Disputa en Libia por la aprobación del nuevo gobernador del Banco Central
Las tensiones en Libia parecen llegar a su fin. La Cámara de Representantes aprobó por unanimidad el nombramiento de Naji Muhammad Issa Belkacem como gobernador del Banco Central de Libia y de Marai Muftah Raheel Al-Barassi como su adjunto, a pesar de la controversia sobre el número de votos necesarios.
La Cámara de Representantes no tuvo suficiente participación durante su sesión, a pesar de la presencia de miembros de la región occidental, lo que plantea dudas sobre la posición del Consejo Presidencial, que estableció la finalización de la votación y la realización de una sesión pública para aceptar el nombramiento de un nuevo gobernador y su suplente.
En una carta dirigida a la misión de la ONU en Libia, el asesor del Consejo, Ziad Daghim, instó a seleccionar y aprobar al nuevo gobernador según lo establecido en el acuerdo político, en una sesión pública transparente. En ella se menciona que se necesita la aprobación de 110 de los 165 representantes de la Cámara de Representantes para la votación.
Sin embargo, según círculos parlamentarios, se necesita un mínimo de 84 miembros para la sesión; y para aprobar el acuerdo se requiere la aprobación de dos tercios de los votos, es decir 108 miembros son los necesarios para nombrar al gobernador: lo que cumpliría con los requisitos legales para garantizar la legitimidad de la ratificación del acuerdo por parte del Parlamento.
El portavoz del consejo, Abdullah Belhaq, anunció que, en la reunión con 108 representantes, dirigida por Aguila Saleh, se aprobó el acuerdo y se designó a la nueva dirección. Belhaq señaló que una vez sea ratificado el acuerdo, el Consejo de Administración del banco se constituirá en un plazo de diez días.
La oficina de prensa del Consejo compartió una imagen de la carta del presidente Jaled Al-Mishri a la encargada de negocios de la UNSMIS, Stephanie Khoury, donde se muestra la lista de los 112 miembros del Alto Consejo de Estado que respaldan la propuesta de la UNSMIS. De acuerdo con las cartas firmadas, y enviadas a Stephanie Khoury, la jefa interina de la misión de la ONU, por Al-Mishri y Takala, más de 100 miembros del consejo apoyan el acuerdo CBL.
Según las leyes de Libia, el Acuerdo Político Libio requiere que la Cámara de Representantes consulte al Consejo Supremo de Estado al elegir a los líderes de puestos clave, como el gobernador del Banco Central de Libia, en un plazo de 30 días después de la nominación del candidato. Los cargos serán aprobados por dos tercios de los miembros de la Cámara de Representantes.
En consonancia con lo establecido en el acuerdo, Issa y Al-Barassi serán designados para los dos cargos mencionados en el artículo 15 en una semana desde la firma del acuerdo, y la Cámara de Representantes tomará una decisión al respecto.
Por su parte, el primer ministro Abdul Hamid Dbeibah felicitó a los libios por ratificar el acuerdo en la Cámara de Representantes, destacando su apoyo para fortalecer el dinar libio y aliviar el sufrimiento causado por decisiones arbitrarias.
Dbeibah declaró que están decididos a tomar todas las acciones necesarias en coordinación con las instituciones pertinentes. También felicitó los esfuerzos realizados y las medidas positivas que han corregido la situación en el Banco Central.
En paralelo, Muhammad Takala, uno de los candidatos a la presidencia del Consejo, enfatizó la importancia del acuerdo del Banco Central para unificar las instituciones económicas y promover la estabilidad. Destacó la necesidad de cumplir las disposiciones del acuerdo y completar la asignación del Consejo de Administración del banco en los plazos establecidos. Takala pidió que se abran y se mantengan las instalaciones petrolíferas lejos de los problemas políticos, ya que son muy importantes para la economía del país y para satisfacer las necesidades de la gente.
La llegada de Naji Muhammad Issa Belkacem significará políticas de fortalecimiento del dinar frente al dólar, mediante la suspensión del impuesto de cambio oficial -pendiente de aprobar-, la reducción del mercado negro que están acabando con el mercado de materias primas, el aumento en la concesión de créditos, y una situación que ayude a la vuelta a la normalidad en cuanto a la exportación de petróleo.
En base a los hidrocarburos, el jefe del Sindicato General del Petróleo, Salem Al-Rumaih, espera que la reanudación de la producción en los yacimientos petrolíferos libios ayude a revitalizar la economía, en parte, gracias a la continua extracción de crudo que se ha mantenido por parte de la Compañía del Golfo en los campos de Marsa al-Brega y Sarir.