Gracia real: un símbolo de “orientación” y “reconciliación”
El perdón real es un gesto de riqueza simbólica y un aspecto singular en la Monarquía marroquí, ya que testimonia la sabiduría y la compasión de Su Majestad el Rey, que Dios le asista, afirmando al mismo tiempo la soberanía y la unidad de la nación.
Esta dualidad, lejos de ser paradójica, es la clave de la resiliencia y la prosperidad de Marruecos. Por gracia real, Marruecos continúa escribiendo su historia reconciliando tradición y modernidad, justicia y humanidad...
Con motivo del Día del Trono de este año 1446 H - 2024 G, Su Majestad el Rey Mohammed VI, que Dios perpetúe su gloria, tuvo la amabilidad de conceder su perdón a un grupo de personas condenadas por diferentes tribunales del Reino.
Estas personas suman 2.476, y esta acción real está profundamente arraigada en la tradición milenaria de la monarquía del Reino. Además, en la evolución multidimensional de Marruecos, ante desafíos multifacéticos, el perdón real destaca como un acto de soberanía y profunda humanidad.
De hecho, este gesto, arraigado en la tradición marroquí, encarna tanto la defensa de la integridad nacional como la compasión real hacia sus súbditos, reafirmando así los valores fundamentales de la nación.
Somos conscientes de que nuestros adversarios intentan constantemente poner a algunas personas en nuestra contra, pero se topan con un muro. Marruecos avanza centrándose en su futuro, mientras nuestros adversarios pierden tiempo y recursos atacándonos.
La gracia real, por su propia naturaleza, demuestra la capacidad de Marruecos para afrontar los desafíos con una visión clara y unificada, guiada por valores de Orientación y Reconciliación.