Trump comienza su visita al Golfo en busca de grandes acuerdos económicos

El presidente Donald Trump - PHOTO/President Donald J. Trump X
El presidente estadounidense aterriza en Arabia Saudí en su primer viaje estratégico del segundo mandato con la mirada puesta en inversiones billonarias y acuerdos con aliados árabes
  1. Tensiones con Israel por la agenda diplomática
  2. Qatar y Emiratos: más acuerdos, menos política
  3. Gaza y los Acuerdos de Abraham en pausa
  4. Una apuesta clara por la economía

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, inició este martes una gira de cuatro días por el golfo Pérsico, aterrizando en Riad con el objetivo de cerrar grandes acuerdos económicos con potencias regionales como Arabia Saudí, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos. Acompañado por una delegación de altos funcionarios y líderes empresariales, Trump fue recibido con honores por el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, con quien sostuvo una reunión inicial centrada en comercio, energía y seguridad regional.

El encuentro se produjo en medio de un contexto geopolítico tenso: la guerra en Gaza continúa, el programa nuclear iraní sigue generando inquietud en Washington y Jerusalén, y las negociaciones entre Rusia y Ucrania se encuentran estancadas.

Sin embargo, la administración Trump ha dejado claro que el enfoque principal del viaje es económico. “Su agenda regional es de negocios, negocios y negocios”, señaló a Axios un funcionario árabe con conocimiento directo de la planificación del viaje.

Trump busca asegurar inversiones por valor de hasta un billón de dólares, superando los 600.000 millones de dólares ya comprometidos por Riad en enero. Fuentes cercanas al mandatario aseguraron que también se negocia un ambicioso paquete de armas valorado en más de 100.000 millones de dólares, que incluiría tecnología militar avanzada y aeronaves C-130.

Tensiones con Israel por la agenda diplomática

La exclusión de Israel del itinerario del presidente ha generado incomodidad en Jerusalén. La decisión parece reflejar una prioridad clara por lo económico frente a la diplomacia tradicional.

La desconfianza aumentó tras la reciente decisión de Trump de pausar los ataques contra los hutíes en Yemen, decisión que no incluyó garantías para Israel pese a los ataques continuos del grupo rebelde.

En paralelo, el inicio de negociaciones discretas con Irán en Omán ha sido mal recibido por el gobierno de Benjamin Netanyahu, que teme un acuerdo insuficiente para frenar el programa nuclear iraní. Trump, sin embargo, ha dejado abierta la puerta a la acción militar si la diplomacia no da frutos.

Además, la visita de Trump a la región se produce un día después de la liberación de Idan Alexander, un rehén israelí-estadounidense que había sido retenido durante más de 19 meses por Hamás en la Franja de Gaza. La liberación fue calificada como un gesto de buena voluntad hacia la administración Trump, según informaron fuentes diplomáticas.

Qatar y Emiratos: más acuerdos, menos política

El miércoles, Trump se trasladará a Doha, donde se reunirá con el emir Tamim bin Hamad al-Thani. Se espera que la familia real catarí obsequie al presidente un avión Boeing 747-8 personalizado, posiblemente destinado a su futura biblioteca presidencial. El jueves, el mandatario visitará Abu Dabi para continuar conversaciones comerciales y estratégicas, especialmente en los sectores de inteligencia artificial y energía renovable.

Según fuentes de Bloomberg, el gobierno estadounidense busca establecer con Emiratos Árabes Unidos un fondo conjunto de innovación tecnológica con una dotación inicial de $200.000 millones.

Gaza y los Acuerdos de Abraham en pausa

Aunque los Acuerdos de Abraham —impulsados por Trump en su primer mandato— siguen siendo una prioridad de su política exterior, fuentes diplomáticas reconocen que es improbable un avance en la normalización de relaciones entre Arabia Saudí e Israel mientras continúe la guerra en Gaza y Netanyahu rechace un alto el fuego permanente.

“El momento no es el adecuado”, admitió Steve Witkoff, enviado especial de Trump para Oriente Medio. Sin embargo, dejó entrever que la administración no descarta reactivar esas conversaciones si se dan las condiciones en los próximos meses.

El enviado especial de Estados Unidos para Oriente Medio, Steve Witkoff - REUTERS/ ELIZABETH FRANTZ

Una apuesta clara por la economía

En lo que representa su segundo viaje al extranjero desde que regresó a la presidencia —el primero fue a Roma para el funeral del papa Francisco—, Trump parece decidido a convertir la región del Golfo en un pilar de su estrategia económica global. Bajo el lema de “paz a través del comercio”, su administración persigue la consolidación de alianzas estratégicas que refuercen el dominio estadounidense frente a China y Rusia, en una región clave para la energía, la seguridad y la inversión global.

Se espera que Trump regrese a Washington el viernes con una serie de acuerdos que podrían marcar un nuevo capítulo en la relación entre Estados Unidos y el mundo árabe.