Marruecos, socio estratégico de España en la cuestión migratoria
Henar Hernández
Pie de foto: El ministro del Interior español Fernando Grande-Marlaska.
En el marco del Diálogo Euroafricano sobre Migración y Desarrollo, también conocido como Proceso de Rabat, lanzado en 2006 por la Comisión Europea y la Comunidad Económica de los Estados del África Occidental (CEDEAO), se ha celebrado en Madrid la reunión internacional “Cooperación entre Países de Origen, Tránsito y Destino en el ámbito de la Gestión de Fronteras”. El encuentro ha sido inaugurado por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien ha puesto de manifiesto la importancia de trabajar conjuntamente en materia migratoria entre las dos orillas del mar Mediterráneo, esto es, entre España y el resto de Europa y una serie de “países vecinos, amigos, aliados y socios estratégicos como Marruecos, Senegal, Mauritania y Argelia”, pues de este modo se pueden “alcanzar éxitos notables, no solo en la lucha contra la inmigración irregular, sino también en la lucha contra el terrorismo y otros ámbitos delictivos”.
Así, el objetivo de la reunión internacional se ha orientado a “fortalecer la cooperación entre los países de origen, tránsito y destino de los flujos migratorios; identificar y compartir experiencia de buenas prácticas y promover soluciones conjuntas en la lucha contra las mafias que trafican con personas”. Todo ello dirigido, a su vez, a conseguir que “la migración sea legal, segura y ordenada”, de acuerdo con las declaraciones de Grande-Marlaska recogidas en un comunicado del Ministerio del Interior. El ministro español ha estado acompañado por el jefe del Departamento de Asuntos Internacionales y Europeos del Ministerio del Interior francés, Jean-Marie Bruno; la directora general de Migración y Asuntos de Interior de la Comisión Europea, Paraskevi Michou; y el director de Migración y Vigilancia Fronteriza del Ministerio del Interior del Reino de Marruecos, Khalid Zerouali, con quien Grande-Marlaska ha copresidido la reunión internacional.
El hecho de que la reunión haya sido liderada de forma conjunta por España y Marruecos incide sobre la importancia de las relaciones entre ambos países, especialmente en materia migratoria. En este contexto, sobresalen los últimos datos expuestos por el informe quincenal acumulado del Ministerio del Interior: entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2019, llegaron a territorio español 13.263 inmigrantes irregulares, de los cuales 10.475 lo hicieron por vía marítima, por medio de embarcaciones, y 2.788 por vía terrestre, a través de las rutas de Ceuta y Melilla. Si estas cifras se comparan con las recogidas en el mismo periodo de 2018, se observa una disminución de las llegadas irregulares en un 23,3%, lo que supone 4.037 personas menos, ya que en el año pasado alcanzaron España 17.300 inmigrantes. A esta tendencia a la baja en las entradas irregulares han contribuido una serie de factores, predominando ante todos ellos “el refuerzo de las relaciones bilaterales con Marruecos, un socio preferente para España que está realizando un trabajo eficaz en el control de la inmigración irregular hacia España desde su territorio”, de acuerdo con los documentos publicados por el Ministerio del Interior.
Pie de foto: Foto de familia de la la reunión internacional “Cooperación entre Países de Origen, Tránsito y Destino en el ámbito de la Gestión de Fronteras”. FOTO/MINISTERIO DEL INTERIOR
Este fortalecimiento de los vínculos entre los dos países se ha materializado en una serie de medidas, como el incremento de la cooperación entre las policías y fuerzas y cuerpos de seguridad de ambos Estados, lo que ha permitido el desmantelamiento de organizaciones delictivas tanto en España como en Marruecos. Las bases de la colaboración policial se remontan al acuerdo entre ambos Gobiernos, firmado en 2010 por el que fuera ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, y su homólogo marroquí, Taïeb Cherqaoui. El documento, que entró en vigor en el año 2012, postula el establecimiento de “una cooperación transfronteriza entre sus servicios de policía” y, concretamente, entre el Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil por parte española, y la Dirección General de Seguridad Nacional y la Gendarmería Real por parte marroquí. Además, en el marco del acuerdo, se establecieron dos Centros de Cooperación Policial, localizado uno de ellos en Algeciras y el otro en Tánger, en los que el ámbito de actividad se dirige al intercambio de información; la prevención y la coordinación de la lucha contra el terrorismo, el crimen organizado, la inmigración irregular y la trata de seres humanos; y la coordinación de medidas operativas conjuntas.
No obstante, la cooperación entre España y Marruecos no solo se ha limitado al ámbito policial, sino que trasciende, también, al medio económico. Así, y según adelanta El País, está previsto que este viernes el Consejo de Ministros en funciones apruebe un paquete de ayuda de 26 millones de euros a Marruecos, con el objetivo de “reforzar el control de sus fronteras y contener la inmigración irregular hacia Europa”. En la práctica, esto se traduce en la dotación de una partida compuesta por vehículos todoterrenos, ambulancias y camiones cisterna y frigoríficos.
De acuerdo con la misma fuente, el montante económico formaría parte del paquete de 140 millones de euros destinado a la gestión de las fronteras acordado en octubre de 2018 por la Comisión Europea, España y Marruecos tras seis meses de reuniones. Otra parte del paquete, 40 millones de euros, desmovilizada en diciembre de 2018 a instancias del comité de gestión del Fondo Fiduciario de la Unión Europea para África, fue implementada por la agencia española Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración y Políticas Públicas (FIIAPP), organización que ha destinado dichos fondos a “la protección de los derechos de los migrantes” y a “la prevención de nuevas pérdidas de vidas en el mar”, como recoge la Comisión Europea.
Desde 2014, la Unión Europea ha asignado 232 millones de euros para apoyar a Marruecos en una mejor gestión de la migración, además de los 1.000 millones de euros comunitarios que se han comprometido para proporcionar asistencia al país africano en materia de acceso equitativo a los servicios sociales, de democracia y gobernanza, de Estado de derecho y movilidad, de creación de empleo y de crecimiento sostenible e inclusivo.
Pie de foto: Grande-Marlaska se reúne con delegados del Gobierno para reforzar la coordinación en materia de inmigración. FOTO/MINISTERIO DEL INTERIOR
Enrique Millo: “La labor de Marruecos en materia migratoria merece reconocimiento”
La cuestión migratoria se configura como una prioridad para el Gobierno español, y fruto de ello ha sido la reunión que ha mantenido Grande-Marlaska con los delegados del Gobierno en Andalucía, Murcia, Canarias y Comunidad Valenciana “para coordinar los mecanismos de actuación en materia de inmigración”, de acuerdo con una nota publicada por el Ministerio del Interior.
Dentro de dichas comunidades autónomas, cabe destacar el papel de Andalucía en este ámbito, pues con el mar de Alborán y la zona del Estrecho, se define como una de las principales rutas de acceso a España desde África. De hecho, en agosto de 2018, fue creada una Autoridad de Coordinación con sede en Málaga con el objetivo de lograr una mayor eficiencia en la coordinación de los recursos humanos y técnicos destinados a lidiar con la inmigración irregular que transita por la ruta del Mediterráneo Occidental, que conecta a Marruecos con España.
Pie de foto: El secretario general de Acción Exterior de la Junta de Andalucía, Enrique Millo, posa con la revista Atalayar entre dos orillas. ATALAYAR
En este sentido, el secretario general de Acción Exterior de la Junta de Andalucía, Enrique Millo, en una entrevista concedida a Atalayar con motivo del primer viaje realizado por el presidente Juan Manuel Moreno a Marruecos, recuerda que la comunidad autónoma “juega un papel importante porque no es tan solo la frontera de España, sino que también lo es de Europa”. Asimismo, adelanta que, en la próxima visita que se realice a Bruselas, Moreno manifestará “su voluntad de establecer un diálogo con la Comisión Europea que permita poner en valor la especial relevancia de la región” en sus relaciones con Marruecos, y en esta línea, que trabajarán desde la Junta “para poder incrementar y aplicar fondos para mejorar la cooperación ese sentido”.
Millo subraya, además, que el trabajo que realiza Marruecos en materia de control de la presión migratoria es “difícil y costoso” y que, por ello, el país africano “merece reconocimiento”. Por parte de Andalucía, declara, que seguirán trabajando “en esa inmigración regular y ordenada que queremos para el conjunto de nuestro país”.
