Turquía enseña al mundo en su salón IDEF las joyas de su industria militar
Estambul acoge hasta el 28 de julio la 16ª edición de su Feria Internacional de la Industria de Defensa, IDEF 2023.
La capital económica de Turquía y la ciudad más poblada del país con más de 15 millones de habitantes congrega en el Centro de Exposiciones y Congresos Tuyap a 1.461 empresas de defensa, de las que 772 son de más de 50 países y 689 son compañías turcas, estas ultimas unas grandes desconocidas para los europeos.
El decimosexto salón IDEF está organizado por la Fundación de las Fuerzas Armadas Turcas, cuenta con el apoyo del Ministerio de Defensa Nacional y los auspicios de la Presidencia de la República. Sin embargo, a diferencia de ediciones anteriores y por vez primera durante su mandato, el presidente Recep Tayyip Erdogan no ha asistido de forma presencial a la ceremonia de inauguración celebrada el martes, 25 de julio.
Su representación la ejerció el vicepresidente, Cevdet Yilmaz, acompañado por los titulares de las carteras de Defensa e Industria y Tecnología, el general Yasar Güler y Mehmet Fatih Kacier, respectivamente, junto con el presidente de la Agencia de la Industria de Defensa, Haluk Görgün.
A pesar de su ausencia, Erdogan envió un claro mensaje por teleconferencia. Tras citar que Turquía se enfrenta a “diferentes obstáculos y embargos ocultos y abiertos”, precisó que otorga una “gran importancia al desarrollo de la industria de defensa”, que su Ministerio de Defensa tiene “en marcha 850 proyectos de armamento” y que aspira a que “todas las necesidades de plataformas terrestres, aeroespaciales y marítimas de sus Fuerzas Armadas puedan ser cubiertas por el ecosistema industrial nacional”.
Un caza furtivo turco de 5ª generación está en desarrollo
Erdogan es consciente de que dotarse de una importante industria de defensa es un componente inseparable de la seguridad nacional. Por ello, las instrucciones que ha dado a su nuevo ministro de Defensa, el general Yasar Güler ‒antiguo jefe del Estado Mayor de la Defensa y en el cargo desde mediados de julio‒ son proporcionar a las Fuerzas Armadas sistemas, equipos y municiones “de producción nacional y de última generación, para incrementar su capacidad de disuasión y mejorar su eficacia en entornos de combate actuales y futuros”.
Según el nuevo ministro, aunque numerosos productos militares turcos se han exportado a 170 países, su pretensión es “aumentar la competitividad de Turquía en el mercado mundial. Es por ello por lo que una de las líneas de acción pasa por “compartir las tecnologías y experiencias con países amigos y aliados”.
A IDEF’23 han acudido delegaciones oficiales de más de 80 naciones, entre ellas las encabezadas por los ministros de Defensa de Senegal, Kenia y Gabón, Sidika Kaba, Aden Bare Duale y Felicité Ongouori Ngoubili, respectivamente. Esta última ministra también acudió al salón FEINDEF de Madrid a mediados del pasado mes de mayo y mantuvo una reunión con la ministra española del ramo, Margarita Robles.
El titular de Defensa de Tayikistán, general Sherali Mirzo, aprovechó su estancia en IDEF para firmar un acuerdo de cooperación militar con su homónimo turco. Y el ministro de Defensa de Azerbaiyán, general Zakir Hasanov, también presente en Estambul, ha dicho estar interesado “en muchos sistemas de armas de fabricación turca, pero no revelaré sus nombres por razones de confidencialidad”. No obstante, firmó un acuerdo con la compañía Turkish Aerospace Industries (TAI) para modernizar sus anticuados aviones de combate Su-25 de ataque a tierra.
TAI es la principal industria aeroespacial de Turquía. Fabrica aviones y helicópteros de combate, satélites y drones. Uno de sus productos estrella es el futuro caza nacional de 5ª generación que bajo la codificación de TF-X Kaan está en proceso de desarrollo. Pero los altos mandos de la aviación militar turca no pueden esperar a que el Kaan entre en servicio. El nuevo caza está en pruebas y vuela con un par de motores F110 de General Electric y no lo hará con motores de producción nacional hasta 2028, ha confirmado en IDEF’23 el director general de TAI, Temel Kotil.
El portaaeronaves Anadolu, el hermano turco del Juan Carlos I
Con las citadas perspectivas, el jefe de la Fuerza Aérea, el general Atilla Gülan, ha decidido modernizar su veterana flota de más de 200 aviones de combate F-16 de origen norteamericano, pero fabricados hace décadas en el país euroasiático. Con ello pretende aumentar su tiempo de vuelo de 8.000 a 12.000 horas.
Como subcontratistas de TAI, las compañías turcas de sistemas electrónicos y misiles, Aselsan y Roketsan, respectivamente, instalarán en los F-16 nuevos sistemas electroópticos, comunicaciones y radares activos de barrido electrónico de diseño y fabricación nacional, así como misiles aire-aire Gokdogan y Bozdogan, de crucero Gezgin y Cakir y antibuque Atmaca.
La industria turca también goza de prestigio por su avanzada tecnología en la fabricación de vehículos aéreos no tripulados, tanto armados como no armados. Entre estos últimos están los drones de combate TB2 y Akinci de la firma Baykar, que se han hecho famosos en la guerra en Ucrania.
El país euroasiático es una de las diez naciones con capacidad para construir sus propios patrulleros, corbetas, fragatas, y grandes buques de guerra hasta submarinos, asegura el Ministerio de Defensa turco. Ejemplo de ello es el Anadolu ‒en español, Anatolia‒, que se basa del buque anfibio portaaeronaves Juan Carlos I de la Armada diseñado y construido por Navantia, la única empresa española presente en IDEF’23.
El Anadolu ‒codificado L400‒ es un portaaeronaves de 232 metros de eslora y 27.500 toneladas de desplazamiento que se ha hecho realidad para garantizar que Turquía tenga una Armada “más poderosa y disuasoria”, resalta el presidente Erdogan. Construido en el astillero Sedef de Estambul, su recepción por la Marina de Guerra tuvo lugar el pasado 10 de abril. En el contrato firmado el 30 de julio de 2015 Navantia se comprometió a transferir a Sedef su tecnología, a fabricar el sistema de propulsión y de control de la plataforma y a aportar la asistencia técnica.