Al menos 7 muertos y varios avisos de atentado durante unas elecciones que todo apunta acabarán con victoria de Bazoum

Segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Níger marcadas por la violencia

AFP/ISSOUF SANOGO - Miembros de la Comisión Electoral Independiente de Níger (CENI) recopilan los resultados de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Níger en la sede de la CENI, en Niamey

El candidato oficialista, Mohamed Baozum, se convertirá en presidente de Níger si todo sigue su curso. Con más del 80% escrutado, suma 2.020.590 votos frente a los 1.476.257 de su adversario y expresidente – de 1993 a 1996 y que fue derrocado a través de un golpe de estado – Mahamane Ousmane. La distancia parece definitiva en unas elecciones que han estado marcadas por la extrema peligrosidad de estas. Incluso, ya con el recuento cerca de terminar, se avisa de las posibles ofensivas que se pueden lanzar desde distintas organizaciones terroristas, una vez se conozcan los resultados definitivos de esta segunda vuelta

El que fuera ministro de Estado, ministro del Interior, Seguridad Pública, Descentralización y Asuntos Consuetudinarios y Religiosos, y ahora líder del Partido Nigerino por el Socialismo y la Democracia se encuentra a pocos pasos de relevar a su predecesor en el partido, Mahamadou Issoufou. Bazoum se ha impuesto en las regiones de Agadez, Diffa, Maradi, Tahoua y Zinder, mientras que Ousmane lo ha hecho en Doso y Tillabéri, siendo estas dos últimas fuertemente golpeadas por la actividad terrorista que amenaza el oeste de Níger, la mayor parte de ella bajo la autoría de Al-Qaeda y el autodenominado Estado Islámico.

Pero no son las únicas trabas que están teniendo las elecciones. La campaña del opositor, Mahamane Ousmane, ha reclamado la “suspensión inmediata” de la difusión de los resultados electorales. A través de un comunicado oficial argumentan que durante la jornada electoral del domingo 21 de febrero se produjeron “graves irregularidades”. Entre ellas apuntan el robo de urnas, la sustitución de papeletas, e incluso “amenazas e intimidación” de algunos electores. Y van más allá. Desde el partido de Ousamane han incitado a sus seguidores a la movilización para “hacer fracasar” el supuesto amaño que denuncian.  Dicen además que los resultados emitidos por la Comisión Electoral “no son en muchos casos conformes a la expresión de la voluntad del pueblo y demuestran que está en marcha un nuevo atraco electoral en Níger”. 

Hasta el momento se han registrado siete víctimas durante esta segunda vuelta de los comicios – todas ellas trabajadores de la comisión electoral nigerina – según fuentes oficiales, a causa de la explosión de una bomba al paso de un vehículo en la comuna de Dargol, situada en la región de Tillabéri, a unos 80 kilómetros de la “triple frontera” que comparte Níger con Mali y Burkina Faso. La explosión se produjo cuando la Comisión Electoral Nacional Independiente (CENI, por sus siglas em francés) se disponía a llevar las urnas a la población de la región sureña. El vehículo transportaba “las urnas y a los integrantes de la mesa de votación”, según Harouna Mounkaila, vicepresidente de la rama local de CENI. 

Tidjani Ibrahim Katiella, gobernador de Tillabéri, ha asegurado que la causa de la explosión ha sido una mina antipersona, pero aún se desconoce si se trataba de un ataque dirigido o la mina se encontraba allí previamente y no se tenía constancia de su existencia. El propio gobernador confirmó que siete personas habían muerto y otras tres habían resultado heridas de gravedad. 

Ya en la primera vuelta de las elecciones, celebradas el 27 de diciembre del pasado 2020, se produjeron ataques en la misma región. Tras conocerse los resultados de estas el 2 de enero, se produjo la peor matanza que haya sufrido este país. Las aldeas de Tchombangou y Zaroumdareye (ambas situadas cerca de la frontera) vieron como 100 personas fueron asesinadas – 70 y 30 víctimas respectivamente – según anunció el primer ministro de Níger, Brigi Rafini.