Tánger instalará más de 500 cámaras de vigilancia en la ciudad
Las autoridades de Tánger, en colaboración con el Ministerio del Interior, la Agencia para la Promoción y el Desarrollo de las Provincias del Norte (APDN) y el Consejo de la Región Tánger-Tetuán-Alhucemas, han decidido destinar 56 millones de dirhams a ampliar la red de sistemas de cámaras de vigilancia en el espacio público de la ciudad.
Este proyecto, el mayor de su tipo en la región, tiene como objetivo fortalecer el sistema de vigilancia y control en las calles y espacios públicos de la localidad.
Las aportaciones de este proyecto se distribuyen de la siguiente manera: 28 MDH de la Dirección General de Autoridades Locales, 14 MDH del Consejo de la Región Tánger-Tetuán-Alhucemas y 14 MDH del municipio urbano de Tánger.
Se instalarán 533 cámaras de alta calidad, así como red de fibra óptica, electricidad e infraestructura necesaria en unos 20 kilómetros, abarcando 111 puntos estratégicos de seguimiento.
Según fuentes consultadas por Le360, la instalación de las cámaras se realizará en varias etapas, y se prevé que finalice en 2027.
Estas cámaras, que se encontrarán en varios puntos entre los distritos de Beni Makada, Malabata e incluso la medina, estarán conectadas a una sala de control centralizada ubicada en la sede de la jefatura de policía de Tánger. Esta sala estará equipada con las últimas tecnologías para garantizar un uso eficiente y óptimo del sistema de vigilancia.
Esta iniciativa forma parte de una voluntad compartida por las autoridades locales, regionales y nacionales de garantizar la protección tanto de los ciudadanos como de los bienes públicos. Asimismo, este plan demuestra el compromiso local y regional para modernizar la infraestructura de seguridad urbana en la región de Tánger y luchar contra el crimen.
Reforzar la seguridad de la ciudad ha sido uno de los principales objetivos de las autoridades locales desde hace tiempo. El pasado mes de febrero Tánger lanzó una licitación con el fin de aumentar el sistema de videovigilancia en la antigua medina después de que se denunciasen varios casos de vandalismo, ya que esta lacra representa una amenaza para el patrimonio histórico de la localidad, uno de los principales puntos turísticos del país.