¿Una desintegración ordenada en el Magreb y un nuevo mapa político en el Sahel?
- Complementariedades naturales y obstáculos artificiales
- El obstáculo argelino
- Marruecos como país clave
- Escenario de reconfiguración 2025-2035
- Implicaciones y perspectivas
Las fronteras heredadas de la colonización, trazadas arbitrariamente en interés de las potencias europeas, han creado Estados artificiales que ignoran las realidades étnicas, culturales y económicas seculares. Esta división artificial se ve ahora cuestionada por la necesidad de un desarrollo integrado de la región y el imperativo de estabilizar el Sahel.
La proliferación de iniciativas de desarrollo regional, especialmente las apoyadas por Marruecos, exige una reorganización territorial coherente. Elgasoducto atlántico africano, lainiciativa de acceso al Atlántico para los países del Sahel y el proyecto de enlace ferroviario entre El Cairo y Tánger no pueden desarrollar todo su potencial dentro de las fronteras actuales. Estos proyectos estructurantes requieren un espacio fluido e integrado en el que puedan expresarse plenamente las complementariedades naturales.
El reiterado fracaso de los enfoques puramente basados en la seguridad en el Sahel demuestra la necesidad de un cambio de paradigma. Desde la Operación Serval hasta Barkhane, pasando por las diversas iniciativas del G5 Sahel, todos los intentos de estabilización centrados únicamente en el aspecto militar han fracasado. Esta lección histórica exige un nuevo enfoque, que combine seguridad y desarrollo en un marco territorial replanteado.
Complementariedades naturales y obstáculos artificiales
Las regiones del Magreb y del Sahel presentan complementariedades geoestratégicas naturales evidentes. El Magreb ofrece un doble acceso al Mediterráneo y alAtlántico, mientras que el Sahel proporciona una profundidad estratégica esencial hacia el África subsahariana. Esta complementariedad natural, que históricamente ha estructurado el comercio transahariano durante siglos, se ve hoy obstaculizada por unas fronteras coloniales que ignoran las realidades históricas, étnicas y económicas.
El obstáculo argelino
Argelia es actualmente el principal obstáculo para cualquier integración regional. El emblemático proyecto de enlace ferroviario El Cairo-Tánger, vital para el desarrollo norteafricano, sigue bloqueado por su intransigencia. Esta obstrucción sistemática de los proyectos de integración regional va acompañada de tensiones con prácticamente todos sus vecinos: relaciones lamentables con Malí, conflicto latente con Marruecos, intentos de desestabilización y tensiones con Túnez y Libia.
La ceguera geoestratégica del régimen argelino se manifiesta también en sus arriesgadas opciones diplomáticas. Su reciente apoyo al régimen de Assad, en un momento en el que se perfila un consenso internacional a favor de su salida, ilustra esta incapacidad crónica para leer la evolución geopolítica mundial. Esta miopía estratégica, combinada con una economía no diversificada y un ejército que pierde capacidad, está precipitando el aislamiento del país.
Marruecos como país clave
En este contexto, Marruecos emerge naturalmente como un país pivote gracias a su posición geográfica única. Su doble fachada marítima, su proximidad a Europa y sus profundas raíces africanas lo convierten en un centro natural para la integración regional. Esta posición va acompañada de una experiencia demostrada en materia de desarrollo integrado, ilustrada por el éxito de grandes proyectos estructurantes y una visión holística del desarrollo.
El liderazgo de Marruecos se expresa a través de varias iniciativas importantes: elGasoducto Atlántico Africano(AAGP), un proyecto de 25.000 millones de dólares que constituye la columna vertebral de una nueva integración regional, laIniciativa de Acceso al Atlántico para los países del Sahel, laAlianza de Estados Africanos Atlánticos, el proyecto de la Pasarela de Dajla y los corredores económicos Este-Oeste.
Escenario de reconfiguración 2025-2035
Este análisis proyecta una importante recomposición con :
- La devolución a Marruecos de los territorios del Sáhara Oriental de los que había sido amputado
- La aparición de un nuevo Estado saheliano federado que incorpore parte del sur de Argelia
- Una Argelia reorientada hacia la antigua regencia de Argel
- Una Cabilia independiente
- Un plan de modernización masiva de la nueva Argelia y la nueva Cabilia.
Esta reconfiguración se vio alentada por la nueva doctrina estadounidense no intervencionista y la aceptación de la cohabitación ruso-estadounidense en la región. El apoyo financiero internacional y la implicación de los actores económicos mundiales facilitan esta transición ordenada.
Implicaciones y perspectivas
La implementación requiere una gestión ordenada de la transición, garantías internacionales sólidas y un apoyo económico sustancial. Los beneficios esperados incluyen una mayor estabilidad regional, una integración económica más profunda, un desarrollo más equilibrado y una reducción de las tensiones étnicas.
Esta importante reconfiguración geopolítica allana el camino hacia un nuevo orden regional más estable y próspero, basado en el respeto de las realidades históricas y étnicas e integrado en una dinámica de desarrollo moderna y sostenible.
Abdelhakim Yamani. Instituto Geopolítico Horizons