Emiratos da el pistoletazo de salida a la histórica Expo Dubái 2020
Centenares de asistentes provenientes de todas las partes del mundo, emplazamiento de lujo con espectáculos de luces y sonido y un ambicioso proyecto de país. Con estos ingredientes ha contado la ceremonia de inauguración de la Expo Dubái 2020, un evento auspiciado por los Emiratos Árabes Unidos para dar a conocer su marca en el resto del planeta. La puesta de largo de la exposición ha contado con artistas de la talla del tenor Andrea Bocelli o del pianista Lang-Lang, y con las palabras del príncipe heredero de Dubái, el jeque Hamdan bin Mohammed al Maktoum, que no ha dudado en catalogar el acto como “un nuevo comienzo” para Emiratos.
La ceremonia se hizo esperar. Los meticulosos protocolos sanitarios y de seguridad demoraron el inicio de la cita, mientras los delegados y representantes de los 64 países con presencia en la inauguración cruzaban el pasillo que daba acceso al despampanante Al Wasl Plaza, el centro de comercio y exhibiciones de Dubái diseñado ‘ad hoc’ para la ocasión e inspirado en una obra maestra arqueológica, un anillo de oro de 3.000 años de antigüedad que se encuentra en el sitio arqueológico Saruq Al Hadid. Atrás quedaba la noche dubaití, y el desfile de banderas dio paso a las primeras intervenciones de la primera exposición universal celebrada en Oriente Medio.
Desde el 1 de octubre de 2021 hasta el 31 de marzo de 2020. En total serán 182 días el tiempo que durará el evento. Retrasado un año a causa de la COVID-19, Emiratos espera paliar la espera y ofrecer la mejor experiencia posible a los 25 millones de personas estimadas que visitarán la exposición, el 70% procedentes del extranjero. “Aprovechamos la cita para celebrar nuestro 50 aniversario”, trasladó el ministro de Tolerancia y Coexistencia, el jeque Nahyan bin Mubarak. Para el emirato constituye una oportunidad inmejorable.
El ministro tomó la palabra para poner en valor la capacidad de cooperación de los seis fundadores de la federación que dio origen a los Emiratos Árabes Unidos en 1971, a la que con posterioridad se sumó Ras al-Jaima. Asimismo, el jeque Nahyan bin Mubarak envió un mensaje de tolerancia y respeto, y abrió las puertas de la colaboración con el resto del mundo. “Tenemos una visión y queremos llevarla a cabo”, sentenció. Los objetivos del país pasan por el desarrollo económico, y cuentan para ello con todo aquel con ganas de aportar.
El secretario general de la Oficina Internacional de Exposiciones (BIE, por sus siglas en inglés), Dimitri Kerkentzes, coincidió con el ministro emiratí en que la Expo Dubái es una ocasión histórica para Emiratos y representa un escenario inmejorable para conectar, discutir y trabajar de forma conjunta con otros países para “generar nuevas perspectivas para hacer frente a los grandes retos”. En este sentido, Kerkentzes felicitó a la plana mayor emiratí por haber superado los obstáculos sanitarios para celebrar el evento, que tendrá la misma nomenclatura que el año en que debería haberse celebrado (2020).
El encuentro global servirá además para compartir tecnología y favorecer el intercambio cultural. Después de un extenso periodo marcado por las restricciones sanitarias y los eventos online, la Expo Dubái supondrá un punto de inflexión a nivel global que contará con la presencia de 192 países. De hecho, por primera vez en la historia de las exposiciones universales, cada uno contará con un pabellón donde podrán darse a conocer. España cuenta con un centro propio, diseñado por el arquitecto español Amann Cánovas Maruri.
Bajo el lema ‘Inteligencia para la vida’, España tiene a su disposición una superficie superior a los 5.700 metros cuadrados útiles que está gestionada por Acción Cultural Española (AC/E), empresa pública responsable de la presencia de España en las Exposiciones Universales e Internacionales. Los temas de exposición girarán en torno a la sostenibilidad con referencias a la vida mediterránea, y supondrán una oportunidad de oro para estrechar los vínculos económicos que unen a España y Emiratos, países que comparten un flujo de inversiones bilaterales superior a los 9.000 millones de dólares y la presencia en el país de más de 170 compañías españolas que se benefician de la localización estratégica.
A pesar de que la Eurocámara llamase a boicotear el acto por las violaciones de Derechos Humanos que se producen en Emiratos, la Unión Europea anunció el jueves que participaría en la exposición. Así lo trasladó el Alto Representante para la Política Exterior, Josep Borrell, durante una visita a la región: “La lucha contra el cambio climático y la promoción de la sostenibilidad e inclusividad son algunos de los desafíos de nuestro tiempo. La Expo de Dubái dará una oportunidad para subrayar el compromiso de la UE de cooperación internacional y multilateralismo para construir un entendimiento común y superarlos”.
El complejo, desplegado a lo largo de 4,38 kilómetros cuadrados y cuyo coste de construcción ha rondado los 7.000 millones de euros, está copado de construcciones futuristas y diseños rompedores con los que Dubái espera atraer la inversión extranjera y nuevas empresas. Para ver la zona y conocer el emplazamiento, el vicepresidente y primer ministro de los Emiratos Árabes Unidos, el jeque Mohammed bin Rashid Al Maktoum, quien también ostenta el cargo de mandatario de Dubái, paseó en bicicleta un día antes de la inauguración. Su extensión es similar a la de 600 campos de fútbol.
En cualquier caso, los organizadores ofrecen una batería de alternativas para facilitar la movilidad dentro del recinto, conocido como Dubai Trade Centre-Jebel Ali, por lo que las grandes distancias no constituyen un problema. La Expo Dubái pone autobuses, buggies de golf e incluso trenes a disposición de los visitantes. Además, en el interior del complejo está ubicado el Rove Expo, el único hotel con más de 312 habitaciones y 19 suites. No obstante, las altas temperaturas, próximas a los 40 grados, serán la tónica negativa a tener en cuenta.
La distribución, también por primera vez, no tendrá en cuenta cuestiones geográficas, sino que la exposición girará en torno a tres áreas concretas: el distrito de la Oportunidad, el de la Movilidad y, en último término, el de la Sostenibilidad. Aunque también habrá un emplazamiento exclusivo para negociar, un sitio con el único cometido de acoger reuniones, facilitar los contactos y servir como vía de exposición de las grandes empresas internacionales o start-ups.
También participarán un centenar de artistas. Más allá de los mencionados, la inauguración ha contado con la presencia de la cantante británica Ellie Goulding, cinco veces platino, y la también cantante y actriz estadounidense, Andra Day, ganadora de un Globo de Oro, ha interpretado además su canción ganadora de un Grammy. Aunque fueron el himno nacional y los artistas emiratíes quienes se encargaron de estrenar la inauguración por todo lo alto.
Emiratos pretende prolongar al máximo los espectáculos. Las proyecciones de la inauguración han sorprendido a propios y extraños por su espectacularidad. La cúpula de Al Wasl se ha iluminado con diversos tonos y temáticas. Las mimetizaciones del centro han ido desde fondo marino, mapamundi hasta espacio y, con la ayuda de decenas de bailarines y acróbatas, consiguió captar la atención de los espectadores y proporcionar una escena inmersiva.
Uno de los temas importantes que cobrará peso en la Expo Dubái 2020 es el de la movilidad. El golfo Pérsico ha sido testigo de los avances más destacados en esta materia con la construcción de ciudades inteligentes y de áreas metropolitanas digitalizadas y conectadas a la red. Emiratos ha sido pionero en la tecnología que espera compartir y seguir desarrollando en los próximos meses. De hecho, el recinto que acoge la Expo Dubái se convertirá en el Distrito 2020 una vez finalizado el evento, y uno de los planes de las autoridades emiratíes es el de construir una ciudad inteligente que prevé utilizar al menos el 80% de la infraestructura.
Sin embargo, en la agenda de Emiratos y del resto de países participantes se encuentra el objetivo de alcanzar acuerdos para impulsar el desarrollo económico, más aún después de una pandemia que ha resultado devastadora para las economías mundiales. Y, sobre todo, un crecimiento enfocado hacia la transición ecológica. En este sentido, los Emiratos Árabes unidos registraron el mayor crecimiento de las inversiones en energías renovables a nivel mundial, realizando un aumento del 1223% en comparación con 2018, y espera seguir esa misma senda en las próximas décadas.