Halal, un mercado en pleno auge
07 de octubre de 2014 (00:52 h.)
Por Alexandra Dumitrascu
Foto: Alimentos de la tienda y carnicería halal Hamid en Sevilla/ Belén Vargas.
El creciente número de consumidores de productos y servicios halal está contribuyendo a la expansión de un mercado con un gran potencial, el único que no ha sido afectado por la crisis económica. Según la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE), en territorio español viven alrededor de 1,7 millones de musulmanes, en su mayoría marroquíes (50%) e hispano-musulmanes. Asimismo, en el mundo hay 1.600 millones de personas de confesión musulmana, de los cuales 90 millones conviven en el contexto europeo, incluyendo Turquía. El mercado halal crece a nivel internacional alrededor de un 12%, mientras que en España cuenta con una cifra de negocio próxima a los 620 millones de euros, engendrada principalmente por la exportación a la cuenca del mediterráneo, a los países europeos, a Emiratos Árabes Unidos (EAU) o el sudeste asiático, y generada por más de 240 industrias y 600 puntos de venta. El gran auge de este mercado requiere, por tanto, de una certificación de marca de garantía halal, imprescindible para conferir seguridad a los consumidores y para que las empresas puedan exportar sus productos. Consciente de esta necesidad, el Instituto Halal se erige desde hace 16 años como referente de la normalización, regulación y control del mercado halal en España, mediante la aplicación de la ® Marca de Garantía Halal de Junta Islámica homologada por entidades islámicas de control halal como las de EAU, Malasia, Singapur, Argelia, Sudáfrica, Estados Unidos o Argentina, entre otras, siendo además pionera en Europa.
Seminario en Casa Árabe
Bajo el lema ‘Posibles similitudes y diferencias de la norma europea con los estándares halal exigidos por los países árabes’, Casa Árabe acogió el pasado mes de junio, en su sede de Madrid, la IV Reunión del Comité Técnico de Normalización 308 Halal y el II Seminario Halal, ‘La Normalización Halal en España’, donde representantes de las comunidades islámicas españolas y de la administración dieron a conocer de una forma más amplía el concepto halal, y profundizaron en la labor de normalización del Instituto Halal. El seminario, el primero que organiza Casa Árabe, contó con la presencia de Mariam Isabel Romero Arias, presidenta de la Junta Islámica y directora general del Instituto Halal; Hanif Escudero, director de Normalización Halal; Elena Ordozgoiti, jefa de Agroalimentación y servicios de AENOR; Francisco Guzmán Jiménez, secretario de la Comisión Islámica de España; y Antonio Fernández Ranchal, director de la Fundación Agrópolis de Córdoba, además de distintos expertos en el ámbito halal.
Certificado halal
El cumplimento estricto de la Ley Islámica es lo que está en la base del modelo de certificación halal, siendo el primer proyecto de normalización que incorpora unos fundamentos de carácter religioso. Así, conceptos como halal o lo que es permitido, ético o equilibrado, y haram en cuanto a lo prohibido y perjudicial, constituyen la guía básica de la certificación de garantía halal. Halal representa por tanto un estilo de vida, cuyo potencial envuelve no solamente al sector alimenticio, sino también a la sanidad, la economía, el turismo, los productos cosméticos, la perfumería o la farmacia. Aunque en la actualidad la normalización se ha desarrollado fundamentalmente en el ámbito de la alimentación, no obstante, el turismo está viviendo una auténtica eclosión dentro del mundo halal, con un crecimiento global de 4,7%, por encima del resto de turismo en el mundo, constituyendo por tanto una auténtica oportunidad de negocio. Además, desde el Instituto Halal, en colaboración con la Fundación Acrópolis de Córdoba, se trabaja para impulsar los sectores económicos y de las finanzas halal, lo que implica un modelo emprendedor en un entorno no capitalista, y que de momento está pensado para Córdoba, debido a su gran potencial que facilita a que esta capital andaluza evolucione hacia una ciudad halal.
Producción de calidad
Para el buen desarrollo del sistema de certificación, el Instituto Halal cuenta con un mecanismo de control de producción de calidad a través de auditorias y supervisores externos que velan por el cumplimiento de los requisitos exigidos bajo estándares halal.
La formación, igualmente, es otro elemento necesario para garantizar la calidad de los productos, siendo una forma de control preventivo que dota al personal de unos valores éticos fundamentales para “valorar el entendimiento intercultural y deshacer prejuicios”, según Natalia Andújar, directora de formación de la Escuela Halal. En definitiva, el Instituto Halal provee las herramientas necesarias para, en palabras de Romero, “dar respuesta a los retos del siglo XXI”, donde “cualquier desarrollo en torno a halal es el desarrollo de un derecho de una población, de un bien que es propio, pero también compartido”.