Rusia pierde el Moskva, el buque insignia de la Armada rusa
El Ministerio de Defensa de Rusia ha confirmado el hundimiento del buque Moskva en el mar Negro. De acuerdo con Moscú, el barco se hundió "debido a daños en el casco provocados por un incendio causado por la detonación de municiones” cuando estaba siendo trasladado al puerto en medio de una tormenta.
Ucrania informó sobre el hundimiento del buque, señalando que había recibido un misil antibuque Neptune de fabricación ucraniana. Este tipo de arma fue diseñada después de la anexión de Crimea por parte de Rusia en 2014. Por su parte, Rusia desmintió las afirmaciones de Kiev, asegurando que las causas del incendio estaban sin aclarar.
El Moskva comenzó a funcionar en 1983 y actualmente estaba armado con dieciséis misiles de crucero antibuque con un alcance de al menos 700 kilómetros. El buque insignia de la Armada rusa participó en una de las batallas durante los primeros días de la guerra, de hecho, fue el barco que exigió la rendición de una brigada ucraniana que defendía la Isla de las Serpientes. Como respuesta, el Moskva recibió insultos por parte de las tropas ucranianas que se encontraban en el islote. Asimismo, el buque fue desplegado previamente en la guerra de Siria.
De acuerdo con el experto en inteligencia, Justin Crump, el papel principal del Moskva había sido brindar apoyo de defensa aérea a otros barcos en la flota rusa del Mar Negro. "Su principal ventaja eran los sistemas de armas antiaéreas de muy largo alcance, los sistemas de armas antisuperficie de barcos de muy largo alcance. No estaba realizando ataques en tierra", señala a BBC.
El Moskva es el segundo gran buque que Rusia pierde desde el comienzo de la invasión de Ucrania. En marzo, un barco ruso fue destruido por un ataque ucraniano frente al puerto de Berdyansk, en el mar de Azov. No obstante, el Moskva, de 12.490 toneladas, es el buque de guerra ruso más grande hundido desde la Segunda Guerra Mundial.
Este hundimiento supone un duro golpe para Rusia y un nuevo revés militar de su Ejército. Tal y como afirma al medio británico el almirante Lord West, ex Primer Lord del Mar y Jefe del Estado Mayor Naval, la pérdida del buque ha sido "muy vergonzosa” para Moscú. “Esto tiene un gran impacto. Putin ama la marina. Cuando llegó al poder, la primera parte de las viejas fuerzas soviéticas en las que se esforzó fue la marina. Siempre ha tenido debilidad por ella”, explica.
Por otra parte, el portavoz del Pentágono, John Kirby, consideró este suceso como “un gran golpe para la Flota del Mar Negro”, algo en lo que coincide el asesor de seguridad nacional estadounidense, Jake Sullivan. “Lo que sucedió es un gran golpe para Rusia”, declaró.
Los contratiempos que ha sufrido Rusia durante los 50 días de guerra aumentan los temores sobre el uso de armas nucleares en Ucrania. El director de la CIA, William Burns, destaca que Estados Unidos no debe “tomarse a la ligera” la posibilidad de que Rusia utilice armas nucleares en Ucrania, dadas las complicaciones con las que se ha encontrado durante su invasión. Burns hace referencia a la “desesperación en potencia de Putin y de los líderes rusos”.
“Aunque hemos visto posiciones retóricas por parte del Kremlin en torno a aumentar su nivel de alerta nuclear, no hemos visto muchas pruebas tangibles de este tipo de despliegues que respalden estas preocupaciones”, añadió. Al principio de la guerra Putin anunció que iba a poner su sistema de armas nucleares en alerta. Por otro lado, Rusia ha amenazado recientemente con trasladar armas nucleares a la región del mar Báltico si Finlandia y Suecia unen a la OTAN, algo que ambos países barajan.
Desde la cúpula propagandística de Rusia ya están pidiendo medidas más fuertes contra Ucrania. En un programa del canal de televisión estatal Rossiya 1, expertos y tertulianos han propuesto bombardear Kiev, destruir las vías férreas de Ucrania e imposibilitar la visita de cualquier líder mundial en el futuro como represalia al hundimiento del Moskva.