Putin acusa de cómplice de terrorismo a Turquía y amenaza con graves consecuencias
D.A/S.C/lainformacion.com/estrelladigital.es/Agencias
Ver el video del derribo del avión ruso
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Putin ha defendido que es "obvio" que el caza Su-24 derribado por Turquía no representaba ninguna amenaza. "Ha sido una puñalada por la espalda". Insinúa que Turquía está comprando petróleo al Daesh. Según Reuters, EEUU confirma que Turquía avisó en repetidas ocasiones a los pilotos de que estaban sobrevolando su territorio. El primer ministro de Turquía, Ahmet Davutoglu, ha señalado que su país tiene derecho a tomar "todo tipo de medidas", en relación con este suceso, recoge la agencia Anadolu.
Tensión entre dos actores activos en la lucha contra Estado Islámico: Turquía y Rusia. El derribo de un avión rusa en la frontera turca puede desatar un fuerte conflicto diplomático e incluso militar entre las dos potencias que están luchando activamente contra la insurgencia yihadista en Siria. Probablemente, los cazas rusos invadieran el territorio ruso por un un error de cálculo de los pilotos o quizás fuera un accidente ya que en el último mes y medio los aviones de Moscú están sobrevolando el territorio sirio para combatir a los yihadistas. No obstante, esta no sería la primera incursión rusa en territorio turco. A principios del mes de octubre, varios aviones de Moscú ya sobrevolaron Turquía, lo que supuso que la OTAN advirtiera al presidente ruso. Sin embargo, la diferencia entre aquel incidente y este, es que ahora, el caza ha sido derribado y algunas fuentes apuntan a que los pilotos recibieron varios disparos al abrir sus paracaídas.
Pese a que todavía se desconoce qué pasó, el presidente ruso, Vladimir Putin, ya ha advertido de que el derribo de uno de sus cazas en el norte de Siria es una "puñalada por la espalda" efectuada por "cómplices" de los terroristas y ha advertido de que habrá "graves consecuencias" para las relaciones entre Rusia y Turquía.
En una comparecencia junto al rey de Jordania, Abdalá II, Putin ha defendido que es "obvio" que el caza Su-24 derribado por Turquía no representaba ninguna amenaza. "Cayó a seis kilómetros de la frontera, dentro del espacio aéreo sirio", ha justificado.
Por este motivo, ha considerado que se trata de una "puñalada por la espalda" efectuada por "cómplices de los terroristas". El mandatario ruso ha apuntado que grandes cantidades de petróleo en poder del grupo terrorista Estado Islámico terminan en territorio turco.
Putin ha subrayado que analizará "detenidamente" lo ocurrido, pero ya ha adelantado que el incidente tendrá "consecuencias muy graves" para las relaciones con Turquía, un país al que Rusia siempre ha tratado como un "amigo", según el presidente.
Asimismo, ha cuestionado que las autoridades turcas se estén comportando como si ellos fueran los que han sufrido el derribo en lugar de Rusia. También ha criticado que Ankara consultara con los socios de la OTAN antes que con Moscú: "¿Quiere poner a la OTAN al servicio de Estado Islámico?".
Por su parte, el primer ministro de Turquía Davutoglu ha señalado que su país tiene derecho a tomar "todo tipo de medidas", en relación con este suceso, recoge la agencia Anadolu.
Los dos pilotos del avión ruso derribado están vivos, según Ankara, pero Moscú dice que están muertos
Según Reuters, EEUU confirma que Turquía avisó en repetidas ocasiones a los pilotos deque estaban sobrevolando su territorio. El primer ministro de Turquía, Ahmet Davutoglu, ha señalado que su país tiene derecho a tomar "todo tipo de medidas", en relación con este suceso, recoge la agencia Anadolu.
Caos y desinformación en torno a la suerte de los dos pilotos rusos que está mañana pilotaban el caza derribado por Turquía. Si Reuters, citando a un reponsable de una milicia turcomana, aseguraba que estaban muertos, minutos después, un responsable gubernamental de Ankara ha asegurado que Turquía dispone de informaciones según las cuales los dos pilotos del avión militar están vivos, e intenta recuperarlos. Informaciones precedentes de fuerzas de la oposición siria indicaban que uno de los pilotos había sido muerto por los rebeldes tras eyectarse del avión, en tanto el otro continuaba desaparecido. Y en Moscú, el Alto Mando afirma que las informaciones que tienen encima de la mesa dan por muertos a los dos pilotos.
Turquía advirtió en diez ocasiones a los pilotos de que estaba sobrevolando su territorio
Por otro lado, la agencia de información británica aseguraba que Turquía advirtió en repetidas ocasiones a los pilotos de que estaban sobrevolando su territorio antes de disparar, pero no recibió respuesta. Esta información ha sido también confirmada por fuentes norteamericanas a la agencia Reuters que apunta que hasta en diez ocasiones advirtieron al avión ruso antes de derribarlo, según el Pentágono.
Lejos de mantener la calma, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha criticado la postura de Ankara a quien ha acusado de dar "una puñalada por la espalda" y ha calificado a las autoridades turcas de "cómplices de los terroristas".
Por su parte, el primer ministro de Turquía, Ahmet Davutoglu, ha señalado que su país tiene derecho a tomar "todo tipo de medidas", en relación con este suceso, recoge la agencia Anadolu.
Pie de foto: Turquía dio 10 avisos al avión ruso mientras que Moscú asegura que el Su-24 ruso derribado no abandonó en ningún momento el espacio aéreo sirio
Turquía eleva la tensión en Siria al derribar un cazabombardero ruso
Turquía ha derribado este martes un cazabombardero ruso cerca de la frontera con Siria, después de que el aparato violara su espacio aéreo y no atendiera a las advertencias, según fuentes cercanas a la presidencia de Turquía. Sin embargo, la versión difiere desde el otro bando. Moscú asegura que el avión no ha abandonado en ningún momento el espacio aéreo sirio, en el que Rusia lleva varias semanas bombardeando posiciones del Estado Islámico, y que se ha estrellado "presuntamente por un ataque desde tierra" cuando volaba a 6.000 metros de altura.
Fuentes de la presidencia turca han precisado que el avión derribado es un Su-24 de fabricación rusa. Según el Ejército, se advirtió en hasta diez ocasiones al avión durante un lapso de cinco minutos antes de que dos cazas F-16 turcos procedieran a derribarlo. El aparato ha caído en llamas en el norte de Siria, concretamente en la localidad turcomana de Bayirbucak, cerca de la frontera siria, según la agencia oficial Anatolia.
El Kremlin se ha mostrado partidario de no precipitarse en extraer consecuencias sobre el derribo del cazabombardero ruso y ha abogado por esperar a que se conozcan las causas exactas del siniestro. "Hasta ahora no hemos escuchado el motivo del siniestro de nuestro avión por parte del Ministerio de Defensa", ha incidido el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, que sin embargo sí ha dejado claro que el aparato "estaba en el espacio aéreo sirio, sobre el territorio de Siria".
"Sería erróneo hacer algún tipo de conjetura ahora mismo, hacer ninguna declaración hasta que tengamos una imagen completa" de lo sucedido, ha defendido, llamando a "ser pacientes". No obstante, ha reconocido que se trata de "un incidente muy grave".
Las imágenes de vídeo publicadas por la agencia estatal Anatolia muestran aparentemente a los dos pilotos del aparato saltando en paracaídas del mismo. Uno de ellos, según la cadena CNN Turk, estaría en manos de fuerzas turcomanas en Siria. El segundo, sin embargo, habría resultado muerto.
Entretanto, la oficina del primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, ha informado de que éste ha hablado ya con el jefe del Estado Mayor y con el ministro de Exteriores sobre los últimos acontecimientos en la frontera con Siria.
Davutoglu ha dado instrucciones al titular de Exteriores de que consulte con la OTAN, Naciones Unidas y otros países relacionados sobre los últimos sucesos en la frontera.
En Siria operan, además de la aviación del régimen de Bashar al Assad, aviones de combate rusos, que apoyan a Damasco en su lucha contra el terrorismo, y aviones de la coalición liderada por Estados Unidos frente a Estado Islámico
El suceso se ha producido después de que Turquía haya solicitado esta semana una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU para discutir los ataques contra turcomanos en la vecina Siria y de que la semana pasada Ankara convocara al embajador ruso para protestar por el bombardeo de sus localidades. Unas 1.700 personas han huido de la zona montañosa en la frontera con Turquía como resultado de los combates en los tres últimos días, según reveló este lunes un responsable turco.