La agencia de calificación Fitch Ratings señala que el país está en uno de sus mejores momentos económicos

Marruecos es calificado como país “BB+” gracias a su estabilidad económica

REUTERS/REINHARD KRAUSE - Logo de Fitch Ratings en sus oficinas en el distrito financiero de Canary Wharf en Londres

Marruecos sigue acumulando buenas noticias desde que el Gobierno de Aziz Akhannouch tomó las riendas del país en este último trimestre del año. Fitch Ratings, una famosa agencia de calificación mundial, ha designado al país alauí con la calificación de ‘BB+’ -un grado de emisión que esta empresa indica que significa que hay un riesgo de crédito relativamente bajo a moderado- debido a la Calificación de Incumplimiento del Emisor de Moneda Extranjera (IDR) a largo plazo. Según esta marca, el Reino se encuentra en una perspectiva estable que se debe a una gran estabilidad macroeconómica del país, que, a su vez, acumula una baja inflación, una proporción moderada de la deuda en moneda extranjera y que cuenta con cómodos colchones de liquidez externa.

“Se espera que el déficit fiscal de Marruecos se reduzca al 6,3% del PIB en 2021 desde el 7,7% en 2020 (excluyendo los ingresos de la privatización) ya que la recuperación económica provocó un sólido resurgimiento de los ingresos”, afirma Fitch en un comunicado de prensa. 

Por su parte, la agencia espera que los déficits fiscales empiecen a disminuir gradualmente a medida que se aumente el gasto que ha propuesto el Gobierno con el Nuevo Modelo de Desarrollo (NDM), que se centra en el aumento del dinero en la prestación de servicios sociales como es la salud y la educación, además de un aumento de la expansión de estos mismos. Los expertos analistas vaticinan que las medidas de ingreso que se han planificado, más la ampliación de la base impositiva en la mejora de la administración tributaria y la reducción de las transferencias a los negocios del país, serán los únicos beneficiados del gasto del NDM, por lo que los riesgos de financiamiento fiscal son bajos. Además, se espera que este financiamiento cubra dos tercios de los requisitos impuestos para 2022 y 2023.

Cabe resaltar, que el nuevo Gobierno está comprometido con el proceso de vacunación de sus habitantes, además de la cobertura médica que recibe la población tanto por COVID-19 como por otras cuestiones, lo que supone un gasto alto, pero a la vez efectivo. Esto, según indica Fitch, supondrá una relajación de la crisis sanitaria y conducirá a un repunte del PIB de la nación que ahora mismo se encuentra en un 6,2%, pero que se prevé que en 2022 sea de un 3,2%, lo que hará ver una gran crecida del potencial de Marruecos a largo plazo. 

La agencia añade que la estrategia del Ejecutivo en cooperación con el sector privado y las reformas del mercado de productos y las laborales, serán efectivas y ayudarán a la recuperación de la economía del país. Asimismo, las importaciones y exportaciones de Marruecos aumentarán más de un 20% ya que hay una demanda reprimida de bienes de consumo y de vehículos, como de los gastos que existen de fabricación, suministros y servicios médicos y los precios de la energía que en este momento son altos. 

Marruecos se encuentra en uno de sus mejores momentos económicos, a pesar de las dificultades derivadas de la pandemia, problemas de vecindad y el paro juvenil. Hoy en día, el país magrebí cuenta con un PIB de 114.000 millones, lo que le ha valido el puesto de la quinta mejor economía de África, y la tercera de la región MENA. El Reino ha sabido posicionarse, con un plan estratégico desde hace diez años, para conseguir estar en el lugar que le corresponde. Estos resultados se deben a las grandes apuestas en los sectores del automóvil, aeronáutica y el sector agrícola, que se ha comprobado que han recaudado números beneficios para la nación. Los cambios sociales y políticos de los últimos tiempos le han llevado a una gran estabilidad de su sistema político y económico, que deriva en que grandes empresas quieren establecerse a la región. Además, cabe añadir que el Reino tiene el foco puesto en la expansión mundial con sus políticas inversoras. También, su posición estratégica como puerta de comercio al mar Mediterráneo y gracias a su amistad con distintos países fuera de África lo convierten en un punto clave para las empresas que quieran expandir su actividad por el continente.