Venezuela: análisis y perspectiva del nuevo diálogo entre el Gobierno y la oposición
El contexto geopolítico actual, marcado por la guerra en Ucrania, ha generado un renovado interés por la situación política en Venezuela y sus estratégicas reservas petrolíferas. Los fracasos de la oposición venezolana para alcanzar el poder, con el paradigmático caso de la caída de Juan Guaidó y su «Gobierno», la han conducido a negociar con un fortalecido y revitalizado Nicolás Maduro. Tras superar los peores años de la crisis política y económica y también de aislamiento internacional, el chavismo pretende encarrilar un diálogo que finalice con el levantamiento de todas las sanciones económicas, mientras que la oposición busca normalizar su situación para llegar con opciones a las determinantes elecciones presidenciales de finales de 2024. Sin embargo, estos dos últimos años de negociaciones han destacado por numerosos vaivenes que hacen difícil presagiar un desenlace de estabilidad.
Introducción
La República Bolivariana de Venezuela tiene ante sí una histórica oportunidad de legitimar su sistema político ante el mundo. En el agitado contexto internacional provocado por la guerra en Ucrania es cada vez más evidente el renovado interés por la nación caribeña. Las sanciones impuestas a la Federación Rusa han tenido como consecuencia directa la búsqueda de otros proveedores energéticos que puedan asegurar el suministro. Occidente ha decidido volver la mirada hacia un país que posee una de las mayores reservas de petróleo del planeta, pero que cuenta con un Gobierno hostil a sus intereses. El nuevo proceso de diálogo entre el Gobierno bolivariano y la oposición supone, por tanto, un acontecimiento estratégico con vistas a estabilizar políticamente un país que lleva muchos años sumido en el caos más absoluto.
La llegada de Nicolás Maduro al poder en 2013 marcó un antes y un después en el país sudamericano. La economía venezolana ha llegado a sufrir un desplome del PIB del 75 por ciento entre 2013 y 2021, según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI)1. La acuciante crisis humanitaria —más de siete millones de venezolanos han abandonado el país desde 2015— ha sido uno de los efectos más devastadores para una nación que se asemeja a los Estados fallidos o en situación de guerra2.
Y es que el desastre socioeconómico ha venido de la mano de una constante inestabilidad política, resultado del conflicto entre el Ejecutivo y una desunida oposición antichavista. Las formaciones políticas contrarias a Maduro no han sabido formular una estrategia exitosa contra el líder bolivariano. Ya en 2019, ante las subrepticias maniobras del chavismo para contrarrestar al Legislativo y mantener todo el poder, los líderes opositores se aventuraron a conformar un «Gobierno interino». Si bien obtuvo numerosos apoyos durante sus primeros meses —unos sesenta países reconocieron al líder opositor Juan Guaidó como presidente encargado—3, su protagonismo se fue disipando en favor de aquellos que mantenían —y mantienen— de facto el control del país.
El contraste entre la Venezuela de Chávez y la de Maduro
Para entender los procesos políticos de la Venezuela del presente es preciso remontarse, como mínimo, a principios de siglo. La primera década del 2000 estuvo marcada por los Gobiernos incontestables del mandatario bolivariano Hugo Chávez, cuyo liderazgo se basaba en la bonanza económica del denominado «socialismo del siglo XXI»4. Este periodo, en el que Venezuela consiguió cuadruplicar su PIB, fue más bien resultado del commodities boom —el auge de los precios de las materias primas—, del que no solo Venezuela se benefició, sino también la mayoría de los países iberoamericanos5.
Los Gobiernos del Movimiento Quinta República y, más tarde, del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) no cambiaron el paradigma de la economía venezolana, basada en la exportación del petróleo. Durante la etapa de Chávez la nación caribeña percibió cuantiosos ingresos por la venta del preciado oro negro que yace bajo su territorio, dinero que se usaría para subvencionar productos básicos, como la gasolina y la electricidad, y costosísimos programas sociales que mejoraron la calidad de vida de buena parte de los venezolanos. Sin embargo, con la caída del precio del crudo en el mercado internacional, el crecimiento económico se vino abajo.
Este complejo panorama es heredado por el vicepresidente de Venezuela, Nicolás Maduro. Tras la muerte de Hugo Chávez, el GPPSB y su sucesor volvieron a derrotar a la MUD de Henrique Capriles en la repetición electoral de 2013 entre acusaciones de fraude electoral6. Los primeros años de Maduro al frente del país fueron bastante convulsos no solo por el rechazo y las críticas provocadas por su controvertida llegada al poder, sino por una gestión de la crisis económica absolutamente catastrófica7. Como los gastos sociales no podían cubrirse con los menguantes ingresos del petróleo, el Ejecutivo decidió imprimir bolívares, lo que desencadenó en la famosa hiperinflación venezolana8.
Además, la limitación de los precios contribuyó a un desabastecimiento generalizado de productos básicos, dando lugar a las conocidas colas kilométricas de racionamiento.
Pese al descontento generalizado, la oposición organizada en torno a la MUD no supo aprovechar la extrema debilidad del chavismo hasta que en 2015 cosechó su primera gran victoria electoral a escala nacional y logró la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional9. Parecía que, con el control del órgano legislativo, la oposición podría hacer frente por fin a las políticas impuestas por el Gobierno. Sin embargo, el oficialismo utilizó todos los mecanismos a su alcance para obstaculizar a la Asamblea10. Así, órganos estatales como el Consejo Nacional Electoral, la Controlaría General de la República o el Tribunal Supremo de Justicia imposibilitaron la actividad del Parlamento venezolano hasta liquidar, en la práctica, sus competencias y funciones constitucionales11.
La Asamblea Nacional intentó contratacar en 2017 declarando el abandono de funciones del presidente Nicolás Maduro por sus infracciones constitucionales, pero no sirvió de nada. Maduro decidió aplicar el artículo 348 de la Constitución para decretar la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente (ANC). Según la Norma Suprema venezolana, puede interpretarse que este órgano cuenta con un poder prácticamente total y superior a cualquier otra institución nacional, incluso al propio presidente de la República12. La decisión fue calificada de «ruptura del orden constitucional» por figuras internas relevantes como la fiscal general o el recién creado Grupo de Lima13.
Entre tanto, la oposición no supo reaccionar con unidad ni con determinación. Los partidos antichavistas habían sido descabezados, ya fuera por encarcelamientos o por huidas del país. Otros de sus miembros, como Henrique Capriles, habían sido inhabilitados por casos de corrupción14. No obstante, a la vez que estos hacían declaraciones subrayando el autoritarismo del Gobierno, decidieron participar en las elecciones regionales de 2017, en las que los electores opositores acabaron por abstenerse mayoritariamente. Su credibilidad, al legitimar tácitamente los comicios, quedó por los suelos.
Guaidó: auge y caída de un «Ejecutivo» impotente
2018 fue otro año trágico para la oposición venezolana. La MUD llevaba meses en crisis después del fracaso en las elecciones regionales. La gran fragmentación en el seno de una oposición vapuleada y las denuncias nacionales e internacionales por la ausencia de las debidas garantías democráticas marcaron la celebración de las elecciones presidenciales. El boicot a los comicios fue prácticamente total, ya que para los partidos opositores la participación era inasumible sin el obligado proceso preelectoral, que fue recortado en siete meses tras el adelantamiento unilateral de la ANC15. Maduro y su Gran Polo Patriótico arrasaron a sus escasos contrincantes; eso sí, en contraste con las anteriores elecciones presidenciales (80 por ciento), la participación del electorado fue del 46 por ciento16. Ante la impotencia resultante y la inhabilitación electoral del TSJ, la MUD se autodisolvería en octubre.
Mientras, las relaciones entre el Gobierno y la oposición estaban prácticamente rotas. La desconfianza entre las partes era notoria, sobre todo tras el desengaño de las últimas negociaciones en República Dominicana17. El oficialismo acusaba a los partidos antichavistas de haber estado involucrados en los últimos ataques violentos contra varias instituciones estatales y el propio presidente Maduro18. Además, no hay que olvidar las insinuaciones que el Gobierno de EE. UU. hacía sobre una posible intervención militar en el país19. Por otro lado, entre las filas opositoras crecían las declaraciones en contra de Maduro y su «régimen autoritario». Así, mientras no se garantizasen los derechos, las libertades políticas y la celebración de unos comicios verdaderamente democráticos, no habría nada que negociar.
Es en este contexto donde aparece la controvertida figura de Juan Guaidó, quien acababa de ser nombrado presidente de la Asamblea Nacional20. En la jornada del 10 de enero de 2019 Nicolás Maduro era investido presidente de Venezuela tras la victoria en las elecciones celebradas en mayo. Un día después Guaidó convocaba al Ejército a un levantamiento contra el «usurpador» Maduro y anunciaba la creación de un Gobierno de transición. La propia AN también llamaba a una rebelión contra Maduro, y para ello se aprobó una Ley de Amnistía para todos aquellos —especialmente miembros de la cúpula militar— que se sumaran al golpe una vez retomado el poder. No obstante, salvo algunos miles de militares de bajo rango, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) se mantuvo leal a Maduro y su Gobierno.
Los cálculos de Guaidó estaban muy claros: aprovecharía el «vacío» de poder por el nulo reconocimiento nacional e internacional de Maduro para que, al amparo del artículo 233 de la Constitución, el presidente de la Asamblea Nacional asumiera el cargo de presidente de la República21. Así, el 23 de enero Guaidó juró como presidente encargado en una plaza de Caracas ante una multitud entusiasmada22. Tras el reconocimiento exprés del Gobierno estadounidense, otros actores extranjeros no tardarían mucho en ofrecer su apoyo al nuevo «presidente interino». Unos sesenta países de todo el mundo, pero también organizaciones como la UE, la OEA o el Grupo de Lima, confirmarían el aislamiento regional y el rechazo internacional de la legitimidad de Maduro23.
La presión sobre el Ejecutivo venezolano era máxima. No solo se produjo un aislamiento diplomático, sino que hubo consecuencias directas de carácter económico y financiero en un país sumido ya en una profunda crisis. Las sanciones del Ejecutivo de Barack Obama contra Venezuela se unieron así a los decretos de Donald Trump, por lo que tanto los ingresos de la empresa estatal venezolana de crudo PDVSA como los activos de la filial refinadora Citgo se destinarían por completo al Gobierno opositor24. También el Banco de Inglaterra bloqueó el oro venezolano en favor de Guaidó, asestando un duro golpe a la mermada Hacienda venezolana.
No obstante, aunque pareciera que el Gobierno de Maduro estaba acorralado, sin el apoyo del Ejército los planes de Guaidó y sus aliados nacionales y extranjeros fueron inútiles. Sin ir más lejos, la denominada operación Libertad fue un rotundo fracaso25. Así, esas decenas de marchas que debían confluir hasta el Palacio de Miraflores fueron disueltas y reprimidas, mientras que las facciones alzadas del Ejército, que debían acompañarlas, sumaron muy pocos efectivos.
Tras la gran incertidumbre de los primeros seis meses de 2019, el estancamiento político en las relaciones e iniciativas impulsadas por ambos bandos se consolidó. El oficialismo se dedicó a afianzar sus relaciones con la oposición menos «conflictiva» y llegó a varios acuerdos26. Los partidos antichavistas, por su parte, continuaban divididos sobre si confiar o no en otro proceso de diálogo. Algunos no veían una opción más conveniente que el restablecimiento de las negociaciones a pesar de los negativos antecedentes. Otros seguían defendiendo la renuncia de Nicolás Maduro como condición irrenunciable para entablar cualquier tipo de conversación. Incluso hubo voces más radicales, como Corina Machado, que exigían a Guaidó facilitar una intervención militar extranjera.
A finales de 2020 la oposición y su interinato volvieron a sufrir una serie de reveses. Tras unas negociaciones inservibles entre el Gobierno y la oposición para la composición del nuevo CNE de cara a las elecciones legislativas de diciembre, el TSJ decidió unilateralmente una nueva composición favorable al chavismo, algo que fue severamente criticado y que volvió a sembrar la desconfianza en la oposición27. Por si fuera poco, el TSJ se dedicó también a intervenir varios de los partidos del denominado G4, como Acción Democrática (AD), Voluntad Popular (VP) y COPEI, imponiendo nuevas cúpulas que acabaron concurriendo a las elecciones de diciembre28. Incluso algunas directivas de partidos vinculados con el chavismo fueron reemplazadas29. Finalmente, a pesar de la gran abstención en los comicios —alrededor del 70 por ciento—, el chavismo consiguió hacerse de nuevo con el control mayoritario de la Cámara, culminando el mandato de la ANC, una vez recuperado el poder legislativo, sin la redacción de un solo artículo de la «nueva Constitución»30.
Guaidó y su menguante número de seguidores no tardaron en reaccionar acudiendo a la prórroga de su «mandato constitucional» por un año más, lo que fue duramente criticado ya no solo por opositores como Capriles, sino también por formaciones, como Acción Democrática, que siempre habían secundado las propuestas del «interinato». Además, muchos diputados de la AN de 2016 sí que acataron el término de su mandato y abandonaron la Asamblea paralela que Guaidó pretendía liderar. Sin embargo, el golpe más duro que sufrió el «presidente encargado» vino del exterior. Aunque Bruselas rechazó la autoridad de la nueva Asamblea Nacional, dejó de reconocer al líder opositor como máxima autoridad venezolana, al perder este su legitimidad constitucional como presidente de la AN31.
Ya en 2021 tendría lugar el restablecimiento del diálogo entre el oficialismo y la oposición al tiempo que se producía el ocaso de Guaidó. El primer acercamiento vino de la mano del acuerdo para adquirir vacunas contra el coronavirus. También la salida del gabinete presidido por Donald Trump y el fin de su retórica belicista contribuyó a aliviar la tensión, aunque el escollo de las sanciones económicas seguía —y sigue— estando presente. Otros pasos en este sentido fueron la firma del acuerdo del Programa Mundial de Alimentos (PMA) para combatir la desnutrición infantil y la concesión del Gobierno del arresto domiciliario a seis ejecutivos encarcelados de la petrolera Citgo, cinco de los cuales tenían nacionalidad estadounidense32. Sin duda la decisión que más evidenció la mejoría de las relaciones fue la aprobación de la nueva composición del CNE, con la designación de dos opositores entre sus cinco miembros rectores33. Guaidó, sin embargo, continuaba considerando inútil la negociación con el chavismo y solo veía legítimo un CNE compuesto por miembros nombrados por el único órgano que todavía contaba con legitimidad democrática, la AN de 2016.
El 13 de agosto de 2021 delegaciones del Gobierno chavista y la nueva agrupación opositora sucesora de la MUD, Plataforma Unitaria, acordaron un memorándum de entendimiento como primer paso para restablecer las negociaciones interrumpidas a finales de 201934. Este memorando, firmado por miembros de PJ, VP, AD, UNT y COPEI, reconocía explícitamente a las partes como el «Gobierno» y la «Plataforma Unitaria»35. Así, la renovada coalición opositora impulsada por el mismo Guaidó renunciaba a la lucha por la legitimidad de su «Gobierno interino» a cambio de facilitar unas negociaciones efectivas y duraderas que tuvieran un verdadero impacto en la política venezolana.
Sin embargo, todo se volvió a descontrolar con el controvertido proceso de Alex Saab36. Después de que fuera propuesto para entrar en la mesa de diálogo y negociación de México, EE. UU. consiguió la extradición de Saab, provocando el enfado del chavismo. La delegación oficialista suspendió el diálogo en protesta y, como represalia, las autoridades venezolanas volvieron a trasladar a prisión a los directivos estadounidenses de Citgo.
Con todo, se pudieron celebrar las elecciones regionales y municipales de noviembre, en las que ambos bandos se mostraron bastante satisfechos en términos generales. Los comicios, que tuvieron una participación relativamente baja (42 por ciento), volvieron a reforzar al chavismo, que se hizo con veinte gobernaciones de las veintitrés del país. Asimismo, a pesar de las denuncias de fraude por parte de EE. UU. y de ciertas irregularidades puntuales señaladas por la enviada especial de la UE, los rectores opositores y oficialistas del CNE se mostraron satisfechos con el desarrollo de los comicios en cuanto al equilibrio entre fuerzas, la trasparencia y el respeto del voto libre y seguro37. También los partidos opositores saludaron los resultados de unas elecciones en las que volvían a participar tras cuatro años de boicot. Las instituciones venezolanas acogían de nuevo con normalidad a representantes opositores, quienes vencieron en tres estados y varias alcaldías.
Muy destacable fue la victoria obtenida por la Plataforma Unitaria en el simbólico estado de Barinas. La inhabilitación del candidato opositor por el TSJ y la consiguiente convocatoria para la repetición electoral en enero de 2022 levantaron muchas sospechas y críticas contra las autoridades. No obstante, el candidato opositor consiguió vencer en este territorio, lugar de nacimiento de Hugo Chávez y bastión para el PSUV desde el inicio de la Revolución Bolivariana. Barinas demostró que, cuando la oposición concurre firmemente unida, se puede vencer al chavismo.
En unos comicios que constituyeron una victoria moral y un punto de inflexión contra el oficialismo, todos los líderes opositores acudieron a las urnas salvo Guaidó. A pesar de las numerosas críticas, Guaidó consiguió que los apoyos que todavía le eran fiel alargaran su presidencia interina hasta que se celebrasen elecciones verdaderamente libres.
Situación actual
El impacto de la guerra en Ucrania cambió de golpe la estrategia que los países occidentales tenían respecto a Venezuela. De repente, EE. UU. y los países europeos se quedaron sin acceso a los combustibles fósiles rusos, así que era crucial encontrar proveedores alternativos. A principios de marzo una delegación norteamericana se reunió con el Gobierno venezolano para discutir el alivio de las sanciones y la liberación de los estadounidenses presos, de los cuales dos fueron finalmente liberados38.
Asimismo, la UE se reunió con el Gobierno venezolano con intención de buscar unas negociaciones con la oposición39.
EE. UU. no tardaría en anunciar pasos en favor del restablecimiento de las relaciones a cambio del avance en las negociaciones y el cumplimiento de los compromisos encaminados a unas elecciones válidas para los estándares occidentales. Las autoridades estadounidenses levantaron el veto, de manera restringida, a la petrolera Chevron para que realizara operaciones con PDVSA. También levantaron la prohibición de recibir petróleo venezolano en programas de pago de deudas pendientes del Gobierno a las compañías europeas ENI y Repsol40.
En cuanto a los países europeos, la gran mayoría ya ha restablecido plenamente las relaciones con la Venezuela de Maduro. Aunque han tenido lugar ciertos vaivenes, lo cierto es que, desde que se dejó de reconocer a Guaidó y su interinato, las relaciones han mejorado y países como España han elevado el estatus de encargado de negocios a embajador en misión diplomática en plenas funciones41. Para Bruselas es vital la nueva diversificación de proveedores energéticos, pues el continente depende fuertemente de las importaciones de energía para calentar los hogares y hacer funcionar la industria. Paradigmáticas han sido las declaraciones del presidente francés Emmanuel Macron sobre la imperiosa necesidad de que EE. UU. permita los combustibles fósiles venezolanos en Europa42.
Pero la mejoría de las relaciones diplomáticas no solo se limita a EE. UU. y la UE: concretamente, el Gobierno de Maduro ha superado su aislamiento en el panorama regional. El reciente ciclo electoral iberoamericano ha confirmado un giro izquierdista en el continente. Así, además de mantener sus estrechos vínculos con Cuba, Nicaragua o Bolivia, el Ejecutivo chavista ha logrado una nueva etapa de cordialidad con sus vecinos colombianos y brasileños. Muy significativa ha sido la reapertura de la frontera entre Venezuela y Colombia, país con el que se había llegado a altos niveles de tensión e incluso se empleaba una retórica belicista hasta hace no tanto43. Otros actores regionales importantes como Chile, Argentina o México también sostienen un discurso favorable a la reconciliación política en Venezuela y a la normalización diplomática del país caribeño en la región44.
La recuperación económica es otra de las bazas que se proclaman en el Gobierno bolivariano estos últimos años. En efecto, también la guerra en Ucrania ha contribuido decisivamente al alivio económico del país caribeño y al consecuente fortalecimiento del Gobierno frente a la oposición. El incremento del precio del barril de Marey, unido al crecimiento en la producción de crudo venezolano, ha supuesto un aumento de los ingresos para las muy mermadas arcas venezolanas. Según datos de la OPEP, Venezuela ha alcanzado una producción de 700.000 barriles de petróleo al día, una cifra muy lejana a las obtenidas hace veinticinco años pero que representa prácticamente el doble de las de 202045. Además, se ha potenciado la exportación de otras materias primas, principalmente minerales, como oro, cobalto, hierro, bauxita y diamantes.
Todo ello ha contribuido decisivamente al crecimiento del PIB. En 2022 la economía venezolana cerró con un crecimiento del 6 por ciento, mucho mayor que el pronosticado por el FMI, del 1,5 por ciento. Además se prevé que para 2023, en un contexto global de estancamiento, Venezuela mantendrá una tasa de crecimiento del 6,5 por ciento. La propia tasa hiperinflacionaria también ha experimentado una reducción considerable, llegando a la paradigmática cifra de inflación mensual del 1,4 por ciento en marzo de 2022, año que cerró con una inflación del 120 por ciento46. Y es que el bolívar ha recobrado la salud tras el abandono del estricto control cambiario que llevó a la reconversión de la moneda venezolana hasta en tres ocasiones para eliminar catorce ceros47. Pero, sobre todo, esta estabilización monetaria se ha debido a la dolarización de facto de la economía venezolana, lo que ha abierto el mercado a las importaciones y ha aliviado la carestía de productos48.
Es obvio que la situación económica ha mejorado considerablemente, pero no todo es tan sencillo. La economía venezolana, si sigue creciendo a este ritmo, tardaría sesenta años en recuperar los niveles de 2013. La crisis humanitaria es todavía una preocupante realidad. El 50 por ciento de la población gana menos de 100 dólares al mes en un país donde la cesta de la compra mensual es de 350 dólares. Las inversiones en infraestructura para el suministro eléctrico y de agua siguen siendo muy urgentes. Además, la mayoría de los millones de venezolanos emigrados no tiene todavía ninguna intención de regresar.
En cualquier caso, la presión internacional y los frecuentes contactos entre las partes hicieron que a finales de noviembre de 2022 la mesa de diálogo reanudara sus actividades tras más de un año en suspensión. Pese a los últimos meses de reticencias en ambos bandos, se consiguió firmar un acuerdo vital para aliviar la crisis humanitaria con la creación de un fondo social con unos 3000 millones de dólares congelados del Estado venezolano, los cuales se utilizarían para financiar programas de salud, alimentación y educación y para rehabilitar el sistema eléctrico49.
En cuanto a la oposición antichavista, no se puede decir que viva su mejor momento, especialmente por el mencionado afianzamiento del Gobierno a nivel nacional e internacional. La reciente huida de Guaidó, primero a Colombia y luego a Miami, ha sido la última secuela de su destitución al frente de la «presidencia interina» a principios de 2023, algo que contribuyó a una nueva dinámica autodestructiva en las filas opositoras. Pese a las últimas declaraciones en su favor y contra la persecución del ejecutivo chavista, Juan Guaidó ha sido objeto de numerosas críticas por sus sonados fracasos y su deriva inoperante50. Este, asimismo, no dudó en señalar al resto de los partidos de la Plataforma Unitaria por poner en riesgo esos activos venezolanos en el extranjero que venían gestionando hasta el momento51.
La tensión generada entre los grandes partidos opositores también ha supuesto un lastre en su rédito electoral. Así, independientes como María Corina Machado o el humorista Benjamín Rausseo aparecen en cabeza en las encuestas de candidatos por la Plataforma Unitaria contra Maduro52. Asimismo, candidatos tradicionales como Capriles, reelegido en las elecciones internas de PJ, o Manuel Rosales de UNT han demostrado sus firmes candidaturas para las elecciones presidenciales de 2024. Mientras, la impopular candidatura de Guaidó corre un serio peligro tras su abrupta salida del país. Por otra parte, los partidos de la Plataforma mantienen importantes diferencias sobre asuntos como la solicitud de asistencia al CNE, el uso de un voto automatizado o manual y la depuración del Registro Electoral53.
Entre tanto, los líderes oficialistas siguen insistiendo en que la reanudación del diálogo en México sigue estando condicionada a la concesión de licencias para la venta de petróleo y la liberación de los activos venezolanos en el extranjero54. Con esto pretenden ejecutar el acuerdo social logrado a finales de 2022, cuyos fondos, ahora bloqueados, serían administrados por la ONU para aliviar la crisis humanitaria. La oposición sigue defendiendo, por el contrario, que en el acuerdo no se condicionó la segunda reunión en materia de medidas político-electorales a la implementación del acuerdo social ni al levantamiento del cien por cien de las sanciones55. En este segundo acuerdo hipotético se tendrían que negociar el levantamiento de las todavía vigentes inhabilitaciones para ejercer cargos públicos de candidatos como Capriles o Guaidó, quienes han afirmado que, aun así, mantendrán sus candidaturas para las primarias opositoras56. Sin embargo, los últimos acontecimientos han puesto en riesgo cualquier avance en este aspecto.
Conclusión
Su extraordinaria capacidad para resistir y sobreponerse ante las adversidades ha sido la característica más distintiva del Gobierno de Nicolás Maduro desde que llegó al poder en 2013. El mandatario bolivariano no lo ha tenido nada fácil para mantenerse en el palacio presidencial de Caracas. Un escenario económico desastroso, unido a unas políticas gubernamentales negligentes, llevó a Venezuela al desastre más absoluto.
Inflaciones anuales de más de cinco cifras, desabastecimiento generalizado de productos básicos y una brutal recesión económica convirtieron a Venezuela en el «patito feo» no solo de Iberoamérica, sino del mundo entero. La nación caribeña era sinónimo de caos y crisis humanitaria.
Muchos se atrevieron a vaticinar la caída del Gobierno bolivariano hace no tantos años. No obstante, Maduro ha sabido aprovechar sus bazas y rehacerse ante los partidos opositores, manejando los tiempos a su gusto y actuando cuando más le convenía. Ha explotado las diferencias entre los distintos perfiles antichavistas al mismo tiempo que ha mantenido el control de los órganos clave del Estado para obstaculizar en lo posible un frente opositor unido. El CNE, el TSJ, el propio poder Ejecutivo y, especialmente, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana han sido vitales para la supervivencia del oficialismo en la república sudamericana. Ni siquiera la injerencia de actores extranjeros y el reconocimiento de un «Gobierno» alternativo han logrado que Maduro abandonase el palacio de Miraflores.
Y es que Maduro no solo se ha tenido que enfrentar a los ataques de la oposición venezolana y lidiar simultáneamente con una profunda crisis económica, sino que el contexto internacional no era ni mucho menos el más propicio para resistir. Venezuela ha sido duramente sancionada por potencias extranjeras que han venido exigiendo la vuelta a la normalidad constitucional de la república y el abandono de toda represión política. Los países occidentales, con EE. UU. a la cabeza, terminaron de vaciar las arcas venezolanas, impidiendo que el país accediera a sus activos en el extranjero e imponiendo un bloqueo que completó una hecatombe en todos los sectores económicos. Pero tampoco ahogando la economía venezolana y aislando sus apoyos internacionales se consiguió hacer caer al oficialismo, que mantuvo el control efectivo del Estado.
Si la oposición no ha logrado hacerse con el control político real de Venezuela en uno de los peores escenarios imaginables para sus adversarios, muy difícil lo va a tener ahora que el contexto es mucho más favorable. El chavismo ha conseguido capear el temporal hasta que al fin los precios del crudo han vuelto a dispararse. La guerra en Ucrania ha vuelto a centrar la mirada en las mayores reservas petrolíferas del planeta. El alivio de las sanciones ha terminado por hacer despegar la economía. Se han dejado atrás las estratosféricas cifras de inflación y el desabastecimiento en los supermercados venezolanos. Paradójicamente, la dolarización de la economía ha permitido que el bolívar ya no sea un «papelito» sin valor. Se ha duplicado la producción de crudo en apenas dos años y el PIB ha vuelto a la senda del crecimiento. Con todo, es evidente que la situación no es ni mucho menos la más idílica, ya que sigue existiendo una terrible crisis humanitaria, pero la relativa mejoría económica y un panorama internacional más propicio pueden ser determinantes con vistas a los comicios de 2024.
Y es que todos —desde Colombia o México, pasando por Argentina o Brasil, hasta EE. UU. y la UE— quieren que la oposición y el Gobierno lleguen a un acuerdo duradero de cara a las elecciones presidenciales para que así el país se estabilice de una vez por todas. No obstante, muchas son las dificultades que invitan a pensar que la misma dinámica inestable pueda perpetuarse y los acuerdos conseguidos vuelvan a quedar en «papel mojado».
Incluso si finalmente llegan a celebrarse las primarias con normalidad, el electorado venezolano sigue muy descontento con los partidos tradicionales. Bien una radical como Corina Machado, bien un outsider como Rausseo pueden ser los elegidos para enfrentarse a un fortalecido aunque impopular Maduro. No está nada claro qué puede suceder en estas próximas elecciones. El chavismo puede movilizarse ante el miedo que irradiaría como eventual candidata una derechista como Corina Machado, o puede suceder como en Barinas, donde el electorado bolivariano no logró derrotar a la candidatura opositora, que obtuvo los apoyos de todo el espectro antichavista. También puede pesar más el hastío del electorado, que ha dejado de participar masivamente en unas citas electorales que con frecuencia han sido preparadas para la victoria del PSUV y sus aliados. Por eso cobra tanta importancia el segundo acuerdo en materia de derechos políticos y condiciones electorales que el chavismo se niega a negociar hasta que se levanten todas las sanciones económicas. Todas las opciones están sobre la mesa, por lo que el futuro de Venezuela a corto y medio plazo sigue en el aire.
Diego Miguel Parra Salas
Derecho y Relaciones Internacionales URJC
Referencias:
1 ARENA, M. et al. «Los migrantes venezolanos brindan oportunidades económicas a América Latina». Fondo Monetario Internacional, 12 de diciembre de 2022. Disponible en: https://www.imf.org/es/News/Articles/2022/12/06/cf-venezuelas-migrants-bring-economic-opportunity-to- latin- america#:~:text=Se%20estima%20que%2C%20entre%202013,que%20no%20est%C3%A1%20en%20g uerra
Nota: Todos los enlaces se encuentran activos a fecha de cierre del presente documento, 8 de mayo de 2023.
2 ACNUR. «Situación de Venezuela». Disponible en: https://www.acnur.org/emergencias/situacion-de- venezuela
3 SHAREAMERICA.«More than 50 countries support Venezuela’s Juan Guaidó». 15 de noviembre de 2019. Disponible en: https://share.america.gov/support-for-venezuelas-juan-guaido-grows-infographic/ 4 El intento de golpe de Estado del 2002 fue una notable excepción.
4 El intento de golpe de Estado del 2002 fue una notable excepción.
5 En 1998 el PIB se situaba en 91,8 miles de millones de dólares. En 2012 la cifra alcanzaba su punto máximo con 372,75 miles de millones de dólares.
6 El Gran Polo Patriótico Simón Bolívar (GPPSB) es la candidatura bajo la que se presenta el chavismo. Está formado en torno al PSUV, ya que el resto de los partidos miembros, izquierdistas y nacionalistas, son minoritarios. Por su parte, la Mesa de Unidad Democrática (MUD) fue la coalición opositora más importante entre 2008 y 2018; estaba formada por una veintena de formaciones, desde la derecha hasta la izquierda, que compartían casi exclusivamente su antichavismo.
7 La candidatura oficialista se impuso a Capriles por unos pocos miles de votos. Se presentaron varias denuncias ante el Centro Nacional Electoral (CNE) y el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Estas fueron desestimadas tras la realización de las auditorías y el reconteo de los votos.
8 La inflación ya venía registrando cifras anuales superiores al 30 por ciento en la etapa de Chávez.
9 Son elegidos 112 diputados de los 165 que componen la cámara legislativa venezolana.
10 BBC NEWS MUNDO. «Nicolás Maduro decreta un nuevo estado de excepción y de emergencia económica en Venezuela». 14 de mayo de 2016. Disponible en: https://www.bbc.com/mundo/noticias/2016/05/160513_venezuela_maduro_emergencia_economica_ps 11 REYES, Luz Mely. «TSJ disuelve de hecho al Parlamento venezolano, advierte abogada Rocío San Miguel», Efecto Coyuco. 30 de marzo de 2017. Disponible en: https://efectococuyo.com/politica/tsj- disuelve-de-hecho-al-parlamento-venezolano-advierte-abogada-rocio-san-miguel/
11 REYES, Luz Mely. «TSJ disuelve de hecho al Parlamento venezolano, advierte abogada Rocío San
Miguel», Efecto Coyuco. 30 de marzo de 2017. Disponible en: https://efectococuyo.com/politica/tsjdisuelve-de-hecho-al-parlamento-venezolano-advierte-abogada-rocio-san-miguel/
12 Artículo 349 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela: «El presidente o presidenta de la República no podrá objetar la nueva Constitución. Los poderes constituidos no podrán en forma alguna impedir las decisiones de la Asamblea Nacional Constituyente. Una vez promulgada la nueva Constitución, esta se publicará en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela o en la Gaceta de la Asamblea Nacional Constituyente» (ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE. Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Disponible en: https://www.oas.org/dil/esp/constitucion_venezuela.pdf).
13 El Grupo de Lima estuvo integrado en sus primeros años por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, México, Panamá, Paraguay y Perú. Fue un foro creado para presionar al Gobierno de Maduro y revocar sus controvertidas políticas. 14 CNN. «Inhabilitan por 15 años al opositor venezolano Henrique Capriles Radonski». 7 de abril de 2017. Disponible en: https://cnnespanol.cnn.com/2017/04/07/inhabilitan-por-15-anos-al-opositor- venezolano-henrique-capriles-radonski/
14 CNN. «Inhabilitan por 15 años al opositor venezolano Henrique Capriles Radonski». 7 de abril de
2017. Disponible en: https://cnnespanol.cnn.com/2017/04/07/inhabilitan-por-15-anos-al-opositorvenezolano-henrique-capriles-radonski/
15 EL NACIONAL. «ANC adelanta elecciones presidenciales mientras oposición llama a la unidad». 24 de enero de 2018. Disponible en: https://www.elnacional.com/noticias/Gobierno/anc-adelanta-elecciones- presidenciales-mientras-oposicion-llama-unidad_220094/
16 CONSEJO NACIONAL ELECTORAL. «Divulgación de resultados elecciones 2018». Disponible en: http://www.cne.gob.ve/ResultadosElecciones2018/
17 EL NACIONAL. «MUD explicó razones por las que no asistió al diálogo este jueves». 18 de enero de 2018. Disponible en: https://www.elnacional.com/noticias/politica/mud-explico-razones-por-las-que- asistio-dialogo-este-jueves_219315/
18 Entre otros, el ataque con un helicóptero a la sede del Tribunal Supremo, el asalto a un cuartel del Ejército o el intento de magnicidio contra Nicolás Maduro perpetrado por medio de dos drones durante un desfile (MARTÍNEZ, Deisy y MOZO, Reinaldo. «Los sentenciados por el intento de asesinato contra Maduro en 2018», Efecto Coyuco. 4 de agosto de 2022. Disponible en: https://efectococuyo.com/politica/sentenciados-supuesto-intento-magnicidio-maduro/).
19 LONDOÑO, Ernesto y CASEY, Nicholas. «El Gobierno de Trump discutió un posible golpe de Estado con militares rebeldes en Venezuela», The New York Times. 14 de enero de 2019. Disponible en: https://www.nytimes.com/es/2018/09/08/espanol/trump-golpe-de-estado-maduro.html
20 Juan Guaidó fue elegido diputado de la Asamblea Nacional por Voluntad Popular (VP), la cuarta fuerza opositora en la Cámara.
21 Artículo 233 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela: «Serán faltas absolutas del presidente o presidenta de la República: su muerte, su renuncia o su destitución decretada por sentencia del Tribunal Supremo de Justicia, su incapacidad física o mental permanente certificada por una junta médica designada por el Tribunal Supremo de Justicia y con aprobación de la Asamblea Nacional, el abandono del cargo, declarado como tal por la Asamblea Nacional, así como la revocación popular de su mandato. Cuando se produzca la falta absoluta del presidente electo o presidenta electa antes de tomar posesión, se procederá a una nueva elección universal, directa y secreta dentro de los treinta días consecutivos siguientes. Mientras se elige y toma posesión el nuevo presidente o la nueva presidenta, se encargará de la Presidencia de la República el presidente o presidenta de la Asamblea Nacional».
22 REDACCIÓN / AGENCIAS CARACAS. «El opositor Guaidó se proclama presidente de Venezuela y Trump lo reconoce», La Vanguardia. 24 de enero de 2019. Disponible en: https://www.lavanguardia.com/internacional/20190123/454276264739/lider-opositor-guaido-presidente- venezuela-protestas-maduro-trump.html
23 Únicamente aliados tradicionales como Rusia, China, Cuba, Bolivia, Nicaragua o Irán reconocieron la reelección de Maduro.
24 A partir de 2015, el petróleo venezolano fue prohibido en los EE. UU. y los activos en el extranjero fueron congelados. Los bancos occidentales retuvieron las reservas y se negaron a procesar a los pagos. Citgo, una empresa subsidiaria clave de la petrolera estatal de Venezuela (PDVSA) en EE. UU., fue incautada y muchos de sus activos liquidados.
25 Más adelante, John Bolton reconocería que el alzamiento no tuvo éxito porque algunas altas autoridades como Vladimir Padrino (ministro de Defensa) y Maikel Moreno (presidente del TSJ) no terminaron por secundarlo tras, supuestamente, haber prometido hacerlo después de negociar la salida de Maduro con el Gobierno de EE.UU. (TELESUR. «Exasesor de seguridad de Trump confiesa que ayudó a planear golpes de Estado». 13 de julio de 2022. Disponible en: https://www.telesurtv.net/news/exdiplomatico-eeuu-confiesa-ayuda-planes-golpes-estado-20220713- 0003.html).
26 TELESUR. «Gobierno y oposición de Venezuela instalan mesa de negociación». 16 de septiembre de 2019. Disponible en: https://www.telesurtv.net/news/gobierno-venezuela-oposicion-acuerdo-mesa- negociaciones--20190916-0020.html
27 BBC News Mundo. «La polémica designación del Tribunal Supremo de Venezuela de un nuevo Consejo Electoral: ¿qué significa para el conflicto político del país?». 13 de junio de 2020. Disponible en: https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-53031926
28 El G4 estuvo compuesto por los partidos opositores mayoritarios: Acción Democrática, Primero Justicia, Voluntad Popular y Un Nuevo Tiempo.
29 INFOBAE. «El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela intervino otro partido chavista que buscaba desvincularse de la dictadura de Nicolás Maduro». 21 de agosto de 2020. Disponible en: https://www.infobae.com/america/venezuela/2020/08/21/el-tribunal-supremo-de-justicia-de-venezuela- intervino-otro-partido-chavista-que-buscaba-desvincularse-de-la-dictadura-de-nicolas-maduro/
30 MISIÓN VERDAD. «Cierre de ciclo: hitos emblemáticos en Venezuela durante 2020». 19 de diciembre de 2020. Disponible en: https://misionverdad.com/investigaciones/cierre-de-ciclo-hitos-emblematicos-en- venezuela-durante-2020
31 ABRIL, Guillermo y SINGER, Florantonia. «La UE deja de reconocer a Guaidó como presidente pese a constatar su liderazgo», El País. 6 de enero de 2021. Disponible en: https://elpais.com/internacional/2021-01-06/la-ue-reconoce-el-liderazgo-de-juan-guaido-pero-evita- reconocerlo-como-presidente.html
32 CNN. «Los 6 ejecutivos de Citgo reciben prisión domiciliaria en Venezuela, tras años detenidos en Venezuela». 30 de abril de 2021. Disponible en: https://cnnespanol.cnn.com/2021/04/30/citgo-ejecutivos- liberacion-arresto-domiciliaria/
33 OCANDO ALEX, Gustavo. «Parlamento venezolano elige un nuevo poder electoral para los próximos siete años», Voz de América. 4 de mayo de 2021. Disponible en: https://www.vozdeamerica.com/a/venezuela_parlamento-venezolano-elige-un-nuevo-poder- electoral/6073648.html
34 RODRÍGUEZ ROSAS, Ronny. «Publican en Gaceta Oficial memorando de entendimiento de diálogo en México», Efecto Coyuco. 17 de agosto de 2021. Disponible en: https://efectococuyo.com/politica/gaceta-oficial-memorando-dialogo-en-mexico/
35 MORALES P., Maru. «Oposición liderada por Juan Guaidó presentó nueva plataforma unitaria», Crónica Uno. 21 de abril de 2021. Disponible en: https://cronica.uno/oposicion-liderada-por-juan-guaido- presento-nueva-plataforma-unitaria/
36 Alex Saab, empresario colombiano y diplomático del Gobierno chavista, es considerado una figura clave para el oficialismo por ser el artífice de las maniobras para eludir el bloqueo impuesto contra Venezuela e importar alimentos y medicamentos. EE.UU. lo acusa de lavado de dinero y de ser el testaferro de Maduro en el extranjero (TELESUR. «Claves para entender el secuestro del diplomático Alex Saab». 17 de octubre de 2021. Disponible en: https://www.telesurtv.net/telesuragenda/venezuela- claves-entender-secuestro-diplomatico-alex-saab-20211017-0017.html).
37 El informe final de la misión de observadores de la UE señaló una mejoría general, especialmente debido a la pluralidad del nuevo CNE, pero también apuntó que se mantenían deficiencias estructurales (HUMAN RIGHTS WATCH. «Venezuela: informe de la UE deja en evidencia obstáculos para ejercer derechos políticos». 24 de febrero de 2022. Disponible en: https://www.hrw.org/es/news/2022/02/24/venezuela-informe-de-la-ue-deja-en-evidencia-obstaculos-para- ejercer-derechos).
38 MORALES P., Maru. «Reunión de Maduro con enviados de Biden reabre la puerta al diálogo de México y golpea al Gobierno encargado», Crónica Uno. 9 de marzo de 2022. Disponible en: https://cronica.uno/reunion-maduro-enviados-biden-reabre-mexico-golpea-Gobierno-encargado/
39 MOURENZA, Andrés. «Venezuela recalca la necesidad de reconocer a Maduro como presidente para retomar los intercambios petroleros con EE. UU.», El País. 13 de marzo de 2022. Disponible en: https://elpais.com/internacional/2022-03-12/venezuela-recalca-la-necesidad-de-reconocer-a-maduro- como-presidente-para-retomar-los-intercambios-petroleros-con-ee-uu.html
40 PÉREZ, Alba. «Estados Unidos permitirá a Repsol, Eni y Chevron exportar petróleo de Venezuela», El Economista. 6 de junio de 2022. Disponible en: https://www.eleconomista.es/energia/noticias/11804421/06/22/Estados-Unidos-permitira-a-Repsol-Eni-y- Chevron-exportar-petroleo-de-Venezuela.html
41 GONZÁLEZ, Miguel. «España elevará a la categoría de embajador a su encargado de Negocios en Venezuela», El País. 5 de diciembre de 2022. Disponible en: https://elpais.com/espana/2022-12- 05/espana-elevara-a-la-categoria-de-embajador-a-su-encargado-de-negocios-en-venezuela.html
42 FRANCE 24. «Venezuela está “lista” para recibir a las petroleras francesas, dice Maduro». 28 de junio de 2022. Disponible en: https://www.france24.com/es/minuto-a-minuto/20220628-venezuela- est%C3%A1-lista-para-recibir-a-las-petroleras-francesas-dice-maduro
43 AGENCIA EFE. «Colombia y Venezuela reabren la frontera común cerrada hace siete años». 26 de septiembre de 2022. Disponible en: https://efe.com/mundo/2022-09-26/colombia-venezuela-insumos- medicos-lo-primero-en-pasar-en-la-reapertura-de-la-frontera/
44 RIVAS MOLINA, Federico. «Argentina quiere “recuperar el vínculo pleno con Venezuela”», El País. 18 de abril de 2022. Disponible en: https://elpais.com/internacional/2022-04-18/argentina-quiere- recuperar-el-vinculo-pleno-con-venezuela.html
45 Venezuela llegó a producir 3,2 millones de barriles diarios en 1997 y los veinte años siguientes se mantuvo por encima de los 2 millones hasta su hundimiento.
46 SANZ, J. «Venezuela, camino del milagro económico», La Razón. 20 de noviembre de 2022. Disponible en: https://www.larazon.es/economia/20221120/wthsku7p5rafzk4huldje76pp4.html
47 CASTRO, Blanca, DOMÍNGUEZ LOEDA, Gonzalo y APF. «Venezuela estrena el "bolívar digital" tras su tercera reconversión monetaria en 13 años». Euronews, 1 de octubre de 2021. Disponible en: https://es.euronews.com/2021/10/01/venezuela-estrena-el-bolivar-digital-tras-su-tercera-reconversion- monetaria-en-13-anos
48 El dólar se utiliza ya en casi dos tercios de las transacciones.
49 QUESADA, Juan Diego. «El Gobierno venezolano y la oposición acuerdan descongelar entre 3.000 y
5.000 millones de fondos estatales en el extranjero», El País. 26 de noviembre de 2022. Disponible en: https://elpais.com/mexico/2022-11-26/el-gobierno-venezolano-y-la-oposicion-acuerdan-descongelar- 5000-millones-de-fondos-estatales-en-el-extranjero.html
50 LEÓN, Ibis. «Plataforma Unitaria se solidariza con Juan Guaidó y rechaza “persecución” de Maduro», Efecto Coyuco. 25 de abril de 2023. Disponible en: https://efectococuyo.com/politica/plataforma-unitaria- se-solidariza-con-juan-guaido-y-rechaza-persecucion-de-maduro/
51 Por ejemplo, nada más conocer la disolución del Gobierno de Guaidó, EE.UU. se apropió de los edificios de la embajada venezolana, ignorando a la denominada Comisión de Protección de Activos creada por la nueva dirección de la AN de 2016, a la que Washington no ha reconocido como interlocutor político aceptable.
52 OCANDO ALEX, Gustavo. «Una exdiputada y un comediante parten como favoritos en primaria opositora en Venezuela», Voz de América. 20 de febrero de 2023. Disponible en: https://www.vozdeamerica.com/a/exdiputada-y-comediante-parten-como-favoritos-primaria-opositora- venezuela/6967586.html
53 Líderes como Capriles se postulan a favor de la intervención del CNE, mientras que la radical María Corina Machado se muestra en contra.
54 QUESADA, Juan Diego. «Maduro volverá a la mesa de México si se liberan los activos en el extranjero y recibe licencias para vender petróleo», El País. 28 de marzo de 2023. Disponible en: https://elpais.com/internacional/2023-03-28/maduro-volvera-a-la-mesa-de-mexico-si-se-liberan-los- activos-en-el-extranjero-y-recibe-licencias-para-vender-petroleo.html
55 MORALES P., Maru. «Gerardo Blyde aclara: Miraflores sabe dónde está el dinero congelado para activar el Fondo Social», Crónica Uno. 20 de enero de 2023. Disponible en: https://cronica.uno/gerardo- blyde-aclara-miraflores-sabe-sobre-donde-esta-el-dinero-congelado-para-activar-el-fondo-social/
56 MARTÍNEZ, Deisy. «VP no tiene prevista sustitución de candidatura de Guaidó si persiste inhabilitación política», Efecto Coyuco. 14 de marzo de 2023. Disponible en: https://efectococuyo.com/politica/vp-sustitucion-candidatura-guaido-inhabilitacion-politica/