Oportunidades para Latinoamérica en el nuevo entorno geopolítico
El calidoscopio de la globalización desde la crisis financiera de 2008, pero fundamentalmente desde la COVID-19 y tras la ilegal invasión de Rusia a Ucrania el 24 de febrero de 2022, viró su orientación y comenzó una nueva fase que paso a denominarse de diferentes maneras, haciendo más o menos fortuna los términos de “desglobalización, reglobalización o nueva globalización”, que es el que he escogido.
Esta nueva globalización, incorpora la seguridad, la flexibilidad y la resiliencia de las cadenas de suministro, es decir, las empresas adoptan las nuevas tendencias estratégicas de producción basadas en los conceptos conocidos como friendshoring (país amigo o acogida de amigo) y nearshoring (producción cercana), y como estos le son favorables a América Latina (en adelante Iberoamérica), pues cuadran con los principios que propone la secretaria del Tesoro de los Estados Unidos, Janet Yellen, para hacer más efectivo y seguro el comercio, así como con el valor que supone la cercanía geográfica donde se localiza la producción.
En un documento marco titulado “La nueva globalización y las oportunidades para Iberoamérica: friendshoring y nearshoring” publicado por el Instituto Español de Estudios Estratégicos analizo la evolución de la globalización, fundamentalmente desde la COVID-19 y tras la invasión de Rusia a Ucrania y cómo en el nuevo entorno geopolítico el principio de seguridad económica, apoyado en la flexibilidad y la resiliencia de las cadenas de suministro, ha ido ganando protagonismo, a través de conceptos como friendshoring (países amigos) y nearshoring (países cercanos) favoreciendo inversiones estratégicas en América Latina que podrían conllevar innovación, tecnología y mayor valor añadido con empleos de mayor calidad.
Principales conclusiones del informe:
• Fragilidad de la globalización: la deslocalización de la producción propiciada por globalización de la economía se manifestó como una extrema dependencia de terceros países que se acentuó con episodios como la COVID-19 o la invasión de Ucrania. A nivel mundial, China representa el 21 % de manufacturas finales y el 30 % de productos intermedios) y mantiene la preponderancia en sectores claves como las energías verdes (90 % de los paneles solares). La geopolítica ha invadido la economía y ahora Estados Unidos, Europa y China, hablan entre ellas de amenazas, guerras comerciales, tarifas, carreras tecnológicas, armamentísticas, seguridad económica… superponiendo objetivos e intereses económicos y de política exterior. Alineándose con esta nueva reglobalización, que implica un menor crecimiento del comercio global para 2025 y 2026, las empresas rediseñan las cadenas de suministro para hacerlas más resilientes, sostenibles y flexibles, utilizando la nueva tendencia estratégica del friendshoring y el nearshoring que diversifica la producción entre varios países y reduciendo así la dependencia estratégica.
• Oportunidad para Latinoamérica: en este contexto, América Latina puede beneficiarse de inversiones productivas tanto de Europa como de China o Estados Unidos, acelerando su industrialización y modernización productiva a través de la innovación, la tecnología y un mayor valor añadido, con empleos de mayor calidad. Sería un buen paso para superar el atractivo que sin duda seguirá ofreciendo por su riqueza en recursos naturales. Actualmente, China es el país más importante para las exportaciones de Brasil, Chile, Cuba, Perú y Uruguay. Para el autor, la UE debería apostar por ganar peso en la región, aprovechando la relevante presencia de España como primer inversor europeo en la región y segundo mundial solo por detrás de Estados Unidos. De no hacerlo, otros ocuparán su puesto.
• México y Costa Rica se estarían beneficiando ya de las estrategias de nearshoring y friendshoring, pero ambas tendencias suponen una oportunidad para toda la región. En el caso de México, se ha convertido ya en el primer proveedor de los Estados Unidos, superando a Canadá y China. En 2023, las exportaciones mexicanas a EE. UU. alcanzaron 475.607 millones de dólares (+16,4 % anual vs las chinas que cayeron un 21 % anual).
CASILDA BÉJAR, Ramón. “La nueva globalización y las oportunidades para Iberoamérica: friendshoring y nearshoring”. Documento Marco IEEE 01/2025. https://www.defensa.gob.es/documents/2073105/2383976/la_nueva_globalizacion_y_las_oportunidades_para_iberoamerica_2025_dieeem01.pdf/d961b080-5561-f162-d9c5-4bc91fc9e6ec?t=1739879840165