Menos impuestos y más oferta pública, la propuesta de la CGEM en Marruecos para 2025
De cara al curso que viene, la Confederación General de Empresas Marroquíes (CGEM) ha presentado su nueva propuesta para el proyecto de la Ley de Finanzas del año 2025, donde se incluyen muchos cambios de gran interés para el empresario marroquí. Desde la reducción de impuestos hasta el fomento de nuevas startups, la CGEM pretende dar un salto de gigante con la implementación de 26 nuevas regulaciones.
Los puntos principales de la nueva regulación son: reducir impuestos laborales, cambiar el método de cálculo del impuesto profesional, implementar impuestos ecológicos y de carbono adecuados, mejorar la neutralidad fiscal de las reestructuraciones de grupo, impulsar el desarrollo de startups, fomentar las ofertas públicas, promover la valorización de residuos y fomentar la transición energética. La organización encabezada por Chakib Alj ha centrado la reforma en el bienestar laboral de empresario y trabajador.
La primera medida es la reducción de la escala en el Impuesto de la Renta (IR) en un período de 3 años con una tasa objetivo del 35 % en 2027, es decir, un punto por año. Esto quiere decir que la tasa se irá reduciendo de forma progresiva durante los próximos 3 años, con la idea de llegar a pagar un máximo de 35 % en impuestos para las rentas marginales (las más altas). El efecto de la medida ahorrará grandes cantidades de dinero a las grandes fortunas, por lo que la inversión aumentará progresivamente.
Ampliación del límite de exención de las indemnizaciones por despido hasta 2 millones de dirhams a partir de los 50 años. Esta medida pretende que solo se paguen impuestos para la cantidad que exceda de los 2 millones. Por ejemplo, si por despido se reciben 3,5 millones de dirhams, solo tributarían 1,5 millones. Los dos primeros millones quedarían exentos.
Aumentar el umbral de exención de la “prima cesta”. Esto quiere decir que los extras aportados por el jefe (prima cesta) por cualquier razón laboral tributará siempre que no se superen los 50 dirhams.
Mantener la exención de 5 años para los negocios nuevos. Este incentivo pretende que quien monte una empresa en Marruecos estará libre de impuestos durante los primeros 5 años con el fin de aumentar la inversión y el fomento al trabajo.
Modificar las bases impositivas para igualar a funcionarios de un mismo sector usando el EBE como referencia. Con esto se busca que, bajo el Excedente Bruto de Explotación (EBE), que mide las ganancias de la empresa antes de descontar impuestos, se imparta un impuesto común para todos los negocios de carácter similar, obviando razones como si el local es alquilado.
Armonizar el método de liquidación. Reducir el proceso de cálculo es crucial para las empresas ya que evitará errores en cuanto a la cantidad de impuestos que se deben pagar por lo que también se verán reducidas el número de multas por la Hacienda marroquí.
Implantación del impuesto de “el que contamina paga”. Concienciados con el cambio climático, la CGEM pretende que las empresas se dirijan hacia una sostenibilidad verde en la que solo aquellas que no se adapten a los nuevos tiempos tendrán que pagar más, evitando así que una actividad no pague impuestos dos veces.
Esta medida se realizará en el corto y largo plazo, comenzando primero con la aplicación a empresas de 5 sectores como sustituto de los impuestos actuales de estos, para evitar la carga fiscal de las empresas. En el largo plazo se buscará establecer un sistema impositivo donde se incluyan a todos los sectores, estableciendo un sistema ETS (Emissions Trading System) donde las compañías que contaminen menos de lo mínimo podrán vender sus permisos a aquellas que lo necesiten.
Mejorar las fusiones de los grupos de empresas. Esto quiere decir que si empresas se fusionan se busca que paguen menos impuestos evitando aquellos que sean necesarios. De esta forma se busca neutralizar aquellas imposiciones que pueden duplicarse, triplicarse... en función de la cantidad de compañías que se fusionen. No solo se mejorarán las fusiones, sino que se ampliarán las escisiones para que las compañías que se junten puedan continuar beneficiándose de tratamientos fiscales favorables.
Para evitar complicaciones en las declaraciones de la renta, se va a permitir valorar todos los activos bajo el mismo parámetro para poder unificar y evitar discrepancias. Dentro de estos activos se podrán incluir propiedades y equipo técnico. Además, se facilitará la aportación de terceros a empresas de forma más eficiente y con menos cargas fiscales.
Propuestas tributarias y aduaneras
Con el foco puesto en la atracción de inversión extranjera la CGEM plantea reducir las aportaciones tributarias y pagos en las aduanas. Como primera medida la Confederación plantea la unificación de cuotas para simplificar, agilizar y facilitar el proceso de pago de impuestos a las empresas. Del mismo modo, se plantea aumentar el umbral de deducibilidad en la compra de vehículos de empresa.
En cuanto al Impuesto sobre el Valor Añadido, la CGEM plantea cambios que favorezcan la neutralidad, es decir, igualar los tipos impositivos a la baja para que las grandes compañías mantengan las inversiones y las pymes puedan acceder con mayor competitividad al mercado. Para ello la Confederación plantea redefinir el concepto de pequeña y mediana empresa para poder así aplicarle beneficios fiscales que se adapten a su sector.
¿En qué repercute esto en el trabajador? Una mejor definición de los conceptos de pyme facilitará a dichas compañías cursillos de formación gratuitos que podrán solicitarse en el Ministerio de Trabajo. Dichos cursos estarán exentos de impuestos para las empresas por lo que los empresarios podrán aumentar las capacidades cognitivas y prácticas de sus empleados a coste cero; mientras el trabajador adquiere más conocimientos.
Al igual que las pymes, las startups son el nuevo proyecto que la CGEM quiere impulsar. Mayores beneficios fiscales, exenciones e inversores son algunas de los puntos en los que la organización quiere poner el foco para que, aquellos que inviertan en estas nuevas empresas emergentes, reciban grandes beneficios.
En cuanto al IVA de productos, se han centrado en el plástico, uno de los mayores enemigos de la lucha contra el cambio climático. Se aplicarán dos tipos impositivos dependiendo del porcentaje de plástico reciclado que contengan los residuos. Si este no pasa del 95 % los tipos impositivos se mantendrán; en caso contrario, se aplicará una reducción considerable en el pago de impuestos por los residuos plásticos.
En este sentido, los grandes beneficiados serán las empresas del sector agroalimentario quienes verán reducciones del 20 al 10 %. Este nuevo tipo se aplicará sobre productos procesados. Junto a la eliminación de las tasaciones impuestas por los intermediarios, estaríamos hablando de una reducción del IVA de los productos procesados de más del 150 %.
Empresas del sector metalúrgico recibirán también las mismas bonificaciones. Estas empresas primero deberán formalizar la procedencia de los materiales adquiridos y realizar una autoliquidación previa para poder aprovecharse después de los nuevos beneficios fiscales.
Sin embargo, en materia aduanera, la organización plantea una mejor revisión sobre los productos importados que vienen del extranjero ajustándolos al TIC (Impuesto de Consumo Interno) con el fin de igualar los pagos y agilizar los procesos de este. En referencia a la compra de productos, la CGEM ha querido destacar la reducción de tasas aduaneras sobre el atún congelado para beneficio de las compañías que lo procesan; y a los acumuladores de energía a quienes se les reducirán los impuestos actuales del 40 % a un simbólico 2,5 %.
Con este paquete de 26 medidas la Confederación General de Empresas Marroquíes pretende que los efectos ya positivos de la Nueva Carta de Inversiones se prorroguen mínimo hasta 2027. En línea con las acciones gubernamentales la Confederación ha dado un gran paso en la armonización fiscal de los empresarios cuyas acciones se dan en territorio nacional.
A la espera de que se aprueben, asociaciones de empresarios marroquíes han dado el visto bueno a los paquetes, los cuales esperan que se apliquen lo antes posible.