El Foro Internacional de Parlamentarios renueva la defensa de la paz y la justicia

Organizado por el grupo parlamentario socialista marroquí y la red MENA-LATINA, el Foro Internacional de Parlamentarios jóvenes socialistas y socio demócratas reafirma en su 3ª edición del 2 al 4 de mayo en Marrakech, su defensa de la paz y la justicia y su compromiso con la causa palestina
  1. Nuevas visiones frente a las sucesivas crisis 
  2. Palestina: un compromiso más que una opción política 
  3. La diplomacia parlamentaria refuerza la cooperación Sur- Sur 
  4. Justicia medioambiental y migración 

En el marco de un contexto marcado por crisis sucesivas geopolíticas, económicas y medioambientales, además de los desafíos sanitarias, sociales y de seguridad posteriores al Covid-19, la tercera edición del Foro Internacional de Parlamentarios jóvenes socialistas y socio demócratas, organizado en Marrakech del 2 al 4 de mayo,  reafirma el compromiso de la familia política socialista y socio demócrata en el mundo con las causas que afectan la humanidad. 

El primer secretario de la Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP), Driss Lachgar, arrojó luz sobre las principales causa que preocupan la elite socialista en el mundo en la actualidad; renovando el empeño del partido socialista marroquí en la defensa de los derechos humanos, la igualdad y la justicia social.

Nuevas visiones frente a las sucesivas crisis 

Driss Lachgar instó a formular nuevas visiones que partan de la realidad actual, donde se entrelazan las crisis creando un estado de incertidumbre política y económica, y se multiplican las amenazas que acojan las aspiraciones colectivas de los socialistas del mundo.  

En este planeta repleta de retos complejos que requieren enfoques nuevos y fuerzas progresistas para poder enfrentar uno de los momentos más difíciles del siglo XXI, con guerras devastadoras que no sólo dejan destrucción, sino que a veces llegan a los límites del genocidio, como es el caso de Gaza.

Según Lachgar, debido a un modelo económico intrínsecamente codicioso que antepone el beneficio a la vida y el consumo a la sostenibilidad, los seres humanos seguimos esquilmando este planeta con su maravilloso ecosistema ideal para la vida. Por ello, nuestra libertad, nuestra capacidad de crear y construir comunidades solidarias es muy importante para un modelo democrático basado en el Estado de Derecho y en los principios de libertad, igualdad y solidaridad. 

“Frente al auge del autoritarismo, que aumenta su atractivo en medio de crisis de confianza e incertidumbre, nuestra responsabilidad es reafirmar con fuerza nuestro compromiso con los principios que constituyen la piedra angular de cualquier futuro humano, la libertad, la igualdad, la justicia y la solidaridad ante las disparidades globales, la crisis climática y los conflictos económicos y las desigualdades globales”, precisó el primer secretario del partido socialista.

“No es suficiente lanzar eslóganes de cambio, sino que es necesaria una acción colectiva audaz y organizada para construir un nuevo modelo económico basado en la justicia territorial e intergeneracional, regulando los monopolios y reforzando la soberanía económica”, agregó. 

Palestina: un compromiso más que una opción política 

Para el partido socialista marroquí, la defensa de los derechos humanos no es un eslogan político, sino un compromiso de principios que no puede selectivo. Con esta lógica, la USFP condena todas las violaciones que afectan los individuos o grupos por razón de su religión, color, origen o pertenencia cultural, en particular la escalada de actos de violencia, discriminación y odio que tienen como objetivo a minorías de referencia islámica en varios países a través de agresiones físicas y verbales, políticas discriminatorias y discursos que alimentan el racismo.

“Consideramos que cualquier planteamiento realista para establecer una paz justa y duradera en la región exige poner fin a la ocupación israelí de las tierras palestinas, detener la política de asentamientos y permitir al pueblo palestino hacer realidad todos sus derechos nacionales legítimos, especialmente su derecho a construir su propio Estado en su propio suelo”, puntualizó el primer secretario de la USFP. 

Defender la causa palestina no es una opción política pasajera, sino un compromiso derivado de nuestra creencia en la justicia de los derechos humanos. 

La USFP afirma su firme posición a favor del derecho del hermano pueblo palestino a establecer su Estado independiente con Jerusalén Este como capital, de acuerdo con la legitimidad internacional y las resoluciones de las Naciones Unidas; así como revindica el alto el fuego completo y la apertura inmediata del paso fronterizo de Gaza para garantizar la entrega de ayuda humanitaria a la población a fin de proteger a los ciudadanos y permitir al pueblo palestino en Gaza a reconstruir sus vidas y su sociedad.

La diplomacia parlamentaria refuerza la cooperación Sur- Sur 

De acuerdo con el discurso de apertura pronunciado por Driss Lachgar, el proyecto socialista no puede tener éxito sin una revisión profunda y radical del sistema de gobernanza mundial, una diplomacia parlamentaria responsable, una justicia transicional y el respeto incondicional de la soberanía y la integridad territorial de los Estados. 

Estas reformas no pueden limitarse a aceptar la adición de escaños para los países del Sur en las organizaciones de toma decisiones, concretamente en el Consejo de Seguridad de la ONU, sino en el reconocimiento de las injusticias históricas sufridas por estos países como consecuencia de la colonización, la explotación de recursos, la transferencia de industrias contaminantes y la imposición de modelos económicos destructivos que siguen dominando mediante acuerdos desiguales y el monopolio del conocimiento.

El restablecimiento de la soberanía cultural, científica, económica y política integral de las naciones del Sur es el requisito previo para construir un multilateralismo mundial democrático que garantice la cooperación frente a la dominación, la dignidad frente a la subyugación y el desarrollo frente a la dependencia. Es un llamamiento a la construcción de un nuevo orden mundial basado en la verdad, la justicia, la solidaridad y los derechos humanos. 

En esta línea, el presidente de la región de Marrakech Safí, Samir Goudar, subrayó que la diplomacia parlamentaria representa un canal esencial para fortalecer la cooperación Sur-Sur y construir alianzas estratégicas que defiendan los temas de la soberanía nacional y el derecho al desarrollo y permitan que la voz de nuestros países se escuche en los foros internacionales, no como un seguidor sino como un socio activo y responsable. 

“También la consideramos una herramienta vital para el diálogo entre el Norte y el Sur, especialmente entre los actores políticos y los jóvenes parlamentarios, en un marco de cooperación y respeto”, añadió Goudar.

Justicia medioambiental y migración 

Driss Lachgar esbozó las prioridades del proyecto socialista que residen en la justicia medioambiental integral y reconocimiento del medio ambiente como derecho humano, la igualdad integral y la inclusión social a través de políticas ambiciosas que lleven a las mujeres y a las minorías a vivir en democracia; resistiendo la desinformación, protegiendo las instituciones y a los activistas del movimiento socialista.

En este sentido, el cambio climático representa una amenaza mayor para la continuidad de la vida en la tierra; ya que sus repercusiones económicas, sociales y medioambientales están golpeando con fuerza a los países del Sur, que históricamente no han sido responsables de la contaminación industrial, pero que ahora están pagando las consecuencias.

“Creemos que la justicia climática exige reconsiderar los mecanismos del cambio internacional y prestar apoyo a los países en desarrollo para reforzar sus capacidades de adaptación a fin de poder llevar a cabo una transición energética justa”, enfatizó Driss Lachgar.

En cuanto al fenómeno migratorio, los representantes de la Unión Socialista de las Fuerzas Populares no sólo lo contemplan desde la perspectiva de la seguridad de los países de acogida, sino como un fenómeno social y humanitario que refleja un profundo desequilibrio en el sistema internacional de desarrollo.  

Por lo cual, la USFP hizo un llamamiento a tratar las cuestiones migratorias apoyando el derecho de los países de origen al desarrollo, respetando los derechos básicos de los migrantes y desmantelando las redes de tráfico de seres humanos y tarta de personas que explotan las tragedias sociales para sus intereses criminales.