Los talibanes no pueden con esta grave situación mientras se complican las operaciones de rescate

La comunidad internacional ofrece su apoyo a Afganistán tras el terremoto

AFP/AHMAD SAHEL ARMAN - Un niño sale del interior de la puerta de una casa dañada por un terremoto en el distrito de Bernal, provincia de Paktika, el 23 de junio de 2022

Las consecuencias del terremoto de 5,9 en Afganistán ya se dejan entrever. El seísmo que golpeó las provincias de Khost y Paktika dejando más de 1.000 muertos y 1.500 heridos está provocando la devastación de un país que vive una crisis humanitaria critica. Los últimos datos que se han obtenido afirman que el gobierno talibán está desbordado por los acontecimientos mientras la búsqueda por encontrar supervivientes se intensifica.

Las condiciones climatológicas no ayudan y están bloqueando las operaciones de rescate. Según Mohammad Amin Huzaifa, jefe del Departamento de Información y Cultura de Paktika, las fuertes lluvias están empeorando la situación y los equipos de rescate están teniendo dificultades para acceder a áreas de montaña. “Todas las casas están destruidas y la gente sigue atrapada bajo los escombros”, dijo el funcionario a la agencia AFP.

Los talibanes se están empezando a ver desbordados por el peor seísmo registrado en las últimas dos décadas. A pesar de todo el empeño que están poniendo, los helicópteros son escasos y las operaciones están tardando demasiado, además de no disponer de los recursos imprescindibles en este tipo de ocasiones. La Agencia de Noticias Estatal afgana, Bakthar, asegura que, debido a las dificultades para acceder y establecer comunicación con los pueblos afectados, podría aumentar la cifra de heridos y fallecidos considerablemente.

“Las operaciones de búsqueda y rescate siguen en marcha y se espera que el número de víctimas siga aumentando en los próximos días, junto con el número de las comunidades afectadas”, asegura Ramiz Alakbarov, representante especial adjunto del Secretario General de la ONU para Afganistán.

La situación es peor de lo que se esperaba. Además del terremoto, Afganistán está pasando por un momento difícil y el seísmo ha dejado divisar un sistema sanitario desmoronado y completamente destruido.

Por ello, los talibanes han pedido ayuda internacional para hacer frente a la situación. “Sabemos que varios distritos en la provincia de Paktika son los más afectados, pero también está lloviendo a cántaros y eso dificulta llegar a estas comunidades. Es difícil saber el alcance del horror que se vivió en las últimas 24 horas”, dijo Sam Mort, representante de UNICEF en Afganistán a la BBC.

La representante de la organización asegura que los talibanes se han comunicado con todo tipo de instituciones humanitarias para pedir ayudar y trabajar en conjunto en las zonas más afectadas. A pesar de ello, los recursos son insuficientes y los supervivientes se están teniendo que ayudar entre ellos. “La gente está cavando tumba tras tumba”, asegura Huzaifa.

La ayuda internacional ya está en camino

El bloqueo internacional a los talibanes empeora la situación. Sin embargo, algunas naciones ya están trabajando para enviar provisiones y material para los afectados.

“Tenemos previsto aumentar aún más el presupuesto de ayuda a Afganistán. Y proporcionaremos más ayuda en los próximos días. No a través de los talibanes, sino con nuestros socios y organismos de ayuda como la UNICEF y la OMS, que pueden llegar a la gente directamente sobre el terreno. Aunque otras crisis estén actualmente más en el punto de mira de los medios de comunicación, no nos hemos olvidado de la gente de Afganistán y sabemos de nuestra especial responsabilidad”, dijo a Euronews Annalena Baerbock, ministra de Asuntos Exteriores de Alemania.

La India también ha mostrado su preocupación por los afganos y acaba de enviar ayuda y equipos para que colaboren en las operaciones de rescate. Su apoyo se basa en dos aviones cargados con 27 toneladas de productos de primera necesidad, como tiendas de campaña, sacos de dormir, mantas, colchonetas, comida, etc. “India, una verdadera primera respuesta”, aseguró el ministro indio de Asuntos Exteriores, Subrahmanyam Jaishankar.

La India se quedó sin presencia diplomática en Kabul tras la retirada de Estados Unidos de Afganistán pero, viendo el estado actual del país, no han dudado en socorrer a los afganos. Resalta el envío de 20.000 toneladas de trigo, 13 toneladas de medicamento, dosis de las vacunas contra la COVID-19 y otros materiales primordiales. “Como siempre, India se solidariza con el pueblo de Afganistán, con el que compartimos vínculos centenarios, y sigue firmemente comprometida con la prestación de ayuda inmediata al pueblo afgano”, afirma el comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores indio.

Por su parte, la ONU y otros tipos de organizaciones que todavía operan en el país han enviado suministros a las regiones afectadas, incluyendo desde kits médicos de primera necesidad como material para aquellas personas que han perdido sus hogares.