Marruecos y la seguridad de España
Pau Solanilla, Director de Marruecos Negocios
Pie de foto: Momento de la detención del supuesto terrorista en San Martín de la Vega (Madrid)
Marruecos y España han completado la tercera gran operación antiyihadista conjunta en el último año y medio. Una operación que ha concluido de momento con 14 detenidos que pretendían reeditar en Marruecos y en España las masacres perpetradas por los integrantes del Daesh. Los 14 presuntos yihadistas, la mayoría de ellos residían en Marruecos (Nador, Fez, Casablanca, Alhucemas y Driuch) y uno en Madrid, en San Martín de la Vega. Todos están acusados de captar, reclutar y adoctrinar gente para integrarla en las filas del Daesh en Siria e Irak. Marruecos y España estamos amenazados por los mismos grupos terroristas.
La operación viene a certificar, la importancia de Marruecos para la seguridad de España. La excelente colaboración institucional y policial entre los dos países, constituye el mejor ejemplo de que las relaciones políticas, económicas, sociales y culturales son de interés estratégico para España. Los intereses de España no solo se defienden en territorio español. Casi 1000 empresas (la mayoría pymes) están ya establecidas en el país vecino, ofreciendo excelentes oportunidades de desarrollo conjunto, no solo en Marruecos, sino en el continente africano. No en vano Marruecos es uno de los países con mejores relaciones políticas y económicas en África Occidental. Unas relaciones que alimenta y cuida con mimo el rey Mohamed VI. La seguridad de nuestras empresas forma parte de la seguridad de España.
Nadie niega que Marruecos tiene todavía hoy contradicciones que gestionar, modernizar su economía e infraestructuras, mejorar su gobernanza institucional, invertir en desarrollo o mejorar la cohesión social y territorial. Peroes evidente que el país ha hecho grandes progresos en los últimos 15 años. Por otro lado, el país tiene igualmente un importante reto para encarrilar una solución justa y duradera para el Sáhara Occidental. Una solución que permita igualmente normalizar las relaciones con su vecino argelino y dar un empuje a la integración regional, requisito imprescindible además para garantizar un entorno de seguridad y estabilidad ante la amenaza terrorista.
Por otro lado, la colaboración marroquí se muestra eficaz para contener la inmigración ilegal. La lucha contra las mafias que trafican con personas han casi desaparecido en el sur de España, y en estos días que asistimos con estupor a la avalancha de emigrantes y refugiados en el Mediterráneo, vale la pena destacar el trabajo del vecino marroquí con limitados recursos.
Así pues, la colaboración con Marruecos es estratégica para España. Aquellos que periódicamente pretenden desestabilizarla, con medias verdades, deben ser descalificados. Marruecos es un país socio y amigo, y todo lo bueno que le ocurra será bueno para España y viceversa. Cuidemos y alimentemos esta relación, no solo son negocios, nuestra seguridad está igualmente en juego.