El PPE mantiene su poder en Europa a pesar del auge de la extrema derecha
El centroderecha, representado por el Partido Popular Europeo (PPE), seguirá siguiendo la principal fuerza política de la Unión Europea, con 8 escaños más que en las últimas elecciones celebradas en 2019. En segundo lugar se encuentran los socialistas europeos, que a nivel general no han experimentado grandes cambios, seguidos por el grupo Renew y los Verdes, unos de los principales perdedores de la jornada electoral europea.
El partido centristra proeuropeo Renew perdió 23 asientos tras el batacazo del partido de Emmanuel Macron en Francia, mientras que la bancada de los Verdes disminuye 20 escaños. Estas derrotas se contraponen con las victorias de las dos fuerzas de extrema derecha europea, el Partido de los Conservadores y Reformistas Europeos y Partido Identidad y Democracia -euroescépticos-, que consiguieron 4 y 9 escaños más respectivamente.
En medio de este auge de la ultraderecha, la presidenta de la Comisión Europea y candidata del Partido Popular Europeo, Ursula von der Leyen, ha afirmado que la victoria de su formación representa una “responsabilidad” para trabajar en una mayoría de fuerzas proeuropeas en el Parlamento Europeo que apoye un segundo mandato.
“Hay una mayoría de centro para una Europa más fuerte, esto es crucial para la estabilidad. El centro aguanta, pero es cierto que los extremos en la izquierda y la derecha han logrado apoyos. Por eso este resultado significa una gran responsabilidad para partidos de centro”, declaró Von der Leyen.
En estos últimos años, marcados por la pandemia del coronavirus y sus consecuencias, el cambio climático y la guerra en Ucrania, las fuerzas de ultraderecha se han consolidado en varios países como Francia y Austria, donde han transformado por completo el mapa político.
El ultraderechista Partido de la Libertad (FPO) es el vencedor de las elecciones europeas en Austria, una victoria sin precedentes para esta formación, que ha logrado imponerse al Partido Popular (OVP) gracias a un discurso populista y euroescéptico.
Macron convoca elecciones legislativas tras su derrota
En Francia, Marine Le Pen ha sido una de las principales ganadoras del continente. Su partido logró más del 31% de los votos, consiguiendo el mejor resultado en la historia de la formación Agrupación Nacional (RN).
Ante este resultado, el presidente Macron anunció elecciones legislativas que se celebrarán el proximo 30 de junio y 7 de julio. “No podría seguir, al término de esta jornada, mirando hacia otro lado. A esta situación se añade además la fiebre que ha contagiado el debate público y parlamentario en nuestro país”, señaló desde el Elíseo Macron, quien logró la mitad de apoyos que Le Pen.
En Alemania también se ha experimentado un importante auge de la ultraderecha, representada por Alternativa por Alemania (AfD). Esta formación ha logrado la segunda posición tras el bloque conservador. En tercer lugar ha quedado el Partido Socialdemócrata (SPD) del canciller, Olaf Scholz, que ha obtenido un 13,9% de los votos.
En Italia, uno de los países con más peso en la UE, la primera ministra Giorgia Meloni consolidó su poder tras obtener más del 28% de los votos en las elecciones europeas.
Mientras que en el resto de países como España, Bélgica o Grecia también se ha impuesto la derecha, tan solo en las naciones nórdicas han ganado formaciones de izquierda. También en Portugal los socialistas han superado a los conservadores de la Alianza Democrática por una escasa ventaja.
Desacuerdos dentro de la extrema derecha
No obstante, cabe destacar que las formaciones de extrema derecha europeas no son homogéneas, sino que existen diferencias ideológicas entre los partidos de cada país. Muchas de estas disparidades están relacionados con temas clave como la Union Europea, la guerra en Ucrania o incluso con la visión sobre el pasado nazi en Alemania.
En este sentido, recientemente la francesa Marine Le Pen rompió con sus hasta entonces aliados alemanes de AfD después de que Maximilian Krah, el candidato de la formación a las elecciones europeas, admitiese en el diario italiano La Repubblica que nunca diría “que quien llevaba un uniforme de las SS era directamente un criminal”.
Ante estos polémicos comentarios, el presidente del partido francés, Jordan Bardella, que lideró la lista de RN en las elecciones, decidió “no sentarse más” con los diputados de Alternativa para Alemania en Parlamento Europeo. La Liga, el partido del viceprimer ministro de Italia Matteo Salvini, también se sumó a esta decisión.