Los ministros de Exteriores de Francia, Alemania, Reino Unido y la jefa de la diplomacia de la Unión Europea han pedido a Irán que dé marcha atrás en los incumplimientos del acuerdo de 2015 sobre su programa nuclear, que tienen intención de seguir defendiendo.
En un comunicado al término de una reunión en París, estos responsables diplomáticos europeos se mostraron “extremadamente preocupados” por la anunciada reanudación de las actividades de enriquecimiento de uranio en la planta de Fordo, confirmada por la agencia nuclear de Naciones Unidas (OIEA). Hicieron hincapié en que eso es “contrario” al acuerdo de 2015 que pretende impedir que Irán se dote del arma atómica, y tiene “consecuencias potencialmente graves” para la proliferación nuclear. Sobre todo, supone una “aceleración lamentable” del abandono por Teherán de dicho acuerdo, que a juicio de los europeos “sirve los intereses de todos” y que se van a esforzar para preservarlo.
Los tres ministros y la alta representante de la UE subrayaron que ellos han respetado los compromisos, también el levantamiento de las sanciones, y que Irán por su parte debe respetar sus compromisos y trabajar con todas las partes implicadas para “facilitar la disminución” de las tensiones en Oriente Medio. Aunque reiteraron su voluntad de continuar su acción para esa disminución de las tensiones advirtieron de que esos esfuerzos se hacen “más difíciles por las recientes acciones de Irán”.
Teherán argumenta que sus incumplimientos son reversibles y constituyen una respuesta a la decisión de Estados Unidos de abandonar unilateralmente el acuerdo el pasado año y volver a imponerle sanciones.
El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, ha condenado este martes el comunicado de Europa sobre la reducción de compromisos nucleares de Irán y la petición de que Teherán dé marcha atrás, y criticó que esa parte no ha cumplido con ninguna de sus obligaciones. “Simplemente muestren UNO que han mantenido en los últimos 18 meses”, retó Zarif en Twitter aludiendo a los compromisos del acuerdo nuclear firmado en 2015 entre Irán y seis grandes potencias y del que EEUU se retiró el año pasado.
Zarif defendió que Irán “activó y agotó el mecanismo de resolución de disputas” mientras la otra parte “postergaba” cualquier decisión. “¿USTEDES? ¿De Verdad?”, preguntó Zarif en Twitter respecto a la afirmación europea de que cumple con el acuerdo.
Debido a las sanciones y al fracaso de la otra parte en contrarrestarlas, las autoridades iraníes comenzaron en mayo pasado a incumplir gradualmente algunas de sus obligaciones. Irán ha superado ya el límite de almacenamiento y de enriquecimiento de uranio, que ha alcanzado al menos el 4,5%, cuando el pacto de 2015 solo permite una pureza del 3,67%. Además, en su cuarto paso dado en esa dirección de distanciarse de lo estipulado por el acuerdo, las autoridades iraníes han reanudado el enriquecimiento de uranio en la planta subterránea de Fordo.