta es ¿cómo van a conseguir entenderse? Por ejemplo, los liberales quieren poner un precio de CO2 fijo, habrá que decidir qué forma es la más eficiente. Los verdes y los socialdemócratas quieren poner una política más estricta, empleando ciertas tecnologías, subiendo el precio de la gasolina, etc. La buena noticia es que las metas de cada uno en ese ámbito tampoco son muy diferentes.

Después de Angela Merkel y sus 16 años al frente del gobierno y con todos los temas que hay sobre la mesa, la voluntad política de los tres partidos es que se abra una nueva era política en Alemania, donde la existencia de acuerdos es imprescindible para no defraudar la voluntad de los alemanes. 

Claro esta es un poco la sensación en Alemania al final los hechos son que verdes y liberales de forma conjunta, entre los jóvenes y los que tienen menos de setenta y cinco años, casi llegan a la mayoría absoluta. Estos grupos son una muestra clara de que las generaciones jóvenes en Alemania no están de acuerdo con el estatus quo y quieren cambios y reformas profundas para las próximas décadas, como por ejemplo en el ámbito del cambio climático, en asuntos burocráticos, en cuanto a digitalización, o en educación. Estos temas son por los que enfrentamos con optimismo el poder llegar a un acuerdo, y mejorar las perspectivas de Alemania en las próximas décadas. Mientras tanto, en SPD siguen siendo fuertes, pero claramente han perdido posiciones.

Es interesante que después de las primeras charlas entre los verdes y los liberales el candidato a la Cancillería de SPD se ha adaptado un poco al lenguaje de los verdes y de los liberales, hablando de un proyecto a futuro con reformas profundas. De hecho, se ha entendido que el único camino es hacia la coalición de semáforo, que puede ser el único que afronte estas reformas profundas. Bien es cierto que Angela Merkel, hasta sus críticos en Alemania lo reconocen, ha sido una excelente gerente durante las diferentes crisis que ha afrontado durante su etapa al frente del Gobierno: la crisis financiera, a la que después se le sumo otra, la crisis migratoria, manejada con mucho talento, compromiso y hablando a nivel europeo con sus contrapartes, llegando a estabilizarlos, la crisis sanitaria provocada a raíz de la pandemia del coronavirus, etc. Pero no hay reformas profundas desde hace 16 años, no hay ninguna reforma económica importante, y es necesario para regresar a un camino de crecimiento más fuerte y a la modernización del país. Siempre digo, por ejemplo, que en el AVE de España el internet es mejor que en el centro de Berlín, es un poco triste, pero cierto, aún hay grandes tareas que afrontar.

 

Ustedes por suerte tienen cierta responsabilidad con la Unión Europea y estamos todos los países europeos pendientes del Gobierno de Alemania, que de alguna manera va a ser también buena parte del Gobierno de la Unión Europea.

Si la buena noticia, ya desde mucho antes de las elecciones, es que en Alemania los tres candidatos a la Cancillería eran profundamente pro-europeos. En Alemania no hay ninguna fuerza política que tenga ese discurso, ninguna fuerza política relevante lo tiene. Ahora hay un nuevo esfuerzo para para fortalecer a Europa en términos financieros. Aquí escucho ya muchas de las de las preocupaciones también con respecto a la política financiera de la UE este. Es importante entender que las diferencias no son tan relevantes entre los partidos del centro de Alemania. Hay diferentes puntos de vista sobre ciertos detalles, pero en general la responsabilidad fiscal es algo importante, no solo para los partidos de centro, sino para los alemanes en general, como pasa en muchos otros países en el norte de Europa.