Francia celebró elecciones regionales con decepciones para el presidente francés y para la formación de Le Pen

El partido de Macron atribuye su derrota a la falta de implantación local

AFP/PHILIPPE WOJAZER - El presidente de Francia, Emmanuel Macron

El portavoz del Gobierno francés, Gabriel Attal, dijo durante esta jornada que "es muy duro implantarse localmente cuando eres un nuevo partido político" para explicar el fracaso del partido fundado por el presidente Emmanuel Macron en las elecciones regionales del domingo.

En una entrevista en el canal público Franceinfo, Attal justifico así el decepcionante papel que jugó en las regionales el partido en el que milita, La República en Marcha (LREM), fundado en 2017 por Macron para su conquista de la Presidencia de Francia.

"Las presidenciales (que se celebran en 2022) no son las regionales", puntualizó el portavoz gubernamental, quien también recordó que el contexto de la COVID ha jugado en contra. "Los electores no tenían en la cabeza esas elecciones", afirmó Attal.

El portavoz del Gobierno anunció que Macron se dirigirá a los franceses en unas semanas para hablar sobre la situación política del país.

En la entrevista, Attal criticó "el triunfalismo" de dos de los políticos que salieron reforzados en la cita electoral del domingo, los conservadores Xavier Bertrand (reelegido en la región de Altos de Francia) y Valérie Pécresse (en la región parisina Ile de France). "Ha habido demasiado triunfalismo y he escuchado pocas cosas sobre la abstención masiva" de casi dos tercios del electorado (66,5 %), lamentó.

Meses antes de los comicios regionales, Bertrand ya había formalizado su candidatura a las presidenciales de mediados de 2022 como un candidato independiente de partido de Los Republicanos que integró hasta hace poco.

Además de la fuerza presidencial LREM, otra formación política que fracasó fue la Agrupación Nacional de la ultraderechista Marine Le Pen, quien no logró conquistar ninguna de las 13 regiones en juego, que quedaron en manos de la derecha e izquierda clásicas (Los Republicanos y el Partido Socialista, respectivamente).

No obstante, Macron y Le Pen sigue como los máximos favoritos para disputarse la segunda vuelta de las presidenciales en 2022, según los sondeos. 

Le Pen no logra un gobierno regional frenada por la derecha y la izquierda

La dirigente ultraderechista francesa Marine Le Pen volvió a quedarse este domingo a las puertas de lograr un gobierno regional, en la segunda vuelta de unas elecciones en las que la derecha y la izquierda mantuvieron sus feudos.

Todos los ojos estaban puestos en Provenza-Alpes-Costa Azul (PACA), donde el ultraderechista Thierry Mariani (36,38%) adelantó al conservador Renaud Muselier (31,91 %) en la primera vuelta, pero que en esta última ronda se vio relegado al segundo lugar.

Muselier se impuso con entre el 57 y el 55% de los votos, según los resultados parciales. "Habéis respondido a la amenaza de la extrema derecha" para dejar a la región "libre" de un gobierno de esa ideología, proclamó el dirigente conservador regional.

El llamado "frente republicano" o cordón sanitario, con la retirada de la candidatura de la izquierda tras la primera vuelta del pasado domingo, funcionó de nuevo y bloqueó las aspiraciones de la formación en unos comicios que a menos de un año de las presidenciales se veían como su trampolín hacia ellas. "Ha ganado la lógica de la unidad" de los partidos para frenar a la ultraderecha, recalcó Muselier.

Esa región era la única en la que el RN partía con ventaja. Aunque los sondeos previos a las elecciones le dieron posibilidades de victoria en seis de las 13 circunscripciones metropolitanas en juego, solo se había mantenido líder en ella. Le Pen achacó la derrota a las "alianzas contra natura" efectuadas contra su partido.