Cuatro israelíes muertos en un ataque en Cisjordania
Nueva escalada de violencia en Cisjordania. Cuatro israelíes han muerto y varios han resultado heridos, uno de ellos de gravedad, tras un tiroteo en una gasolinera a las afueras de Eli, un asentamiento entre Nablus y Ramallah. Al menos dos palestinos miembros del ala militar de Hamás estuvieron involucrados en el ataque, aunque el grupo terrorista no ha reclamado su autoría. Ambos fueron eliminados tras el tiroteo, uno por un civil armado cerca de la gasolinera y otro por las fuerzas de seguridad mientras trataba de huir.
Hamás y la Yihad Islámica Palestina han elogiado el ataque, mientras que en ciudades como Yenín o Gaza se distribuyeron dulces para celebrar el tiroteo. “Esta gran intifada continuará y no se detendrá hasta que se logren los objetivos palestinos de libertad e independencia”, declaró el portavoz de Hamás, Hazem Qasem, quien definió a los atacantes como “revolucionarios”.
La Yihad Islámica, por su parte, calificó el atentado como “una respuesta natural a la escalada de crímenes de la ocupación”. El grupo terrorista también alabó “la heroica operación guerrillera” que muestra “la vitalidad de la resistencia”.
Tras el ataque a las afueras del asentamiento -que dejó 2 menores muertos-, las autoridades israelíes se preparan ahora para demoler las casas de los dos terroristas de Hamás que, de acuerdo con Ynet, pasaron unos meses en la cárcel en 2020 por participar en disturbios y fabricar artefactos explosivos. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) también han llevado a cabo interrogatorios y registros en la localidad de los dos atacantes. Como consecuencia, tres personas han sido arrestadas para una “mayor investigación”, según anunció el portavoz de las FDI.
El ministro de Defensa, Yoav Gallant, también ha instado al Gobierno a revocar los permisos de entrada y trabajo a los familiares de los dos miembros de Hamás. De acuerdo con datos de i24News, las autoridades israelíes han denegado la entrada a más de 2.500 familiares de terroristas, aunque miles siguen cruzando la frontera ilegalmente a diario.
El ultranacionalista Itamar Ben Gvir, ministro de Seguridad Nacional, ha pedido ir más allá, asegurando que es el momento de “lanzar una operación militar en Judea y Samaria”, haciendo uso del término bíblico de la región de Cisjordania. Desde Eli, el ministro israelí ha hablado de “expulsar terroristas y terminar de aprobar la ley de pena de muerte para terroristas”, según recoge The Times of Israel.
El ataque contra la gasolinera de Eli ha provocado una nueva espiral de violencia en la zona. Como respuesta al atentado, varios colonos han incendiado decenas de coches y destrozado casas de pueblos palestinos. Al menos tres israelíes han sido detenido por los ataques, mientras que 34 palestinos han resultado heridos, la mayoría de ellos por gases lacrimógenos, según fuentes palestinas. I24News también ha informado sobre un tiroteo contra un puesto militar cerca de un asentamiento en el norte de Cisjordania esta mañana, aunque no se reportan heridos.
Redada en Yenín y reunión de Hamás en Irán
El ataque contra el asentamiento de Cisjordania se produce tan solo un día después de una redada israelí en la ciudad de Yenín, punto recurrente de choques entre el Ejército israelí y miembros de milicias armadas palestinas. A consecuencia de los enfrentamientos, siete palestinos murieron y decenas resultaron heridos. Entre los fallecidos hay varios miembros de la Yihad Islámica, aunque también menores, como una adolescente de 15 años. De acuerdo con medios israelíes, el Ejército abrirá una investigación para esclarecer el suceso, aunque los militares señalan que las posibilidades de que fuera alcanzada por las FDI “son bajas”, ya que solo dispararon contra palestinos armados.
Durante la operación en Yenín, ocho soldados israelíes resultaron heridos como resultado de una bomba que estalló junto a un vehículo del Ejército. Para facilitar la evacuación de los heridos y respaldar las acciones terrestres, el Ejército israelí utilizó por primera vez desde los tiempos de la segunda intifada (2000-2005) apoyo aéreo.
Tras la redada, el primer ministro Benjamin Netanyahu aseguró que desde Israel seguirían “luchando contra el terrorismo”. “Hemos demostrado en los últimos meses que hacemos pagar a todos los asesinos sin excepción”, añadió el mandatario israelí.
Mientras se producían los enfrentamientos en Yenín, una delegación de Hamás se reunía con las autoridades iraníes en Teherán. Desde hace años, la República Islámica de Irán ha sido el principal respaldo de las milicias armadas palestinas. Desde Teherán han enviado armas y dinero a los líderes de grupos terroristas como Hamás con el objetivo de dañar a Israel, su principal enemigo junto con Estados Unidos.
Durante este último encuentro, el presidente iraní, Ebrahim Raisi, ha instado a las facciones palestinas a “mantener la unidad y fortalecerse”. El líder iraní también ha aprovechado para lanzar un mensaje a todos aquellos países musulmanes que en los últimos años han establecido y estrechado relaciones con Israel, como Emiratos Árabes Unidos o Marruecos. “Cualquier normalización con la entidad sionista es una traición a Palestina”, subrayó Raisi.