La Policía marroquí pide a la Justicia que un periodista no pueda ejercer su profesión durante 10 años
06 de agosto de 2014 (10:43 h.)
Por Rachid Elalamy
Foto: El periodista marroquí Hamid Mahdaui podría ser condenado a no poder ejercer su profesión durante 10 años.
En el año 2004, el periodista Ali Lmrabet, director del semanario satírico ‘Demain’, fue condenado por la Justicia marroquí a no poder ejercer su profesión durante 10 años por diversos delitos. Uno de ellos, por ofensa al rey Mohamed VI. Una década después, le podría pasar lo mismo a otro periodista marroquí, Hamid Mahdaui, director del portal ‘badil.info’, si prospera una petición que ha hecho la Dirección General de la Seguridad Nacional (DGSN) a la Justicia del Reino de Marruecos. La Policía solicita también que el periodista sea condenado a una multa de 250.000 dirhams (unos 24.000 euros). Mahdaui está acusado por la Policía de “insultos y difamaciones” en el asunto de Karim Lachkar, que murió en extrañas circunstancias tras ser detenido por unos agentes policiales en Alhucemas (norte del país). El periodista compareció ante el juez del Tribunal de Primera Instancia de Casablanca esta semana y tendrá que prestar declaración otra vez el próximo 6 de octubre. El director de ‘badil.info’ rechaza las acusaciones policiales y asegura que “lo único que he hecho es mi trabajo en el asunto de Karim Lachkar. Recogí la versión policial y también la de la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH). Nada más”. Mahdaui, que creó su portal hace tres meses, piensa que el problema es que “nuestra línea editorial molesta a algunas personas”. El director de ‘badil.info’ trabajó para el periódico digital en árabe ‘Lakome.com’, cuyo director, Ali Anuzla, está procesado por haber difundido un vídeo de Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI), la versión magrebí de Al Qaeda, en septiembre de 2013. Ese vídeo, donde los terroristas anuncian ataques contra Marruecos, también fue difundido en España por el diario ‘El País’.
Detención en el Sáhara
Por otra parte, Reporteros Sin Fronteras (RSF) denunció la detención en El Aaiún del periodista y militante saharaui Mahmud Al-Lhaissan, corresponsal de la televisión del Frente Polisario ‘Rasd TV’ en el Sáhara occidental. El periodista saharaui fue detenido por la Policía hace un mes en su domicilio de El Aaiún y encarcelado en la prisión de Lakhal. Está acusado de “agrupación armada”, “obstrucción de la vía pública”, “degradación de bienes públicos” y “agresión” a miembros de las fuerzas del orden. Laarbi Massud, secretario general de la ONG Colectivo de Saharauis Defensores de los Derechos Humanos (CODESA), rechazó los cargos policiales y aseguró que el periodista fue detenido durante una concentración pacífica de un grupo de saharauis, en El Aaiún, con motivo del Mundial de fútbol. La concentración, difundida por ‘Rasd TV’, fue disuelta por la Policía. CODESA afirma que la detención del periodista es una venganza policial por sus ideas políticas independentistas y su trabajo en un medio audiovisual del Polisario. La Unión de Periodistas y Escritores Saharauis (UPES) condenó la detención del periodista. ‘Rasd TV’ tiene su sede en uno de los campamentos de refugiados saharauis de Tinduf (Sáhara argelino).
Combatientes yihadistas
En otro orden de cosas, según un informe policial difundido por la Cadena Ser, en España, 31 ciudadanos españoles han sido captados por grupos yihadistas y se encuentran actualmente combatiendo en Malí, Siria e Irak. Los terroristas fueron reclutados en Ceuta, Melilla y Madrid. Todos los desplazados al campo de batalla tienen un perfil de ‘lobo solitario’. Según el informe policial revelado por la emisora de radio, “no muestran sus convicciones radicales y toman postulados de la ideología tafkir”. El número de extranjeros que son reclutados y que viajan a Siria e Irak para librar la denominada ‘guerra santa’ de los yihadistas es un tema que preocupa a España y a otros países europeos como Francia y Alemania. Sólo en Europa se estima que 2.000 personas han sido reclutadas y que están combatiendo ahora en Siria. Durante el año pasado 30 personas fueron detenidas por captar, instruir y enviar desde España a yihadistas a zonas de conflicto. El último caso tuvo lugar en Melilla donde dos mujeres, una de ellas de 14 años, fueron detenidas hace unos días cuando intentaban escapar a Marruecos para sumarse a una red de Al Qaeda que las trasladaría a Irak o Siria. La mujer más joven fue internada en un centro de menores.