El T-MEC protagoniza el histórico encuentro entre los presidentes de México y Estados Unidos

“En la historia de las relaciones diplomáticas entre México y Estados Unidos hemos tenido desencuentros y hay agravios que todavía no se olvidan, pero también hemos podido establecer acuerdos de cooperación y de convivencia”, ha dicho el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador durante su encuentro con su homólogo estadounidense este miércoles en la Casa Blanca. El primer viaje al extranjero de López Obrador desde que llegó al poder hace ya año y medio ha estado protagonizado por la entrada en vigor del tratado comercial T-MEC entre Canadá, México y Estados Unidos.  Sin embargo, la amistad entre ambos países no es algo que surja de la noche a la mañana; o sí, solo si se relegan a un segundo plano algunos asuntos como la inmigración o el muro fronterizo que divide a ambas naciones. 

Los fantasmas del pasado que en algún momento a lo largo de la historia han tensado las relaciones entre los dos países no han salido a la luz durante la reunión que han mantenido Andrés Manuel López Obrador y Donald Trump.  Durante este encuentro, ambos presidentes han firmado una declaración en la cual se trata la entrada en vigor del T-MEC. “Con gran aprecio, México y Estados Unidos reconocen los avances que nuestros dos países han logrado hacia una relación renovada y fortalecida, preparada para enfrentar los desafíos económicos y de seguridad del siglo XXI”, comienza esta declaración a la que han tenido acceso varios medios mexicanos, entre ellos ‘El Universal’. “Nuestra reunión conmemora la entrada en vigor del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), un acuerdo de libre comercio que fortalecerá nuestra competitividad global como región y promoverá el crecimiento económico, el empleo y la prosperidad para los pueblos mexicano y estadounidense”. 

Este encuentro ha estado marcado por la ausencia de Canadá, después de que su primer ministro, Justin Trudeau, declinara la invitación para asistir a la reunión, en medio de nuevas amenazas estadounidenses de aranceles sobre productos canadienses. Aun así, el presidente mexicano ha invitado a Trudeau a visitar México para “conmemorar el inicio del T-MEC”. 

Este tratado –asegura la declaración firmada entre Trump y AMLO- “marca el inicio de una nueva era” en donde los más beneficiados serán “los trabajadores, agricultores, ingenieros y empresarios de ambas naciones”, a los que han definido como “la columna vertebral de nuestras economías integradas”. “El T-MEC permitirá que nuestra exitosa relación económica – una de las más fuertes del mundo—se expanda aún más en los años venideros, continuando así nuestra gran historia de cooperación compartida”, concluye la declaración. “México se convirtió en el mayor socio comercial de Estados Unidos desde 2019”, informa este documento oficial en el que se indica que “todos los días, mercancías con valor de 1,6 mil millones USD cruzan esta frontera, apoyando directamente a empresas, empleos y trabajadores mexicanos y estadounidenses”. 

El presidente mexicano ha acudido a esta reunión acompañado del multimillonario Carlos Slim, Patricia Armendáriz Guerra del grupo Financiera Sustentable, Carlos Bremer Gutiérrez (Grupo Financiero Value), Daniel Chávez Morán (Grupo Vidanta) y Bernardo Gómez Martínez (Grupo Televisa). No obstante, también han acudido dentro de esta comitiva Francisco González Sánchez (Grupo Multimedios), Carlos Hank González (Grupo Financiero Banorte), Miguel Rincón Arredondo (Bio Pappel), Ricardo Salinas Pliego (Grupo Salinas), Marcos Shabot Zonana (Arquitectura y Construcción) y Olegario Vázquez Aldir (Grupo Empresarial Ángeles), de acuerdo con la agencia de noticias EFE. Por su parte, la delegación estadounidense ha estado formada por el yerno de Trump, Jared Kushner, figura clave en las relaciones diplomáticas entre ambas naciones. 

El presidente mexicano ha destacado el valor de la amistad durante su reunión con Donald Trump, a quien se ha referido como “mi amigo”. “Fallaron los pronósticos: no nos peleamos, somos amigos y vamos a seguir siendo amigos”, ha manifestado el líder mexicano antes de cenar en la Casa Blanca con Trump, quien ha subrayado que “México ha aprendido a no apostar en nuestra contra”. 

En la reunión –marcada por la relación de cordialidad entre ambos líderes—el presidente de EEUU se ha referido a la diáspora mexicana como “una comunidad de gente buena y trabajadora que vino a ganarse la vida de forma honrada”, mientras que Andrés Manuel López Obrador ha agradecido a Estados Unidos que “nunca hayan tratado de tratarnos como una colonia”. “Por eso estoy aquí para decirle a la gente de Estados Unidos que su presidente nos ha tratado con amabilidad y respeto”, puntualizó. 

El primer viaje oficial de AMLO al extranjero ha estado acompañado de polémica, ya que se produce en un momento crítico en el país, que acumula 275.003 infectados por coronavirus desde el inicio de la pandemia, 6.995 de ellos confirmados durante las últimas 24 horas y a cuatro meses de las elecciones en las que Trump busca su reelección.

Durante una comparecencia ante la prensa en la Rosaleda de la mansión presidencial, el mandatario estadounidense ha hecho un breve recorrido histórico para recordar que “la tradición de gran respeto entre presidentes mexicanos y estadounidenses se remonta a los primeros días de nuestras naciones e incluye, en particular, a Abraham Lincoln y Benito Juárez”. “Estamos llevando esta relación a nuestros máximos y continuamos construyendo una poderosa colaboración económica y de seguridad”, ha añadido. 

En respuesta, López Obrador – quien se tuvo que someter este miércoles a una nueva prueba de coronavirus para poder acceder a la Casa Blanca – ha dicho refiriéndose a Trump que lo que más aprecia de él es que “nunca ha tratado de imponernos nada que viole o vulnere nuestra soberanía”. “En vez de la Doctrina Monroe, usted ha seguido en nuestro caso el sabio consejo del ilustre y prudente George Washington, quien advertía de que las naciones no deben aprovecharse del infortunio de otros pueblos”, ha subrayado. 

Para concluir, el presidente mexicano ha asegurado que “con respeto a nuestras soberanías, en vez de distanciarnos, estamos optando por marchar juntos hacia el porvenir”. “Es privilegiar el entendimiento lo que nos une y hacer a un lado las diferencias o resolverlas con dialogo y respeto mutuo”, ha agregado.  Esta aparente cordialidad entre ambos líderes se ha producido apenas unos meses después de que Estados Unidos amenazara con aranceles a México en represalia por la inmigración. A lo largo de la jornada también de la jornada un grupo de críticos con el Gobierno de López Obrador acudió a las proximidades de la Casa Blanca para rechazar su gestión. Por su parte, el líder mexicano comenzó su viaje oficial a Washington con una visita a los monumentos de los exmandatarios Abraham Lincoln y Benito Juárez en la capital estadounidense.

El T-MEC es un acuerdo de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá que sustituye al TCLAN, firmado en 1994.  El nuevo tratado entre los tres países involucra millones de dólares en operaciones comerciales entre Estados Unidos, México y Canadá y contiene más de 30 capítulos. Sin embargo, además del cambio de nombre este acuerdo incluye algunas novedades que afectan principalmente a la industria automovilística, al sector farmacéutico o al comercio digital. 

Además, otra de las novedades tiene que ver con las normas de revisión. El tratado que entró en vigor el pasado 1 de julio y que regirá durante 16 años tendrá que ser revisado cada seis para adaptarse a las necesidades de cada momento.  En cuanto a la industria automovilística, si bien el TCLAN exigía que el 62,5 por ciento del proceso de fabricación de un vehículo fuera producido en alguno de los tres países, este nuevo tratado establece que se requerirá el 75 por ciento. Por otra parte, al menos el 40 % del automóvil tendrá que ser fabricado por trabajadores con salarios superiores a 16 dólares la hora, de acuerdo con la agencia de noticias Infobae. 

Asimismo, tanto Estados Unidos como Canadá han reclamado a México en virtud de este acuerdo, que cumpla con la democracia sindical, así como que aumente el salario mínimo y cree tribunales que puedan resolver las distintas disputas laborales que puedan surgir.  La propiedad intelectual y la industria farmacéutica también juegan un rol fundamental en este nuevo documento legal. 

La globalización y la aparición de las nuevas tecnologías han creado el escenario perfecto para la aparición del comercio digital. Según lo establecido en este nuevo tratado, esta totalmente prohibido aplicar derechos aduaneros a bienes distribuidos digitalmente como software, juegos, libros, música y películas. 

Del mismo modo, las políticas medioambientales y de anticorrupción también protagonizan algunos de los capítulos de este tratado. Así, se apostará por combatir los problemas medioambientales transfronterizos o por reducir la contaminación. En el caso de la transparencia se ha establecido que los funcionarios de estos países estarán obligados a realizar declaraciones sobre sus actividades externas, empleo, inversiones y activos.