Por valor de más de 6.900 millones de dólares

Arabia Saudí y China firman un importante acuerdo de intercambio de divisas

REUTERS/JASON LEE - Sede del Banco Popular de China, el Banco Central, en Pekín, China

El Banco Central de Arabia Saudí, conocido como Autoridad Monetaria de Arabia Saudí (SAMA), firmó con el Banco Popular de China un acuerdo de intercambio de divisas valorado en más de 6.900 millones de dólares para un plazo de tres años. 

Este acuerdo se rubricó “en el contexto de la cooperación financiera entre el Banco Central de Arabia Saudí y el Banco Popular de China”, según se señaló en un comunicado oficial de SAMA.

El acuerdo tiene una duración de tres años, pero el Banco Popular de China reconoció que el acuerdo se podría extender durante más tiempo dentro de una dinámica de cooperación financiera entre ambas naciones que busca promover el uso de las monedas locales de los dos países con el reto de fomentar el comercio y las inversiones entre ambos.

Los “swaps” o acuerdos de intercambio de divisas son acuerdos financieros entre países de cara a intercambiar una determinada cantidad de una moneda por un valor equivalente en otra moneda; precisamente, lo que acaban de suscribir el reino saudí y el gigante chino. Así, una línea swap es un acuerdo entre dos bancos centrales para intercambiar sus monedas respectivas, permitiendo a un banco central obtener liquidez en moneda extranjera del banco central que la emite, generalmente para satisfacer la necesidad de esa moneda de los bancos comerciales nacionales. 

REUTERS/AHMED YOSRI - Un intercambiador saudí cuenta billetes de rial saudí en una tienda de cambio de moneda en Riad, Arabia Saudí

Las líneas swap, utilizadas inicialmente por los bancos centrales para financiar determinadas intervenciones en los mercados, se han convertido en los últimos años en un instrumento importante para mantener la estabilidad financiera e impedir que las tensiones de los mercados afecten a la economía real. Estos acuerdos de divisas buscan la provisión de liquidez en moneda extranjera a los bancos centrales que lo suscriben. 

En esta línea, las relaciones económicas entre Arabia Saudí y China siguen estrechándose. Un reciente informe publicado por la Autoridad General de Estadísticas de Arabia Saudí en agosto señaló que las exportaciones del reino saudí a China alcanzaron los 51.300 millones de dólares, lo que convierte al gigante asiático en su principal socio comercial. Las importaciones del Reino procedentes de China rozaron también los 50.000 millones de dólares. Lo que da muestra de la importancia del flujo comercial entre ambas naciones en uno y otro sentido. 

Además, en septiembre, Arabia Saudí y China firmaron un memorando de entendimiento para intercambiar experiencia en sistemas de transporte modernos, incluidos métodos de alta tecnología para mejorar las carreteras, construir vehículos autónomos y mejorar el transporte marítimo y el funcionamiento de los puertos, como informó el medio Arab News. 

Ese mismo mes, para reforzar el vínculo turístico entre ambos países, China concedió oficialmente a Arabia Saudí el estatus de destino aprobado, lo que permite a los ciudadanos chinos viajar al reino saudí en viajes de grupo.

PHOTO/AP - Mohamed bin Salman y Xi Jinping

Recientemente, también tuvo lugar la 10ª Conferencia de Negocios Árabe-China, un foro chino-saudí encaminado a fortalecer la relación bilateral entre ambas naciones. Hace escasos meses, China y Arabia Saudí sellaron hasta 30 acuerdos de inversión por valor de 10.000 millones de dólares en sectores como la tecnología, las energías renovables, la agricultura, la sanidad o el turismo. “El príncipe heredero Mohamed bin Salman ha ampliado continuamente los esfuerzos para mejorar la asociación fuerte y de larga data entre el mundo árabe y China en todos los ámbitos”, señaló el ministro saudí de Exteriores, el príncipe Faisal bin Farhan, durante la inauguración de la cumbre. 

Durante el encuentro, organizado por Ministerios de ambos países en colaboración con la Liga Árabe, el Gobierno saudí acordó con varias empresas chinas proyectos relacionados con la investigación, el desarrollo, la producción y venta de automóviles, el desarrollo del turismo, así como la fabricación de material ferroviario. También se promovió la asociación entre compañías chinas y saudíes. 

Todos estos movimientos económicos demuestran el gran momento de cooperación que viven Arabia Saudí y China. Que a nivel político también se manifiesta de varias formas, como, por ejemplo, a través de los últimos contactos que mantuvieron a nivel de ministros de Exteriores en el marco de la última cumbre que acogió el gigante chino este lunes para tratar la guerra entre Israel y Hamás en Gaza.