Atalayar entrevista al jefe de la Artillería de una de las nuevas brigadas regulares que están llevando el peso de la contraofensiva ucraniana en estos momentos

Coronel Roman Kuzholni: “Las tropas rusas ya están tratando de huir en algunos lugares”

PHOTO/MARÍA SENOVILLA - El coronel Roman Kuzholni, segundo oficial al mando de la 23 Brigada Separada del Ejército de Ucrania

Es el segundo oficial al mando de la 23 Brigada Separada del Ejército de Ucrania, una de las nuevas unidades que ha constituido Zelensky para llevar a cabo la contraofensiva. Bajo sus órdenes disparan los modernos cañones que han enviado los países aliados a esta guerra, y también trabajan los drones que se han convertido en “los ojos de los artilleros”. 

Cuando se alistó en el Ejército –con 16 años– nunca imaginó que el presidente de su país pondría en sus manos la tarea de crear un Grupo Táctico de Artillería, desde cero y en mitad de una guerra contra Rusia. Pero asegura que “lo han hecho bien” y que las tropas rusas “están empezando a huir en algunos lugares del frente sur” ante su avance. 

Lo más duro para él fue dejar la 92 Brigada de Lugansk, donde sirvió durante los últimos 22 años de su vida. Pero al igual que el resto de los ucranianos, el coronel Roman Kuzholni está “peleando por su país” y esa motivación puede leerse su mirada. Una mirada más ajada de lo que corresponde a su edad –aparenta diez años más de los que tiene–, y es que el desgaste de la guerra no deja indiferente al que la vive.

Nos recibe cerca de Dnipro, y nos habla del reto de crear un nuevo cuerpo militar en plena contienda, de las lecciones aprendidas en tiempos de guerra y de las razones que mueven a los ucranianos a lanzarse al campo de batalla, incluso cuando muchos de ellos no tienen experiencia militar.

PHOTO/MARÍA SENOVILLA - El coronel Kuzholni durante un momento de la entrevista con Atalayar

¿Cómo se construye una nueva brigada para un ejército, desde cero y en mitad de una guerra contra Rusia? 

No es lo mismo formar batallones en tiempos de paz, que en plena guerra. Yo sabía que iba a haber muchas dificultades, pero lo hemos hecho bien. Había muchos civiles sin experiencia militar previa a la invasión a gran escala, y fue lo primero que tuve en cuenta. También las experiencias aprendidas en los últimos meses, en los que hemos visto la importancia de los drones para esta guerra; por eso pensé en integrarlos dentro el Grupo Táctico de Artillería desde el principio. De hecho, una de las primeras personas con las que hablé fue con el actual comandante de nuestro grupo de drones, con el que llevo trabajando en esta integración desde enero

¿Cuál ha sido la mayor dificultad?

Lo más complicado ha sido dotarla con la inteligencia aérea necesaria y con los rangos intermedios bien instruidos, porque, como te decía, muchos de ellos tienen poca experiencia militar. Es algo cambiante, muy nuevo, hemos tenido que cohesionar a los efectivos con más experiencia con otros muchos que no tenían ninguna experiencia militar, que se han alistado hace poco y tenían trayectorias muy diversas antes de la invasión. Además, hemos tenido que entrenar a contrarreloj.

PHOTO/MARÍA SENOVILLA - Insignia del Grupo Táctico de Artillería de la 23 Brigada Separada

Y viendo ahora el resultado, cuáles diría que son las fortalezas de la nueva 23 Brigada Separada, ¿en qué destaca respecto a las demás?

Lo más determinante de esta Brigada es precisamente la artillería: un sólo tiro de artillería puede decidir una batalla y ponerle punto y final, como ya sucedió en Járkiv. Ahora también son muy importantes los drones, insisto: los drones se han convertido en nuestros ojos, y la artillería es el brazo ejecutor. Además, es un brazo flexible, y se puede adaptar a cada misión desplegando más o menos cañones. Un grupo táctico de artillería está formado normalmente por 1.000 efectivos, aunque tampoco te puedo dar la cifra exacta de éste, porque es un dato que no se hace público en tiempos de guerra.

Dice que han tenido en cuenta la experiencia de los últimos meses para conformar las nuevas brigadas, pero ¿qué se ha tenido en cuenta exactamente?

En realidad la guerra se está teniendo en cuenta desde 2014, cuando se vio que era necesario reestructurar el Ejército ucraniano entero. Los rusos no han hecho los deberes, y por eso están como están. Desde 2022 se ha tenido en cuenta también el papel de los drones dentro del Ejército y se ha trabajado para integrarlos. Se han tenido en cuenta las necesidades actuales en el desempeño militar. 

PHOTO/MARÍA SENOVILLA - El coronel Kuzholni junto al comandante Georgiy Volkov, al mando del Grupo de Drones de la 23 Brigada Separada

A nivel estratégico y militar, ¿qué es lo que más le preocupa en este momento de la contraofensiva?

No tengo permitido preocuparme. Actualmente la 23 Brigada Separada está luchando en la primera línea, en el frente sur de Ucrania, y tiene un papel importante en la desocupación de nuestro territorio. Estamos viendo que los rusos están tratando de protegerse con minas terrestres y minas antitanque, pero una vez que atravesamos esos campos de minas, algunos ya empiezan a huir en algunos lugares. Los que se quedan a combatir es porque tienen una gran cantidad de misiles antitanque y sus helicópteros aún pueden atacarnos. Pero nosotros luchamos por cada metro de terreno todos los días.

¿Les han dotado con armamento de nueva generación, del que han enviado los países aliados en los últimos paquetes de ayuda?

Sí, tenemos armamento americano y también de otros países. 

¿Cuentan con personal formado también por los ejércitos de los distintos países aliados?

También. Tenemos a 36 efectivos entrenados por el Ejército de Estados Unidos en Alemania, y seis de ellos son mandos, algo importante porque ellos ahora pueden seguir transmitiendo los conocimientos a sus subordinados. La diferencia entre su instrucción y la que tenían aquí es muy grande, y es muy enriquecedor para el batallón incorporarlos a nuestras filas.

Todo el personal que ha recibido formación fuera aporta mucho cuando vuelve a nuestras filas. También hay militares entrenados en Inglaterra y en España. 

PHOTO/MARÍA SENOVILLA - El coronel Kuzholni, quien asegura que todos los ucranianos están peleando por su país y por eso sobra motivación

¿En qué especialidad se han formado los de España?

Los efectivos de la 23 Brigada Separada que han ido a España han sido adiestrados para la especialidad sanitaria, aunque no tengo muchos detalles porque no están en el grupo de Artillería que está bajo mi mando directo. 

Hemos asistido a una guerra de posiciones que ha durado varios meses –con un desgaste muy grande y muchas bajas–, y de momento la contraofensiva va despacio, ¿cómo se mantiene alta la moral de la tropa después de estos 16 meses de lucha?

Eso no es complicado, porque muchos soldados estuvieron luchando en la contraofensiva de Járkiv, y eso les insufló una moral muy alta que aún permanece y que se contagia a sus compañeros. Además, todos están peleando por su país... sobra motivación.

¿Cómo se enteró de que iba a comandar el Grupo Táctico de Artillería de una de las nuevas brigadas ucranianas?

Era un día normal de la guerra, no sucedió nada especialmente relevante. Pero yo tuve que afrontar algo muy difícil: abandonar la Brigada 92, donde llevaba más de 20 años sirviendo a Ucrania. No fue fácil.

Recibí una llamada del jefe de Artillería de las Fuerzas Armadas, dando por hecho que iba a aceptar. Fue una orden, vamos [apostilla riendo]. Después me enviaron un montón de papeles para firmar, y ya era oficial.