Marruecos presenta su proyecto Ley de Finanzas para 2025
El Gobierno de Marruecos ha dado a conocer el proyecto de ley de finanzas para el periodo fiscal de 2025, destacando cuatro prioridades clave que reflejan su compromiso estratégico con el desarrollo del país. Este nuevo proyecto, detallado en una directiva del primer ministro dirigida a los distintos departamentos ministeriales, marca la hoja de ruta para la agenda económica futura del Ejecutivo.
Como informa Morocco World News, la directiva establece cuatro objetivos principales para el próximo año fiscal: el fortalecimiento de la red de protección social, la mejora de la inversión y la creación de empleo, el avance en las reformas estructurales y la garantía de la sostenibilidad de las finanzas públicas. Se pone un énfasis particular en acelerar la ejecución del programa gubernamental, mejorar la supervisión de las medidas implementadas, refinar los procesos operativos y de coordinación, y abordar los asuntos clave con una mayor transparencia.
En el ámbito de la protección social, el Gobierno planea reforzar el sistema sanitario mediante inversiones en la renovación y ampliación de las instalaciones médicas. Entre las iniciativas más destacadas se encuentran la renovación continua de los hospitales regionales y provinciales, la reconstrucción del Hospital Ibn Sina de Rabat, y la aceleración de la construcción y equipamiento de centros médicos en todo el país.
Para mejorar los recursos humanos en el sector sanitario, el Gobierno implementará una nueva legislación que regirá las funciones de salud pública, con el objetivo de aumentar el número de profesionales médicos y paramédicos a 25 por cada 10.000 habitantes en 2026 y a 45 por cada 10.000 habitantes en 2030. La administración reafirma su compromiso de priorizar el desarrollo del capital humano, considerándolo como el objetivo último de todas las políticas públicas y un referente clave para evaluar las intervenciones gubernamentales.
En busca de la prosperidad económica, la directiva subraya que garantizar la dignidad y una vida decente para las familias marroquíes requiere una política económica estratégica. Esta política dará prioridad a la promoción de la inversión, la creación de empleo y el apoyo a sectores emergentes, asegurando así los fondos necesarios para mantener los pilares fundamentales del Estado social.
Esto se refleja en la implementación continua y efectiva del programa de asistencia social directa del Gobierno, operativizado a través de la Agencia Nacional de Apoyo Social. Hasta junio de 2024, el programa asistía a aproximadamente 3,8 millones de familias, incluidas más de 5 millones de niños, con un coste anual de unos 25.000 millones de dirhams marroquíes (2,5 mil millones de dólares). A partir de enero de 2025, los niveles de apoyo se incrementarán. La ayuda para los tres primeros hijos que estén escolarizados, menores de seis años o que tengan alguna discapacidad aumentará a 250 dirhams (25,5 dólares) por niño, y a 350 dirhams (35,7 dólares) para aquellos con discapacidades.
Los niños no escolarizados recibirán 175 dirhams (17,8 dólares). Los huérfanos menores de seis años, o aquellos que continúen sus estudios, recibirán 375 dirhams (38 dólares) por niño para los tres primeros, con un apoyo familiar mínimo de 500 dirhams (51 dólares). Estos cambios elevarán el coste total del programa a 26,5 mil millones de dirhams (2,7 mil millones de dólares) para el año 2025.
Por otra parte, el Gobierno también se compromete a avanzar en sus políticas territoriales, lanzando una nueva fase de convergencia e integración territorial que incluirá diversos mecanismos contractuales e iniciativas económicas innovadoras con entidades regionales, además de acelerar la ejecución de programas de desarrollo y la planificación espacial regional. Otras prioridades clave para los próximos años incluyen la soberanía en agua, alimentos y energía, así como la protección del poder adquisitivo.
Se planea acelerar la finalización de plantas de desalinización de agua de mar, con el objetivo de movilizar más de 1.700 millones de metros cúbicos de agua anualmente, en línea con las directrices del rey Mohammed VI para abordar la crisis hídrica. Estas instalaciones se espera que cubran más de la mitad de las necesidades de agua potable del país para 2030 y proporcionen riego para vastas áreas agrícolas, lo que mejorará la seguridad alimentaria nacional.
Además, el Gobierno continuará implementando la estrategia "Generación Verde" para aprovechar los avances en el sector agrícola y garantizar su resiliencia ante el cambio climático. Mientras tanto, se esfuerza por mantener las finanzas públicas en una trayectoria sostenible, con el objetivo de reducir el déficit presupuestario al 4% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2024, al 3,5% en 2025 y al 3% en 2026. También gestionará los niveles de deuda, con la meta de mantenerlos por debajo del 70% del PIB para 2026.
Este enfoque está diseñado para restaurar los márgenes financieros necesarios para continuar con varios proyectos de desarrollo, preservando al mismo tiempo el impulso de la inversión pública, un elemento crucial para fortalecer el Estado social.
En línea con estas prioridades, el Gobierno anticipa lograr una tasa de crecimiento de aproximadamente el 4,6% en 2025, frente al 3,3% previsto para 2024.
Por todo ello, el proyecto de ley de finanzas para 2025 del Gobierno marroquí refleja un enfoque decidido en fortalecer el Estado social a través de una gestión estratégica de la inversión, la protección social y la sostenibilidad fiscal. Con metas claras para mejorar la infraestructura sanitaria, fomentar el desarrollo regional y mantener la estabilidad económica, Marruecos se prepara para un crecimiento continuo y una mayor resiliencia frente a desafíos futuros.