La importancia del desarrollo de la industria de Defensa española
La Asociación de Empresas Contratistas con las Administraciones Públicas (AESMIDE) ha llevado a cabo en Madrid el evento “40 años al servicio de la industria de Defensa” para celebrar su 40º aniversario y analizar en profundidad la situación del sector de la Defensa en España y la cooperación público-privada en este ámbito.
A través de este encuentro organizado por AESMIDE, diversas autoridades y expertos sobre el asunto han analizado cómo ha evolucionado el sector empresarial en el entorno de la Defensa. Se abordaron temas como la interlocución y el asesoramiento junto con la colaboración público-privada en un sector tan importante como el de la Defensa.
En estos años, España ha invertido en mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y de las Fuerzas Armadas, modernizando y profesionalizando la Defensa.
La planificación tecnológica por parte del Ministerio de Defensa junto a las Fuerzas Armadas ha hecho posible que aquellas necesidades de antaño se hayan convertido en capacidades a través de la integración y la cooperación con la industria. El sector privado y las empresas ligadas a AESMIDE han contribuido a satisfacer esas necesidades con la máxima eficiencia y calidad, como se ha apuntado por parte de la entidad organizadora.
La evolución de AESMIDE ha ido en paralelo a la transformación de las Fuerzas Armadas y estas han sido el reflejo de la evolución de la sociedad, con una capacidad de adaptación a las necesidades por parte de las empresas.
Este suponía el 22º foro de AESMIDE en sus 40 años de existencia. Y llegaba justo en un momento de gran desarrollo de las Fuerzas Armadas de España, con más de 3.600 soldados desplegados en el exterior en 2024, cifra récord hasta ahora. Precisamente, AESMIDE y más de 70 empresas asociadas han sido clave en este proceso de desarrollo y modernización, aportando logística y equipamiento para los integrantes del Ejército español.
“La Defensa es imprescindible y las empresas cada vez aportan más inversión e innovación en Defensa”, señaló Gerardo Sánchez Revenga, presidente de AESMIDE.
Por su parte, María Amparo Valcarce García, secretaria de Estado de Defensa, manifestó que “la labor fundamental de AESMIDE genera sinergias y ayuda a dotar a las Fuerzas Armadas de las necesidades que precisan”.
Gerardo Sánchez Revenga señaló en su intervención también que es importante que Defensa conozca el tejido empresarial y que las empresas sepan igualmente las necesidades de las Fuerzas Armadas y del Ministerio de Defensa.
Por su parte, Amparo Valcarce señaló que la industria de Defensa debe ser “innovadora, sólida y competitiva”.
En cuanto a la situación geopolítica actual, la secretaria de Estado de Defensa indicó que España está comprometida con Ucrania y con la búsqueda de la paz en Oriente Medio. También recordó que España es un actor esencial para “contribuir a la estabilidad en el Sahel y el norte de África”.
La secretaria de Estado también añadió que la nueva Comisión Europea “refuerza su compromiso con la paz y seguridad en Europa y el mundo”.
En cuanto a la Estrategia Europea de la Industria de Defensa presentada en 2023, Amparo Valcarce reiteró el compromiso del Gobierno de España con el crecimiento gradual de la inversión en Defensa. El reto es alcanzar una inversión del 2 % del Producto Interior Bruto (PIB) en Defensa para el año 2029.
Amparo Valcarce también destacó el esfuerzo llevado a cabo ya que en 2023 el crecimiento del presupuesto para Defensa fue del 26 % y que para 2024 se espera una aportación de 15.000 millones de euros.
Según la secretaria de Estado de Defensa de España, todo esto dotará a las Fuerzas Armadas de las capacidades que necesita y permitirá aumentar la capacidad tecnológica española y europea; ya que cada vez se debe hablar más de industria de defensa española y europea. Amparo Valcarce indicó también que la industria y el sector tecnológico deben surtir al sector de la Defensa en cantidades necesarias y en los plazos adecuados con la innovación y la competitividad como ejes fundamentales.
La secretaria de Estado pidió también potenciar la industria nacional como beneficiaria de la inversión prevista en el sector: “Quiero pedirle a la industria capacidad para absorber con capacidades nacionales esta inversión en Defensa”. Insistió en la necesidad de ser competitivos, ya que la competitividad de las empresas “permitirá posicionarse con éxito”. Un escenario que llevará a crear empleo, retener talento y lograr un retorno fiscal beneficioso para las arcas del Estado.
“No podemos tener una Defensa fuerte sin una industria de Defensa fuerte”, sentenció Amparo Valcarce, quien habló del compromiso existente de invertir más de 43.000 millones de euros y crear más de 73.000 puestos de trabajo. Un objetivo importante para la industria y para el Ministerio de Defensa, con el reto de integrar nuevas tecnologías como la inteligencia artificial o la robótica.
Amparo Valcarce habló de una necesaria colaboración público-privada en nuevas tecnologías al servicio de las Fuerzas Armadas y del Ministerio de Defensa.
En su turno de intervención, Jordi García Brustenga, director general de Estrategia Industrial y de la Pyme del Ministerio de Industria de España, protagonizó la conferencia “Industria e Innovación”.
Jordi García Brustenga aludió a la importancia de la situación geopolítica actual que amenaza la seguridad internacional. “Entramos en una nueva época de crecimiento y desarrollo de oportunidades para el sector” debido a que la seguridad y la defensa aumentan su valor en tiempos de conflicto, con el aumento de recursos que supone esto, señaló García Brustenga, quien añadió que a los conflictos se han sumado otros contratiempos como la pandemia, las guerras comerciales a nivel global o los riesgos que amenazan a las cadenas de suministro. Eventualidades que conciencian a todos más sobre la producción nacional y la necesidad de acceso a productos críticos, incluidos los de Defensa.
Para el director general de Estrategia Industrial y de la Pyme, la cadena de valor que supone asegurar productos críticos en crisis mueve a dar importancia a desarrollar la industria de Defensa. “Un día se pueden cerrar fronteras y debemos tenerlo todo dentro”, explicó Jordi García Brustenga.
El representante del Ministerio de Industria aludió a que hay que aumentar la competitividad industrial, con una “ambición verde”, pero orientada a la competitividad de la industria, y destacó la importancia de la digitalización y del “producto hecho en España”. Aludió a la innovación industrial dentro de la nueva ley para la estrategia nacional de industria y a la autonomía estratégica con planes de tres años. García Brustenga también habló de la necesidad de desarrollar un plan industrial con más financiación.
El director general de Estrategia Industrial y de la Pyme aludió al concepto de Autonomía Estratégica, consistente en tener unas capacidades industriales de cara a generar productos críticos en momentos determinados. Para ello, habría que definir qué productos son necesarios y cuáles son las capacidades industriales. Según el Ministerio de Industria, España no produce o exporta más que importa 60 de todos los catalogados como productos estratégicos. Habría que ver quién producir esto en España para tiempos de crisis o incluso de no crisis, ver quién puede producir y quién tiene talento para ello en el territorio nacional.
Posteriormente, llegó la mesa de debate titulada “Economía de la Defensa”, con la intervención de Bruno Pérez Vázquez, redactor de Economía de ABC, como moderador, Antonio Fonfría Mesa, profesor de Economía Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid, el general de División José Luis Sánchez Martínez, director general de Asuntos Económicos del Ministerio de Defensa, Javier Torres Seco de Herrera, director del Área de Defensa e Interior de INETUM, y Lorenzo Pardo, director financiero de Oracle.
Antonio Fonfría manifestó que el “tamaño de la industria de Defensa española es pequeña respecto a otros países europeos y tiene potencial de crecimiento”. También explicó que la base para crecer a nivel macro e industrial es la capacidad innovadora porque da capacidad para la competitividad.
Según el profesor de Economía Aplicada de la Universidad Complutense es necesario “buscar más productividad”.
El general de División José Luis Sánchez Martínez indicó que actualmente estamos en el 1,17 % del PIB para Defensa en España, ante el 2 % que se espera para 2029.
El director general de Asuntos Económicos del Ministerio de Defensa explicó que la financiación depende del estado económico nacional y que ahora no se puede tocar el presupuesto. También explicó que anteriormente se había regulado para no gastar y ahora habría que regular de una manera más ágil para poder gastar más teniendo el objetivo de que la industria crezca.
Sánchez Martínez explicó que la industria de Defensa y la Administración deben hacer su tarea bien para poder ser competitivos.
Por su parte, Javier Torres Seco de Herrera señaló que las empresas quieren certidumbre porque les “ayuda mucho”. “Si tenemos presupuestos que garanticen inversiones en 4 o 6 años, la base industrial permitirá a grandes corporaciones y al resto de tejido empresarial hacer planes”, señaló el director del Área de Defensa e Interior de INETUM. “Para ser competitivos hay que tener algo que ofrecer y hacerlo en el país”, explicó.
Lorenzo Pardo habló en su turno de los principales objetivos que tiene la empresa privada, que son adaptarse y orientarse. Para el director financiero de Oracle, la empresa intenta adaptarse ya que los flujos de inversión no son fácilmente predecibles en Defensa.
En la mesa de debate se aludió también a la importancia del concepto de Autonomía Estratégica. Europa debe apostar por la seguridad y la defensa, mejorando la competitividad. Se destacó el dato de que Europa es el segundo mayor inversor del mundo en Defensa y que el 63 % de esa inversión se queda en Estados Unidos y muy poco es para los proveedores europeos.
Antonio Fonfría destacó la dependencia histórica de Estados Unidos en materia de seguridad y explicó que es difícil salir de esa dependencia.
“Hay fragmentación en la UE”, señaló el profesor de la Universidad Complutense de Madrid, quien pidió más confianza y cooperación entre países europeos.
Por su parte, el almirante Aniceto Rosique Nieto, director general de Armamento y Material del Ministerio de Defensa, fue el encargado de dar la conferencia “Necesidades vs Capacidades”
Aniceto Rosique explicó la nueva organización existente en Defensa, que permite una nueva distribución de tareas. El director general de Armamento y Material del Ministerio de Defensa aludió a la reducción de la burocracia y a la necesidad de favorecer la cooperación entre ministerios y centros universitarios y de investigación.
Aniceto Rosique habló de la necesidad de tener una cultura de Defensa y una cultura industrial de la Defensa y abordó la estrategia industrial de defensa española, integrada con la europea, con la OTAN y con Estados Unidos.
Seguidamente, la mesa de debate titulada “Respuesta de la Industria” fue protagonizada por Miguel Ángel de la Cruz, presidente de la Asociación de Periodistas Especializados en Defensa, como moderador, Alberto Fabra Prat, presidente de la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados, el capitán de navío Manuel Ángel Bouza, representante del SDG PLATIN del Ministerio de Defensa, Juan Antonio Tébar Chumillas, director de Políticas de Innovación del Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI), Carlos Calvo González-Regueral, director de Estrategias y Desarrollo de Negocios de GAHN, y Jesús Abraham Fernández, responsable de Innovación y Desarrollo de Negocio para Defensa de Telefónica.
Alberto Fabra desgranó los objetivos de la Comisión de Defensa del Congreso, que son difundir la cultura de Defensa, mejorar las condiciones de vida y retribuciones de los miembros de las Fuerzas Armadas españolas y ayudar al sector.
El presidente de la Comisión de Defensa del Congreso indicó que la Comisión sirve para hacer preguntas al Ministerio y debatir mociones, pero que también está para ofrecerse al sector de la Defensa. “Queremos ayudar y generar diplomacia parlamentaria para poner en valor lo que se hace todos los días de cara al exterior”, señaló Alberto Fabra.
Por su parte, Manuel Ángel Bouza recordó que la Estrategia Industrial de España vio la luz en 2023, aludiendo a los conceptos de Autonomía Estratégica y de Europa de la Defensa y a la consolidación de la base tecnológica de la Defensa española.
Mientras, Juan Antonio Tébar Chumillas indicó que el CDTI ve a Defensa como “el final de la cadena en la que queremos ser eje de transmisión de las empresas”. También, manifestó que la financiación es necesaria en este ámbito.
Mientras, Carlos Calvo González-Regueral indicó que ahora se pide a la industria más “agilidad e inmediatez” porque en el campo de batalla no pueden esperar a recibir determinadas cosas. El representante de GAHN resaltó la necesidad de una mayor capacidad de producción, siendo “más estrictos en plazos, costes y requisitos”.
“Debemos desarrollar tecnología e incorporarla con rapidez”, indicó Carlos Calvo, quien señaló que los adversarios introducen la tecnología de manera más inmediata en los sistemas de combate.
Finalmente, Jesús Abraham Fernández reseñó la importancia de la base tecnológica e industrial de la Defensa y de la considerada “Nueva Defensa” porque hay que ser “ágiles” para el nuevo cambio que se está dando.