Tebboune se basa en la “seguridad” para exigir visado a las personas con pasaporte marroquí
El presidente de Argelia, Abdelmadjid Tebboune, ha defendido la decisión de su Gobierno de restablecer la obligación de visado para los extranjeros titulares de pasaportes marroquíes, indicando que la medida fue motivada por “consideraciones políticas y de seguridad”.
“Hay una colaboración, no una simple colaboración, entre la entidad sionista y Marruecos. Es política. Lo que nos preocupa es el aspecto de la seguridad. Tenemos sospechas de que algunos individuos (israelíes) han entrado en Argelia con pasaportes marroquíes”, señaló Tebboune durante una entrevista reciente.
El mandatario argelino ha indicado que “no necesariamente” eran espías, aunque destacó que “entrar con pasaportes de un país árabe que no está sujeto al régimen de visados supone un verdadero peligro”. En este sentido, Tebboune también recordó la detención de “tres espías marroquíes” el pasado mes de septiembre.
“Algunos de ellos huyeron de Argelia porque tenían pasaportes marroquíes falsos. En este contexto, restablecer la obligación de visado es un acto de legítima defensa”, añadió Tebboune.
La reciente decisión de Argelia de restablecer la exigencia de visado para los titulares de pasaportes marroquíes supone una importante escalada en las ya tensas relaciones entre los dos vecinos del norte de África.
Asimismo, esta medida se corresponde con la estrategia de Argelia en respuesta al avance diplomático marroquí. El momento de la decisión es particularmente notable, ya que se produjo el mismo día en que Dinamarca anunció su apoyo al plan de autonomía de Marruecos para el Sáhara.
La imposición de visados por parte de Argelia también puede verse como parte de una campaña de propaganda destinada a eclipsar el creciente apoyo internacional a la integridad territorial de Marruecos, ya que el régimen de Argel ha tratado sistemáticamente de boicotear los avances diplomáticos marroquíes con medidas diseñadas a dañar la popularidad internacional de Marruecos, siendo el requisito de visado el último de una serie de medidas de represalia.
No obstante, la diplomacia marroquí sigue manteniendo un gran apoyo internacional en su posición sobre el Sáhara, lo que lleva a Argelia a intensificar sus contranarrativas y contraataques.