Zelensky recupera la popularidad y el apoyo de los ucranianos

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski - PHOTO/LEON NEAL vía REUTERS
La periodista y corresponsal María Senovilla habló en los micrófonos del programa “De cara al mundo” en Onda Madrid sobre la actualidad en el frente de combate

La reportera y periodista María Senovilla, colaboradora de Atalayar, analizó en el programa “De cara al mundo” de Onda Madrid la visita a Kiev del exconsejero de Seguridad Nacional del vicepresidente de los Estados Unidos, Keith Kellogg, al presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, tras las duras declaraciones de Donald Trump.

Además, consideró las opiniones de los soldados en el frente de combate ante la posibilidad de que tropas europeas apoyen a las fuerzas ucranianas; y la dura situación que se vive en el Frente ante la continua presencia de drones Shahed.

¿Zelensky está rebajando un poco el tono con Trump en las últimas horas? Incluso convocó una cumbre internacional en Kiev.

Zelensky está rebajando un poco el tono, pero porque el enviado especial para los asuntos de Ucrania y Rusia, el teniente general ya retirado, Keith Kellogg, también ha rebajado el tono cuando llegó ayer a la capital ucraniana para mantener un encuentro con Zelensky. Un encuentro del que no hizo partícipe a la prensa porque, a última hora y por deseo expreso de la parte norteamericana, se suspendió la rueda de prensa que había convocada. 

Se limitaron a tener una reunión a puerta cerrada y parece, por las declaraciones que hizo Zelensky a su término, que fue en unos términos un poco más suaves de los que se habían estado utilizando días atrás. De hecho, se ha dicho que Ucrania está abierta a negociar con Estados Unidos en materia de seguridad e inversiones, pero después de ese primer intento de acuerdo que hubo para explotar por parte de Estados Unidos los minerales de Ucrania, en los que se exigía el 50 % a cambio de nada, va a ser bastante difícil que realmente se lleguen a unos acuerdos convenientes para ambas partes. 

Se ha rebajado el tono. Ambos equipos, tanto el de Estados Unidos como el de Ucrania, saben que no pueden quemar los puentes que se están tendiendo en este momento en el que los esfuerzos están encaminados a poner un punto final o, al menos, un alto el fuego a esta guerra que está a punto de cumplir tres años. De todas formas, los días de atrás, se dieron esas declaraciones incendiarias de Donald Trump, en las que, no solo llamó dictador a Zelensky, sino que además acusó a Ucrania de empezar esta guerra, como si hace tres años el resto del mundo no hubiera visto en directo cómo Rusia invadía con sus columnas de carros de combate este país. Son órdagos difíciles de asimilar y la tensión es cada vez mayor.

Para mi sorpresa, la respuesta del pueblo ucraniano a esos ataques de Donald Trump, a esa subida de tensión, ha sido unirse alrededor de Zelensky, quien se ha reeditado en el espíritu de aquellas primeras semanas de febrero y marzo de 2022, cuando todo el pueblo se aunó y decidieron que iban a resistir, que no querían dejar de existir como nación y que iban a luchar con lo que tuvieran, que, en aquel momento, no tenían nada. Se ha reeditado un poco otra vez ese espíritu.

Combinación de imágenes del presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, Elon Musk y de Donald Trump - PHOTO/ARCHIVO

¿Cuál había sido la reacción de la gente?  

Ha sido diversa dependiendo de si estás en las ciudades o si estás en el frente de combate. En el caso del frente, los soldados se han envalentonado, que ahora sí que no se van a rendir, que, si no se rindieron en esas primeras semanas, que no tenían nada, ahora que Ucrania produce el 40 % del armamento que se consume en el frente de combate y que tiene tres años de una experiencia intensísima en combate, no se van a poner de rodillas. 

En cambio, en las ciudades, las redes sociales y los memes son un instrumento de comunicación política que se maneja más que los periódicos en este país. Y todos esos mensajes que se vertían en redes sociales, que se publicaban, estaban al unísono con Zelensky. Decían algunos que la popularidad de Zelensky a lo largo de estos tres años de guerra, como es lógico, ha ido cayendo, porque son tres años de muerte, de destrucción, de bombardeo, de dolor. Eso no lo aguanta ningún líder. Ahora ha subido de golpe. En redes sociales los mensajes que se vertían mandaban mensajes, del tipo que ya insultarían ellos mismos a su presidente cuando acabara la guerra, pero que ahora mismo lo iban a defender ante las agresiones externas. 

Ha sido una reacción muy rápida, muy al unísono, que a mí me ha sorprendido, y que recuerda a esos primeros compases de la invasión, cuando todo el pueblo ucraniano se unió. 

El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, lideran las primeras negociaciones para poner fin a la guerra en Ucrania - REUTERS/ EVELYN HOCKSTEIN

Ante lo que puede ser una crisis con Estados Unidos, ¿cómo has podido pulsar la opción de que se desplieguen soldados europeos en Ucrania?  

Mientras el resto lanza mensajes a nivel internacional y se organizan cumbres, aquí en el frente de combate, sobre todo en este del Donbás, la guerra no para. Sigue 24 horas al día, de día y de noche, y está siendo además de una agresividad más alta de lo normal porque la ofensiva rusa se ha intensificado. 

Cuando les preguntaba a los soldados que podía existir la posibilidad de que vinieran soldados europeos a ayudarles, te miraban con cierto escepticismo y te decían que, si no habían venido en estos tres años, que ya no se les esperaba. Y la frase era, “solo podemos confiar en nosotros mismos”.

Un zapador de la 24.ª Brigada Mecanizada Independiente Rey Danylo de las Fuerzas Armadas de Ucrania, en la ciudad de Chasiv Yar, Ucrania, el 10 de enero de 2025 - PHOTO/ Oleg Petrasiuk/Servicio de Prensa de la 24.ª Brigada Mecanizada Independiente Rey Danylo de las Fuerzas Armadas de Ucrania

Hablabas de esos ataques, de esa actividad en el frente de los bombardeos en las últimas horas, se han intensificado bastante, ¿no?  

Se han intensificado, no sólo contra ciudades, Odessa y Kiev han sido atacadas varias veces a lo largo de esta semana, además con grandes destrozos, también Jersón. Hoy hemos amanecido a 19 grados bajo cero y en Odessa estaban sin calefacción por los bombardeos rusos. Pero es que en esta parte del Frente del Dombás, donde me encuentro yo, no han parado ni un solo día, ni de día ni de noche. 

Nos están atacando ahora con esas bombas FAB y nos están atacando también con aviones, porque esas bombas las lanzan desde aviones, y con drones tipo Shahed, que antes de Navidad aquí no se veían, se lanzaban básicamente en las ciudades y ahora también en las ciudades de la retaguardia del frente de combate. Los estamos escuchando cada noche zumbar a nuestro alrededor y estamos escuchando a la defensa antiaérea intentando neutralizarlos. Y esto no va a menos, cada día que pasa se nota esa ofensiva rusa con más fuerza. 

Están poniendo todo lo que tienen. Me decían en el frente de combate, he estado en la parte de Torez cubriendo estos días de atrás, que están tirando con todo lo que tienen, además de una forma casi desordenada, porque antes se lanzaba un ataque de artillería cuando iba a haber un intento de avanzadilla por parte de la infantería, como si se tratara de una guerra clásica ordenada. 

Ahora mismo, lanzan todo lo que tienen, drones de ataque, artillerías, bombas aéreas, sin que haya detrás un intento de avance de la infantería. Es decir, están intentando ablandar lo que pillen para luego no sé si avanzar o simplemente dejar destruido todo a su paso y terminar así la toma del Dombás.