Sudán sale del aislamiento internacional después de 30 años

Sudán arrastra 30 años de sanciones económicas y aislamiento internacional que se ha traducido en una deuda que alcanza los 60.000 millones de dólares. El país africano estuvo sometido durante tres décadas a una férrea dictadura bajo la presidencia de Omar al Bashir, que fue derrocado en 2019 como consecuencia de un levantamiento popular.

En la actualidad, tanto civiles como militares han formado un Gobierno de transición conjunto que ha sido bien recibido por la comunidad internacional. Esta nueva etapa que ofrecía un atisbo de esperanza a la población se ha visto empañada por la pandemia del COVID-19 que ha empeorado aún más la situación económica del país.

Francia ha dado el primer paso para poder encauzar el problema de deuda que posee Sudán, y durante una conferencia dedicada al país africano en París, el presidente francés Emmanuel Macron ha anunciado que su país estaba a favor de cancelar completamente los 5.000 millones de dólares que le debe Jartum.

"Estamos a favor de cancelar totalmente la deuda de Sudán", dijo Macron en una conferencia de prensa. "Esperamos de otros participantes que hagan un esfuerzo similar, que es el esfuerzo necesario para liberar a Sudán de la carga de la deuda". A la iniciativa francesa, ya se ha sumado también Alemania.

El ministro de Asuntos Exteriores, Heiko Maas, anunció que su país condonaría la deuda, valorada en unos 438 millones de dólares. Asimismo, ambos países se han comprometido a ayudar a Sudán a liquidar su deuda atrasada con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Berlín proporcionará hasta 90 millones de euros y París prestará 1.500 millones de dólares.

Para poder reclamar la cancelación de la deuda, en el marco de la Iniciativa sobre la deuda de los “países pobres muy endeudados” (PPME), Jartum tenía que cumplir dos condiciones, explicó el presidente francés: liquidar sus atrasos con las instituciones multilaterales (FMI, Banco Mundial, Banco Africano de Desarrollo) e implementar “reformas económicas que demuestren la seriedad y el rigor de las autoridades”. Una vez cubiertos estos requisitos, Francia ha procedido ha condonar la deuda al país africano.

Entre las reformas más recientes que ha llevado a cabo el país africano, en el marco de un programa de supervisión del FMI, figuran la supresión de las subvenciones a los combustibles y la fuerte devaluación de la moneda.

Durante el encuentro promovido por el país galo, Macron recibió al general Abdel-Fattah Burhan, jefe del consejo soberano de Sudán, y al primer ministro Abdalla Hamdok. Asimismo, asistieron a esta cita sus homólogos de Egipto, Etiopía y Ruanda, así como la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, y el presidente de la Comisión de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat.

Kuwait, el mayor acreedor con 9.800 millones de dólares, anunció a través de un comunicado que apoyaría las discusiones sobre la "resolución" de la deuda. Arabia Saudí, otro de los principales acreedores, también ha manifestado que presionará fuertemente para lograr un acuerdo amplio sobre la deuda. Por último, China ha reducido y perdonado parte de la deuda y ha afirmado que intentará influir para que la comunidad internacional haga lo mismo, dijo Hua Chunying, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores.