Los dirigentes argelinos no han atendido las demandas ciudadanas manifestadas en el movimiento del Hirak

Argelia, un país enfermo de sus dirigentes 

Argelia, un país enfermo de sus dirigentes 

La población argelina ha dado muestras de su descontento a través del Hirak

Argelia sigue atravesando muchas dificultades políticas y sociales y las autoridades del país norteafricano no han puesto remedio a los problemas que acucian a la población, que sigue demostrando su descontento a través de multitudinarias manifestaciones englobadas en el movimiento Hirak, el cual ha sido reprimido por las fuerzas de seguridad argelinas.

Introducción 2019/2020

El Gobierno argelino está empeñado en recuperar el control tras el terremoto del Hirak2, ignorando las demandas de la calle: Estado de derecho, transición democrática, soberanía popular, y justicia independiente. El índice de participación se revisó a la baja hasta el 23%, el más bajo de la historia de Argelia, en todas las elecciones. Esta abstención histórica atestigua la desconfianza de los argelinos en una clase política ampliamente desacreditada. El electorado ya había rehuido masivamente las urnas durante las elecciones presidenciales de 2019 y el referéndum constitucional de 2020 (60% y 76% respectivamente). En las últimas elecciones legislativas de 2017, la participación había alcanzado el 35,7%. Sin embargo, el presidente Abdelmadjid Tebboune1 prefirió ignorar esta baja participación, "no es importante" dijo.

Los arrestos se multiplican mientras que aparentemente el movimiento popular conocido como el Hirak  parece desvanecerse y las manifestaciones van reduciéndose. Pero el Gobierno de Abdelmadjid Tebboune sigue de manera muy acelerada dichos arrestos y no solamente a los militantes del Hirak sino también a periodistas y abogados que defienden los derechos humanos. El hombre más poderoso de Argelia sin embargo no es el presidente Abdelmadjid Tebboune, mal elegido en diciembre de 2019, en unos comicios marcados por una abstención histórica del 60%. El verdadero "hombre fuerte" del país sigue siendo su jefe de Estado Mayor, Saïd Chengriha3 como líder de facto de los "decisores" militares que, de una forma u otra, han monopolizado el poder durante décadas. En el mismo mes de diciembre de 2019, cuando Tebboune accedió a la Mouradia, el equivalente argelino del Elíseo, Chengriha sucedió a Ahmed Gaïd Salah como jefe de los Ejércitos argelinos, Gaïd Salah fue quien obligó al presidente Bouteflika a dimitir en abril de 2019, con la esperanza de apaciguar la protesta pacifista de Hirak, antes de impulsar la candidatura de Tebboune para acabar definitivamente con la protesta popular.

La historia se repite y lo que está ocurriendo en Argelia no es más que la herencia de un pasado. ¿Podrá Argelia escapar de esta maldición? Desde luego si hubiese tenido unos dirigentes más honestos y preocupados por los intereses de su nación que de los suyos propios, más hábiles en el establecimiento de programas de desarrollo del país, que estar esperando percibir comisiones por tal o cual asunto, Argelia no padecería los males de esa política corrupta en la sombra. Es preciso rebobinar y adentrarse en la historia de este enorme país para entender porque hoy volvemos a ver escenas del pasado y no necesariamente el colonial.

Año 1956

En este año tuvo lugar el descubrimiento de petróleo en el Sáhara, en los municipios de Edjeleh4 en Hassi Messaoud5.

Seis años más tarde Argelia, accedía a la independencia. Todo hacía pensar que la vida iría mucho mejor siendo una nación rica de miles de barriles de petróleo y metros cúbicos de gas que harían feliz a la población. ¡Qué fatalidad! nada de ello sería así. El problema residía y reside en su sistema de gobierno y de sus dirigentes que otorga todo el poder a una sola persona y a un puñado de generales. Es por ello por lo que Argelia hoy no es ni democrática, ni popular y mucho menos república.

Al cabo del tiempo, esos hombres que pretendían haber combatido el colonialismo francés con ideas patrióticas para que su población se vea libre, y que se han llamado a sí mismos defensores de las viudas y los huérfanos de la guerra, son ahora los nuevos colonizadores de una nación en total descomposición. Entre 1956 y julio de 1962 (independencia de Argelia) tuvo lugar un periodo de guerra y petróleo. En enero de 1956 los franceses estaban muy contentos por haber descubierto con una simple perforación un importante yacimiento de petróleo en Edjeleh no muy lejos de la frontera con Libia. Ese mismo año la asociación SN Repal/CFP6 descubrió en Hassi Messaoud el mayor campo petrolífero de Argelia con unas reservas estimadas en millones de toneladas de unos 7 millones de barriles. La explotación de ese petróleo “francés” daría lugar a que la metrópoli no dependiera de tener que importar la cuasi totalidad de su consumo todo ello explica la decisión de la IV y V República de continuar con la guerra total contra los independentistas argelinos del Frente de Liberación Nacional (FLN) que habían descorchado la insurrección en noviembre de 1954. Había por todos los medios que garantizar la independencia energética de Francia y por ello no iban a perder el Sáhara. Por ello en 1958 se implanto un marco jurídico que permitía llevar a cabo la actividad petrolera a través de una ley fundamental conocida como “Código Petrolero Saharaui” (CPS) promulgado en ese año 6 meses después de la llegada al poder del general De Gaulle. En virtud de este código, el Estado francés tenía un derecho de control y supervisión sobre las operaciones de exploración y explotación, así como sobre los capitales comprometidos sobre todo cuando eran capitales extranjeros. Las compañías extranjeras solo podían invertir en la búsqueda de petróleo y gas si era en sociedad con franceses los cuales disponían del control jurídico de la operación, situación que aun existió durante algún tiempo después de los acuerdos de Evian7.

1962, la independencia de Argelia y el posterior golpe de Estado

El 5 de julio de 1962 después de 132 años de colonización, Argelia era definitivamente independiente. La alegría transitaba por todos lados en ciudades, en campos, y montañas todo un haïk como demostración de victoria y alegría. Pero este jolgorio poco iba a durar pues ya empezarían las rencillas y ajuste de cuentas por el poder. Situación esta misma que aún perdura en nuestros días. Aquí dos personajes fueron los auténticos protagonistas uno de ellos quien mandaba en ese momento Ahmed ben Bella8 y otro quien dio el golpe en 1965 Houari Boumediene9.

El 16 de junio de 1965, Ben Bella fue de visita al oeste del país. Visitó su pueblo natal Maghnia cerca de la frontera con Marruecos y de ahí a Orán por carretera. Inauguro esa carretera de unos 150 kilómetros recién terminada y en Orán asistió al partido de fútbol de exhibición de Brasil. A Ben Bella le gustaba el fútbol que practicó en su juventud y ya por la tarde volvió a su residencia de Villa Joly, de la que fue sacado 24 horas más tarde por un comando militar dirigido por el coronel Tahar Zbiri para ser encerrado en prisión donde estuvo unos 15 años.

Houari Boumediene un hombre de fuerte personalidad con el misterio que le acompañó toda su vida, fue quien inauguró el primer régimen militar con aspecto civil. Sistema que otros después de él mejoraron hasta hacer de ello “una dictadura que no dice su nombre” y que hoy sigue vigente.

Boumediene sin embargo fue un constructor que quiso utilizar deliberadamente el dinero del petróleo y así inició diversos programas de desarrollo económico en las regiones más pobres de Argelia. En el plano industrial, inició proyectos ambiciosos en el campo de los hidrocarburos y de la siderurgia, también cometió errores como su política de revolución agraria a imitación de la soviética. Sin embargo, el golpe maestro lo dio al nacionalizar los hidrocarburos en 1971 y que pasamos a comentar...

El petróleo, el gas y su nacionalización

El 24 de febrero de 1971, Argel trazó una línea particularmente simbólica en el periodo colonial al nacionalizar la explotación de su petróleo, hasta entonces controlado mayoritariamente por empresas francesas. "Hemos decidido soberanamente nacionalizar los hidrocarburos". Con esta fórmula directa, el presidente argelino Houari Boumediène anunció el 24 de febrero de 1971, hace cincuenta años, la decisión de recuperar el control de la producción de gas y petróleo, una de las principales fuentes de ingresos de la Argelia independiente, gran parte de la cual seguía bajo control francés.

Durante su discurso en la sede de la Unión General de Trabajadores Argelinos (UGTA), cuyo decimoquinto aniversario se celebraba ese día, el presidente añadió que se trataba de "llevar la revolución al sector petrolero y concretar las opciones fundamentales del país en este ámbito". “El 29 de julio de 1965 firmamos un acuerdo con el Gobierno francés que debía de tener en cuenta los intereses recíprocos de las dos partes. La pregunta que nos hacemos cinco años después es la siguiente: ¿se ha aplicado este acuerdo? Podemos afirmar que solamente ha sido aplicado por la parte argelina y que la contraparte francesa no ha respetado los términos de este (refiriéndose a la negociación del precio como base para el cálculo del impuesto). Por todo ello a partir de ahora la participación argelina en todas las sociedades petroleras francesas será del 51% con el propósito de asegurarse el control efectivo, además de la nacionalización de todos los yacimientos de gas natural y del transporte terrestre. “Ello sería más equitativo para la inversión en la exploración de petróleo", continuó, "si los beneficios obtenidos en nuestro país se gastaran al menos localmente". 

Los primeros pasos de Sonatrach

El decenio de 1960 fue en efecto el de las descolonizaciones y también por la toma de conciencia de los países productores de petróleo del peso de estos en el sistema económico mundial. Esto comenzó en Irán en 1951 con la nacionalización de los yacimientos de la AIOC (luego British Petroleum) en 1954. En Italia la ENI de Enrico Mattei tuvo una iniciativa inédita hasta entonces dirigida a los países del tercer mundo en donde la ENI operaba: establecer una sociedad en la que el 75% correspondería al país anfitrión y 25% a ENI en los países donde ENI operase (Egipto, Túnez, y Marruecos) pero ello le costaría la vida el 27 de octubre de 1962, en un accidente de su avión privado producto de un supuesto sabotaje probablemente de los lobbies petroleros.

Pero el hecho más importante de ese decenio fue la creación de la OPEP de la que Argelia fue miembro en 1969 y fue en este contexto cuando nació Sonatrach. Pocos eran los países productores de petróleo que en ese momento tuviesen una sociedad estatal de petróleo y gas quizás México con PEMEX en 1938 e Irán con la NIOC en 1951. Fue Belaid Abdessselam su impulsor y presidente y hombre de absoluta confianza de Ben Bella. Hombre íntegro que no se aprovechó de su posición para enriquecerse como hicieron posteriormente otros y nacionalista convencido quien tomó las riendas de Sonatrach.

Un monopolio

Al convertirse en propietario exclusivo de los recursos del suelo y del subsuelo, el Estado argelino abandonó el sistema de concesiones en favor de una toma de posesión del 51% por parte de las dos compañías petroleras francesas presentes, Elf (antes Erap) y Total (CFP). Tras esta decisión, sólo quedó Total, que operaba en Argelia desde 1952.

La Compañía Nacional de Investigación, Transporte, Transformación y Comercialización de Hidrocarburos (Sonatrach) obtuvo el monopolio de las actividades petroleras mediante la exclusividad de los permisos de investigación y las concesiones de explotación. "una radicalización de las opciones estratégicas del poder a nivel político". (Según Benjamin Stora) 

Tras la Guerra de los Seis Días, en junio de 1967, Argelia decidió nacionalizar las actividades de refinado y distribución de Mobil y Esso. Y en agosto de 1968, Sonatrach se beneficia de una serie de operaciones que le otorgan el monopolio de la comercialización de productos petrolíferos y el control de todo el sector petroquímico.

Caída de las inversiones francesas

Posteriormente, la empresa argelina firmó el 19 de octubre de 1968 un acuerdo con Getty Oil (estadounidense) que devolvía a Sonatrach el 51% de sus intereses en Argelia. Tras este acuerdo, "las reclamaciones contra las empresas francesas se hicieron más acuciantes".

Sobre todo, porque en 1969 el petróleo argelino representaba el 20% de la producción de Total y el 79% de la de Elf. Casi un tercio del petróleo utilizado por la economía francesa procede de los yacimientos saharianos, con 25,4 millones de toneladas, lo que convierte a Argelia en el primer proveedor de Francia, muy por delante de Irak y Libia. Tras el acuerdo con Getty Oil, Argel denuncia el incumplimiento de los acuerdos argelino-franceses, con cifras que lo avalan: las inversiones francesas pasaron de 363 millones de dinares en 1965 a 198 millones en 1968. El 30 de enero de 1969, el impuesto sobre las empresas francesas iba a ser revisado, pero fue aplazado. Un hecho que Boumédiène no dejó de mencionar en su discurso del 24 de febrero de 1971: "Los franceses no querían volver a discutir los precios. Por ello, decidimos, como Estado soberano y libre, fijar nosotros mismos los precios”. A partir de ese día, el precio del barril subió de 2,08 a 2,85 dólares. Tras el anuncio de la nacionalización, las empresas extranjeras, sea cual sea su nacionalidad, ya no pueden invertir en actividades de investigación y producción de hidrocarburos líquidos sin contar con Sonatrach. Por razones fiscales, las empresas también debían crear una sociedad de derecho argelino para poder beneficiarse de estas ventajas. 

Desde los años 70, la dependencia de Argelia de los hidrocarburos no ha dejado de aumentar. La cuota de Sonatrach en la producción de petróleo pasó del 31% en 1970 al 56% en 1971 y al 82% en 1980. En la década de 2000, el sector representaba el 40% del PIB argelino.

La nacionalización de los hidrocarburos argelinos inspiró a otros Estados. Diez meses después, Libia nacionalizó los activos de British Petroleum, mientras que el 1 de junio de 1972, Irak expropió la Iraq Petroleum Company (un consorcio extranjero).

La guerra civil argelina 1992-1998 

Argelia entera quedó traumatizada por el asesinato el 29 de junio de 1992 en Annaba del presidente entonces Mohamed Boudiaf mientras pronunciaba un discurso y que la televisión nacional captó en directo. La ciudadanía se preguntaba cómo ello fue posible en un país con una reputación eficaz de sus servicios de seguridad, y que estos no estuvieran preparados para evitar dicho asesinato. Se especula que el mismo fue urdido por determinados generales cuando M. Boudiaf empezó a indagar sobre la corrupción existente practicada por dichos generales y sobre las fortunas que habían amasado durante los años de Chadli Bendjedid11

La guerra civil argelina o década negra (también llamada década del terrorismo , años de plomo o años de brasas) es una guerra civil que se opuso al Gobierno argelino , contando con el Ejército Nacional Popular (ANP), y varios grupos islamistas desde 1991 . El conflicto termina con la victoria de las fuerzas gubernamentales con la rendición del Ejército Islámico de Salvación (AIS) y la derrota en 2002 del Grupo Armado Islámico (GIA). En diez años, la violencia ha provocado entre 60.000 y 150.000 muertos, así como miles de desaparecidos, un millón de desplazados, decenas de miles de exiliados y más de 20.000 millones de dólares en daños.

Abril de 1999, el sueño de Abdelaziz Bouteflika se hizo realidad

Después de haber rechazado en 1994 la oferta de acceder a la magistratura suprema, Abdelaziz Bouteflika (AB) desapareció. Hacía ya unos 15 años que vivía en el exilio en Emiratos Árabes Unidos donde ejercía como consejero del emir de Abu Dabi y presidente de la Federación de Emiratos, el jeque Zayed Ibn Sultan al-Nahyan. Y desde allí seguía con interés los acontecimientos políticos en Argelia. Fue Larbi Belkheir12 quien por segunda vez propuso a Abdelaziz Bouteflika la posibilidad de la candidatura a la Presidencia de Argelia. Así fue. Bouteflika se presentó como candidato independiente. Aquí los generales le tendieron otra trampa: manipularon el asunto de tal manera que los otros candidatos, comprendiendo que los dados estaban trucados, decidieron retirarse por la carrera a la Presidencia en vísperas de la votación. Y gracias a la DRS13 fue elegido sin sorpresa el 15 de abril de 1999 con un 73% de los votos escrutados. Más de 35 años después de su primer cargo ministerial, Bouteflika asumió triunfalmente la jefatura de Argelia en 1999, con un país desgarrado por la guerra civil. Veinte años después, el Ejército, pilar del régimen, lo destituyó sin contemplaciones bajo la presión de un movimiento de protesta sin precedentes (Hirak)."Boutef", como le llaman familiarmente sus compatriotas, tira la toalla el 2 de abril de 2019,  tras un improbable intento de presentarse a un quinto mandato a pesar del derrame cerebral que le clavó en una silla de ruedas y le dejó casi inerte, seis años antes. Esta candidatura fue percibida como una humillación de más por millones de argelinos. En la independencia de 1962, con 25 años, fue ministro de Deportes y Turismo, antes de heredar un año después la codiciada cartera de diplomacia, que ocupó hasta 1979, época en la que Argelia se perfilaba como líder del Tercer Mundo. En 1965, apoyó el golpe de Estado dirigido por Houari Boumédiène, entonces ministro de Defensa, que derrocó al presidente Ahmed Ben Bella. Se erigió como sucesor de Boumédiène, fallecido en 1978, sin embargo, fue destituido de la sucesión por el Ejército, y luego desapareció de la escena política entre acusaciones de malversación de fondos. Se exilió en Dubái y Ginebra. Sin embargo, fue el propio Ejército el que lo impuso en 1999: ganó las elecciones presidenciales después de que sus oponentes se retiraran denunciando fraude. 

Padrino de la corrupción

Su salud no ha impedido que algunos intelectuales y académicos exijan justicia por la corrupción que ha asolado Argelia durante sus 20 años de Presidencia. Desde su retirada forzada, la justicia argelina ha abierto una serie de investigaciones por corrupción y ha condenado y/o encarcelado a antiguos políticos y empresarios influyentes acusados de haberse beneficiado de sus vínculos privilegiados con el clan Bouteflika. En la cárcel de El Harrach languidecen dos primeros ministros, numerosos ministros y políticos, y los principales empresarios, que han sido agraciados con contratos públicos gracias a su proximidad al presidente-bis, Saïd Bouteflika (hermano).

Argelia terreno en abundancia para los corruptos

La historia de la Argelia contemporánea, desde el final de la era Boumediene hasta la actualidad, está salpicada de acusaciones públicas -y más raramente judiciales- contra antiguos dirigentes o incluso ejecutivos de empresas públicas. Estas acusaciones suelen coincidir con cambios de gobierno o luchas de poder. La muerte de Houari Boumediene sacó a la luz los mecanismos de corrupción durante su reinado. Pero fue con la presidencia de Bouteflika que el fenómeno alcanzo proporciones inéditas. Casos como el de Brown&Root-Condor (BCR) una empresa mixta argelino-americana asociada a Sonatrach en el corazón de la corrupción y que no era más que una correa de transmisión de su matriz Kellog-Brown &Root (KBR) brazo armado de Halliburton USA en Argelia siendo BCR una fuente de enriquecimiento para la mafia político-financiera, en donde se encontraban generales, personalidades políticas, y hombres de negocios en el entorno del presidente de la República y su familia. Por mencionar también el asunto Orascom. Orascom Telecom Holding (OTH) una empresa de telefonía móvil egipcia, que después una primera extensión de esta en Jordania en 1999 se aprovechó de la llegada de Bouteflika al poder para implantarse en Argelia y así acelerar el desarrollo de la firma internacionalmente. La vinculación pasada de su hombre en Argelia Mohamed Shorafa (palestino de origen) con Abdelaziz Bouteflika fue determinante para su desarrollo en el país. Favorecida con préstamos de la banca pública argelina en condiciones muy favorables gracias al trato de favor que exigía Bouteflika a los bancos para con esta compañía, pudo crear una red de telefonía móvil con la marca Djezzy que pronto se convertiría en la primera del país por número de abonados y que 10 años más tarde inversores extranjeros principalmente franceses la compraron por billones de dólares. OTH, también con la bendición de Bouteflika, se internó en el terreno del cemento en distintas operaciones de compra de empresas públicas cementeras a un precio inferior del que proponía Lafarge (Francia), y también esta firma se introdujo en el sector de hidrocarburos asociándose con Sonatrach para explotación de un complejo de amoniaco y urea implantado en Arzew. En este nuevo acuerdo los hermanos Bouteflika seguramente se beneficiaron de ello ampliamente. En el seno de la Sonatrach todavía estas situaciones de corrupción eran aún más graves alcanzando altos grados de decrepitud muy marcados por el sistema interno de dirección basado en el amiguismo y nepotismo, con una gestión de carreras marcadas por la inestabilidad en los puestos de dirección que obligó a muchos de ellos a emigrar al extranjero. Algunos cientos de millones de dólares habrían sido vaciados de las arcas de Sonatrach para financiar ilegalmente la campaña electoral de Bouteflika en 2009. Si a todo ello sumamos el poco profesionalismo con que fueron tratadas ciertas cuestiones estratégicas en el sector energético en los años 2000 explica el deterioro de la situación en el seno de la compañía. Por no hablar del gas en la que Argelia carecía de política estratégica contentándose simplemente a venderlo cuando rusos, iraníes, y venezolanos empezaban a pensar en una OPEP del gas. ¿Cuál fue la política de Argelia al respecto? Solo se limitó a observar cuando podría haber sido un actor de primer orden dadas sus reservas y su experiencia de 50 años en la materia.

Argelia: producción, estrategia, gas y petróleo algunos datos…

Hoy Argelia parece estar en una encrucijada: el país fue el primer exportador de gas en África y el tercer mayor proveedor de gas a la UE27 en 2019. Pero su consumo de energía, alimentado por un generoso sistema de subvenciones públicas, se ha disparado en el espacio de 20 años: el consumo final de electricidad (producida en más del 99% de gas) aumentó un 231% entre 2000 y 2019. El crecimiento de las necesidades domésticas ha reducido los volúmenes de gas disponibles para la exportación. El 75% de la producción de gas del país se exportó en 2000, frente al 50% actual. A falta de un desarrollo ambicioso de las energías renovables y una reducción de las subvenciones a los consumidores (políticamente explosiva en un momento en que el Hirak ya está presionando el inmovilismo del Gobierno), esta tendencia a la baja corre el riesgo de seguir a medio plazo, puesto que el declive de la producción argelina de gas natural parece haber comenzado. El relanzamiento de las actividades de exploración constituye una de las prioridades estratégicas del Gobierno actualmente, sin embargo, la dispersión de los recursos en el sur del país no permite desarrollar los yacimientos aislados y situados lejos de las infraestructuras de transporte, y difíciles à proteger en caso de ataque (ie: toma de rehenes In Amenas14 enero 2013). A finales de 2019 se aprobó una nueva ley de hidrocarburos (Ley 19-13). Esta disposición legislativa es mucho más favorable que la anterior para las empresas extranjeras. Permite a Argelia tener una fiscalidad relativamente similar a la de otros países petroleros equivalentes. El objetivo es atraer inversiones extranjeras, imprescindibles para relanzar la exploración y producción de petróleo y gas del país. Mientras, Sonatrach no puede financiar las inversiones necesarias ni siquiera para mantener la producción. 

Catorce empresas internacionales han firmado un memorando de entendimiento con Sonatrach desde 2020, entre ellas las rusas Lukoil y Zarubzhneft, las estadounidenses Chevron y ExxoMobil, la turca TPAO y la china Sinopec. Pero hay que eliminar otros dos obstáculos para apoyar la inversión extranjera en el sector del petróleo y el gas en Argelia: 1. La imposibilidad de que las empresas extranjeras tengan más del 49% de las acciones de una empresa conjunta con Sonatrach y 2. Las dificultades que existen relacionadas con el clima empresarial.

Conclusión de esta crónica

¿Hay algún remedio a esta “enfermedad holandesa15”  argelina? ¿Qué otros sufrimientos le esperan a la población argelina? ¿Hay algo más horrible que una guerra civil que ha costado la vida a más de 200.000 de sus hijos? Los jóvenes argelinos han entendido bien que las riquezas en hidrocarburos de su país no les pertenecen y solo sueñan con una cosa: emigrar al extranjero incluso arriesgando sus vidas en alta mar, “mejor ser devorado por los peces del Mediterráneo que por los gusanos de Argelia” Todos aquellos que aún tienen cierta esperanza piensan que el cambio tiene que venir. El cambio palabra difícil de pronunciar en Argelia y en un régimen maquiavélico como el suyo. Regímenes vitalicios en su mayoría para los que están en la sombra del poder y en algunos casos quienes lo ejercen, por ello en Argelia más de la mitad de la población de menos de 25 años está dirigida desde hace tiempo por septuagenarios. 

“Solo cuando la palabra vuelva al pueblo y que pueda elegir libremente y sin fraudes a sus dirigentes es cuando el petróleo será una bendición y solo la democracia podrá curar en Argelia su mal holandés”. (Hocine Malti15)

Notas
  1.   Abdelmajid Tebboune (Méchria, 17 de noviembre de 1945) es un político argelino, desde el 19 de diciembre de 2019 Presidente de Argelia y Ministro de Defensa. Fue primer ministro de Argelia desde mayo de 2017 hasta agosto de 2017. Anteriormente fue ministro de Vivienda de 2001 a 2002 y nuevamente de 2012 a 2017.
  2.   Hirak es una palabra árabe que significa "movimiento". Movimiento político o social: haraka. Así, en Argelia, si se evoca el movimiento nacional que llevó a la independencia, se empleará la expresión haraka wataniya (movimiento nacional). Está considerada una innovación lingüística que proviene de la raíz h-r-k. Desde hace algunos meses los movimientos que se afirman en el mundo árabe han sido llamados hirak. Un neologismo que prueba que la lengua árabe, como el mundo del mismo nombre, vive, se manifiesta, se transforma, y se refiere en este caso a una serie de manifestaciones esporádicas que han tenido lugar desde el 16 de febrero de 2019 en Argelia para protestar inicialmente contra la candidatura de Abdelaziz Bouteflika a un quinto mandato presidencial, y luego contra su plan, también impugnado por el ejército, de permanecer en el poder tras su cuarto mandato en el marco de una transición y la aplicación de reformas. Posteriormente, los manifestantes exigieron la instauración de una segunda república y la salida de los dignatarios del régimen, sobre todo porque estos organizaron las siguientes elecciones con las candidaturas de los caciques del régimen anterior, lo que llevó a la elección del ex primer ministro Abdelmadjid Tebboune, impugnado por los manifestantes.
  3.   Fue nombrado jefe de gabinete interino del Ejército Popular Nacional el 23 de diciembre de 2019 por el presidente Abdelmadjid Tebboune, sucediendo al general Ahmed Gaïd Salah, quien murió el mismo día
  4.   Edjeleh es un pueblo en el comuna de En Amenas, en  el distrito de Amenas, Provincia de Illizi, Argelia, ubicado cerca del frontera con Libia.
  5.   Hassi Messaoud es un municipio (baladiyah) de la provincia o valiato de Ouargla en Argelia. 
  6. Se encuentra ubicado al sureste del país, en el desierto del Sahara, cerca de la frontera con Túnez.
  7.   La Société nationale de recherche et d'exploitation de pétrole en Algérie (o SN REPAL) fue creada en 1946, en asociación con el gobierno general de Argelia, por el Bureau de recherche de pétrole (BRP, que se convirtió en Elf Aquitaine en 1976) con sede en Hydra, en lo alto de Argel.
  8.   Acuerdos de Evian, pactos firmados el 18 de marzo de 1962 entre el gobierno francés y el gobierno provisional de la República de Argelia, que pusieron fin a la guerra de Independencia argelina. Las negociaciones, comenzadas el 18 de mayo de 1961 y retomadas el 7 de marzo de 1962 en la localidad francesa de Evian, llegaron a término con la firma de los acuerdos y un alto el fuego. Argelia era, a partir de ese momento, un Estado soberano e independiente. Se instaló un régimen provisional a la espera del escrutinio de autodeterminación, los europeos (más de un millón) podían permanecer en Argelia con ciertas garantías y quedó prevista una cooperación entre Argelia y Francia.
  9. Con la esperanza de que la guerra se reanudaría, la Organización Ejército Secreto (OAS), movimiento clandestino que intentó mediante la violencia oponerse a la independencia de Argelia, redobló sus acciones terroristas, lo que comprometió el futuro de los europeos en Argelia.
  10. Los ciudadanos franceses, mediante el referéndum del 8 de abril de 1962, y los argelinos, mediante el del 1 de julio de 1962, aprobaron estos acuerdos.
  11.   Quien fundo a mediados de 1950 el FLN (Frente de Liberación Nacional). En marzo de 1962, se convirtió en septiembre de ese mismo año en el primer presidente de Argelia, cuya constitución contemplaba el unipartidismo. Desde ese momento Ben Bella inició su labor en pro de la nacionalización de los servicios y la modernización del país. Sin embargo, los descontentos dentro del FLN, el personalismo del sistema y las presiones externas -problemas fronterizos- desembocaron en un golpe de Estado en 1965, en el que fue derrocado por su ministro de Defensa, el coronel Houari Boumediene y que terminó con el mandato del primer presidente de la Argelia independiente.
  12.   Houari Boumédiène se convierte en nuevo presidente de Argelia tras derrocar con un golpe de estado militar a Ben Bella. Boumédiène emprende una política que busca acabar con los poderosos resortes neocolonialistas que mantiene Francia, la antigua potencia colonizadora tras la independencia. Su política se dirige a poner fin al exclusivo control francés en la explotación de los ricos yacimientos de hidrocarburos y a lograr la retirada de las bases militares que Francia mantiene en el país. En el plano económico, su referencia será el modelo socialista que le servirá también para justificar la nacionalización de los hidrocarburos en 1971 que causará graves perjuicios a los intereses franceses. 
  13.   Benjamin Stora, nacido el 2 de diciembre de 1950 en Constantina, Argelia, es un historiador francés y antiguo profesor de la Universidad de París-XIII.
  14.   Chadli Bendjedid (en árabe: شاذلي بن جديد) (Bouteldja, 14 de abril de 1929 - Argel, 6 de octubre de 2012) fue presidente de Argelia entre el 9 de febrero de 1979 y el 11 de enero de 1992.12 Sirvió como oficial en el Ejército francés antes de desertar e integrarse en el Frente Nacional de Liberación (FLN) en el inicio de la Guerra de la Independencia. Fue ministro de Defensa desde noviembre de 1978 a febrero de 1979, y fue nombrado presidente del país a la muerte de Houari Boumédiène.
  15.   En 1999, Larbi Belkheir confirma que todavía está activo. Es él quien impulsa la candidatura de Abdelaziz Bouteflika ante sus pares generales. Y se convierte en jefe de gabinete del nuevo presidente; sirve como un amortiguador entre el nuevo funcionario electo y el ejército. Pero las cosas van mal. Larbi Belkheir no se lleva bien con Said Bouteflika, el hermano del presidente, y rápidamente cae en desgracia.
  16. "Exiliado" en su puesto marroquí, sintiéndose inútil, Larbi Belkheir se deprimió. Enfermo de los pulmones, eventualmente regresará a Argel, pero solo para morir allí.
  17.   Département du Renseignement et de la Sécurité / Departamento de la seguridad argelina
  18.   La crisis de los rehenes de In Amenas, también conocida como crisis de los rehenes de Tiguentourine, fue una operación masiva de toma de rehenes llevada a cabo del 16 de enero de 2013 al 19 de enero de 2013 por "Los Firmantes de la Sangre", un grupo islamista armado disidente de Al Qaeda en el Magreb Islámico, en el sitio de explotación de gas de Tiguentourine, situado a 45 km al oeste de In Amenas, en la región del Sáhara del sur de Argelia.Esta operación, preparada desde hacía tiempo permitió a sus autores pedir, entre otras cosas, el fin de la intervención militar francesa en Malí, iniciada cinco días antes
  19.   La enfermedad holandesa o mal holandés es un término que surgió con ese nombre en la década de los 60 cuando los ingresos en divisas en Holanda aumentaron fuertemente por el descubrimiento de grandes yacimientos de gas natural cerca del Mar del Norte. La exportación de ese gas provocó el incremento de ingresos en divisas. La moneda holandesa se apreció perjudicando la competitividad de las exportaciones. Cualquier hecho económico que genere grandes entradas de divisas, si no es esterilizado tendrá dichas consecuencias.
  20.   Hocine Malti fue ingeniero de petróleos y participo en la creación de Sonatrach esta crónica es basada en determinados apartados en sus memorias sobre el petróleo argelino y la historia secreta del mismo.
Bibliografía

•    Bouteflika l’histoire secrete. Farid Alilat
•    Bouteflika ses parrins et ses larbins. Mohamed Sifahoui
•    André-Paul Weber, 1830-1930, La France en Algérie : une malheureuse aventure
•    Hocine Malti, Histoire secrète du pétrole algérien
•    La Guerre d’Algérie : Genèse et engrenage d'une tragédie (1954-1962)
Pierre Montagnon
•    Histoire dessinée de la guerre d'Algérie.  Benjamin Stora  (Auteur), Sebastien Vassant (Illustrations)
•    Coface risque pays
•    Algérie : la répression sous Tebboune est-elle plus sévère que sous Bouteflika ?
29 juin 2021 à 14h46 | Par Farid Alilat
•    Il y a cinquante ans, la nationalisation du pétrole algérien
24 février 2021 à 10h13 | Par Olivier Marbot
Mis à jour le 20 mai 2021 à 15h05