El Foro de Cooperación China-África avala la integridad territorial de Marruecos
- Aval a Marruecos y rechazo al Frente Polisario y la RASD
- Gran respaldo internacional a la propuesta de Marruecos para el Sáhara Occidental
Pekín ha sido el escenario elegido para albergar una nueva edición del Foro de Cooperación China-África (FOCAC) de cara a estrechar lazos entre el gigante asiático y el continente africano.
Decenas de mandatarios y delegaciones han visitado la capital china para este importante foro, que da muestra de la importancia que le da China a África.
En los últimos años, China ha invertido una cantidad importante de dinero en África y ha enviado miles de trabajadores e ingenieros al continente para construir grandes proyectos de infraestructuras, obteniendo a cambio un acceso privilegiado a los recursos naturales del continente, incluidos el cobre, el oro y el litio. Los préstamos estatales chinos han financiado también ferrocarriles, puertos o carreteras, infraestructuras muy importantes para África. Una situación que está reforzando al máximo la influencia china en el continente africano.
China, la segunda economía más grande del mundo, es el mayor socio comercial de África. El comercio bilateral alcanzó los 167.800 millones de dólares (151.800 millones de euros) en el primer semestre de 2024, según medios oficiales chinos, lo que da muestra de la importancia de esta relación bilateral.
Aval a Marruecos y rechazo al Frente Polisario y la RASD
Los países africanos han estado representados al más alto nivel en territorio chino, aunque han llamado la atención determinadas ausencias. El Frente Polisario y la autodenominada República Árabe Saharaui Democrática (RASD) no fueron invitadas a este importante evento internacional, como informaron diversos medios, lo que supone un aval importante a la integridad territorial de Marruecos y un ataque frontal a las tesis secesionistas en el Sáhara Occidental que plantean el Frente Polisario y la RASD, que están apoyados por Argelia, gran rival político del reino marroquí en el Magreb.
El rey de Marruecos, Mohamed VI, ha estado representado en este importante evento por el primer ministro marroquí, Aziz Akhannouch. También ha asistido el ministro de Asuntos Exteriores marroquí, Nasser Bourita, quien ha intensificado en los últimos años su agenda para reforzar los lazos diplomáticos entre el reino marroquí y la mayoría de los países del mundo y del continente africano en particular, recogiendo un respaldo claro a la integridad territorial del país norteafricano, que rechaza las tesis independentistas apoyadas por Argelia y que considera al Sáhara Occidental como una región incluida en el territorio marroquí.
Completaron la delegación marroquí en territorio chino el ministro delegado ante el primer ministro encargado de las Inversiones, la Ejecución y la Evaluación de las Políticas Públicas, Mohcine Jazouli, el embajador del Reino de Marruecos en Pekín, Abdelkader El Ansari, y el presidente de la Confederación General de Empresas Marroquíes (CGEM), Chakib Alj.
La reunión ministerial del Foro de Cooperación China-África brindó al ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Nasser Bourita, la oportunidad de debatir con muchos de sus homólogos y estudiar formas y medios de promover la paz, la estabilidad y el desarrollo en el continente africano a través de una cooperación Sur-Sur eficaz, así como a través de la cooperación tripartita con China en el marco del Foro de Cooperación China-África, de acuerdo con las instrucciones del rey Mohamed VI.
El Foro de Cooperación China-África supone una asociación relevante entre China y el continente africano, basada en los principios básicos de solidaridad, cooperación y respeto a la soberanía y la integridad territorial de países, lo que ha limitado la presión de Argelia que buscaba la asistencia del Frente Polisario y la RASD al evento. Diversos analistas identificaron este movimiento como un claro rechazo a las tesis secesionistas polisarias.
El rechazo de China a invitar a estas formaciones ha supuesto un nuevo revés para los esfuerzos argelinos y del Frente Polisario por difundir los postulados separatistas en cumbres de alto nivel.
En el Foro Indonesia-África, celebrado del 1 al 3 de septiembre de 2024 en Bali, tampoco aparecieron las formaciones independentistas apadrinadas por Argelia, y tampoco en la Cumbre Corea del Sur-África del mes de junio.
En estas importantes cumbres, orientadas a favorecer las relaciones comerciales y una política pacífica y de estabilidad, participaron todos los países africanos, pero la RASD y el Frente Polisario no tuvieron una invitación oficial, como en otras con presencia de importantes países como Estados Unidos o Rusia.
La negativa a incluir al Frente Polisario en el Foro de Cooperación China-África ataca las tesis secesionistas y el rechazo chino perpetúa el fracaso de los esfuerzos de Argelia y del Frente Polisario por defender sus postulados independentistas en cumbres de alto nivel.
China rechazó la presencia del Frente Polisario en este importante foro entre China y África, al igual que ocurrió en el Foro Indonesia-África, a pesar de los intentos de Argelia de imponerlo a través de presiones diplomáticas.
Según recordaban diversos medios, como Al- Arab, Argelia había previsto los preparativos de la celebración de la cumbre a través de sus contactos con el gigante asiático y su ministro de Asuntos Exteriores, Ahmed Attaf, recibió el 22 de agosto al embajador chino en Argelia. Un comunicado oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores argelino indicó que la reunión “se enmarca en el marco de preparación para la participación de Argelia en los trabajos de la cumbre del Foro de Cooperación África-China”. Sin embargo, los esfuerzos de Argelia para persuadir a la parte china de incluir al Frente Polisario en esta reunión fracasaron, después de que China limitó la lista de participantes a los Estados miembros de Naciones Unidas.
China ha rechazado anteriormente todos los intentos de Argelia y Sudáfrica, otro baluarte en el apoyo al Frente Polisario y la RASD, de invitar a estas formaciones independentistas a eventos celebrados en China o en países africanos, lo que podría reflejar la posición china en apoyo de la integridad territorial de Marruecos y su respeto por las resoluciones internacionales pertinentes, y la política continua de Pekín hacia la cuestión del Sáhara Occidental, una política basada en el respeto a la legitimidad internacional y la no injerencia en los asuntos internos de los países, una postura que mantiene el gigante asiático en otras muchas cuestiones internacionales.
Hisham Moataded, académico y experto en asuntos estratégicos, confirmó al medio Al-Arab que el rechazo a la presencia del Frente Polisario en el Foro de Cooperación China-África y también en el Foro Indonesia-África, en el que participan los países de la Unión Africana, es una victoria para los esfuerzos de la diplomacia marroquí, resultado de los recientes cambios políticos en el continente africano y de los reconocimientos a Marruecos.
El crecimiento en los apoyos a la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental indica un cambio en las posiciones de muchos países hacia el Frente Polisario y la autodenominada RASD y que el reino marroquí debe aprovechar su mayor influencia dentro del continente para presionar en torno a la cuestión de la expulsión del Frente Polisario y la RASD de la agenda de las cumbres de la Unión Africana.
En vista del hecho de que el Frente Polisario y la RASD no tienen ningún estatus legal ante la ONU, con el añadido del reconocimiento del propio secretario general de las Naciones Unidas y del número cada vez mayor de países que reconsideran sus relaciones con el Frente Polisario y apoyan la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental, Hisham Moataded sugirió a Al-Arab que la situación se desarrollaría a favor de Marruecos, con una creciente presión dentro de la Unión Africana para reconsiderar la membresía de las organizaciones separatistas y aislarlas en el continente.
Por otro lado, la influencia de Marruecos es creciente en África. Sobre todo, a partir de propuestas como la Iniciativa Atlántica, muy apoyada por el rey Mohamed VI y que busca facilitar una salida al Atlántico a través de la fachada atlántica marroquí (incluida la del Sáhara Occidental) a diversas naciones africanas, sobre todo del Sahel, para favorecer su desarrollo económico y su tráfico comercial con una importante puerta hacia el océano Atlántico, que les daría un importante acceso a otros mercados de América y Europa. Algo que favorecería un desarrollo económico exponencial de la zona.
Gran respaldo internacional a la propuesta de Marruecos para el Sáhara Occidental
Más de 100 países han mostrado su apoyo a Marruecos en su propuesta para el Sáhara Occidental. El reino marroquí plantea una amplia autonomía para el territorio saharaui bajo soberanía marroquí con el objetivo de otorgar una amplia capacidad de decisión y gestión a las futuras autoridades saharauis y desarrollar socioeconómicamente al máximo la zona, dejando la política exterior y la defensa en manos del Estado marroquí.
Muchos países de gran relevancia en el escenario internacional, como Estados Unidos, Israel, Emiratos Árabes Unidos, Alemania, Francia o España, han reconocido la propuesta de Marruecos como la más seria, creíble y realista para solventar el diferendo saharaui, que dura ya más de 40 años tras la salida de España como potencia colonial en el territorio.
Mientras, la propuesta del Frente Polisario, respaldada por Argelia, defiende la celebración de un referéndum de independencia de la población saharaui, de muy difícil materialización por problemas como el de la conformación de un censo electoral, como han indicado diversos analistas, y que cuenta con un menor respaldo a nivel internacional.