Marruecos apuesta por la producción de hidrocarburos para alcanzar la independencia energética

Por Dunia Gattiui 
Foto: Marruecos acelera las prospecciones petrolíferas en sus aguas territoriales. 
 
Las prospecciones petrolíferas en Marruecos están en auge. El país norteafricano, que salvo fosfatos no tiene grandes reservas de hidrocarburos como Argelia y Libia en el Magreb, acaricia la idea de conseguir en el futuro la independencia energética. Marruecos acelera los sondeos petrolíferos al otro lado de la mediana que separa las aguas españolas de las del Reino Alauí. El país norteafricano tiene toda su costa segmentada para explorar desde hace más de 30 años y ha concedido unos 130 permisos. La multinacional Cairn Energy es la que dispone de los planes más avanzados.  Actualmente, Marruecos importa el gas y el petróleo de otros países, lo que significa una carga económica para las cuentas públicas. El desarrollo de las energías renovables en los últimos años apenas ha alterado esta situación. La exploración de hidrocarburos fósiles, que de momento ha dado resultados modestos,  es para Rabat una solución a largo plazo. En 2014, se están llevando a cabo 27 prospecciones petrolíferas, frente a cuatro en 2013. Las compañías extranjeras, que han invertido 5.000 millones de dirhams  (unos 480 millones de euros), se han  llevado el gato al agua.  En 2013, las inversiones alcanzaron los 2.300 millones de dirhams (unos 215 millones de euros). Los anuncios de descubrimientos de reservas de hidrocarburos se suceden en Marruecos, pero algunos acaban en la pura nada. El pasado mes de agosto, las  prospecciones petrolíferas que la compañía petrolera portuguesa Galp y la australiana Tangiers realizaron en aguas de Portugal, al oeste de Tarfaya (Marruecos), terminaron sin éxito. Ambas compañías informaron que decidieron taponar y abandonar ese pozo tras conocer los resultados de las prospecciones. La perforación del pozo Tao-1, situado en el bloque del Atlántico conocido como Tarfaya Offshore, comenzaron el 26 de junio y alcanzaron una profundidad total de 3.518 metros. Galp, operador del proyecto, con un 50 % del capital, y Tangiers, socio con un 25 %, explicaron en sendos comunicados que no encontraron hidrocarburos, ni en su objetivo secundario (más superficial), ni en los estratos del Jurásico Medio. Fue el tercer intento fallido de búsqueda de petróleo que tiene lugar en los últimos meses en las aguas que separan Canarias de Marruecos, tras los dos protagonizados por Cairn Energy. Hubo más suerte un mes antes con el anuncio de unas reservas de gas en la región de Kenitra -al norte de Rabat- que hizo la Oficina Nacional de Hidrocarburos y Minas (ONHYM).  
 
Estrategia económica 
La intensificación de las prospecciones obedece a una estrategia energética del Gobierno marroquí que dio sus primeros pasos en los años 2000, cuando se modificó la ley de hidrocarburos mediante  una enmienda. Marruecos se ha dotado de un marco jurídico “más atractivo” para el sector de los hidrocarburos, según el Gobierno de Rabat. Las autoridades marroquíes proponen rebajas fiscales y reservar el 75% del capital a las empresas que inviertan en el sector de los hidrocarburos, quedándose el Estado con el 25% restante a través de la ONHYM. En estos momentos, una treintena de compañías extranjeras trabajan en el país magrebí. Los expertos consideran que es un número reducido, a pesar de los esfuerzos desplegados por las autoridades marroquíes. El camino hacia la independencia energética de Marruecos no está despejado. Sin embargo, los expertos creen que el país, que paga un factura anual de 9.000 millones de euros en materia energética,  tendría que hacer grandes esfuerzos para alcanzar este reto a través de la explotación de energías fósiles y renovables. En este sentido, el Gobierno del islamista Abdelilah Benkirane prevé invertir más de 13.000 millones de euros para reforzar la capacidad de Marruecos en producción eléctrica. Unos 10.000 millones se invertirán en el sector de las renovables, en el que España, que es la segunda  potencia de la Unión Europea (UE) después de Alemania, podría desempeñar un papel muy activo. El desarrollo de la producción de hidrocarburos no ha generado un debate político y social en Marruecos, donde el movimiento ecologista es muy débil. Por otra parte, según datos de la Oficina de Cambios de Marruecos, el déficit comercial del país magrebí se redujo en 2013 y representa el 22% del Producto Interior Bruto (PIB).  Hace un año alcanzaba el 24%. Pero sigue siendo muy elevado, según advierten los expertos. Los dos principales socios comerciales de Marruecos son España y Francia. Ambos países europeos son el destino del 40% de las exportaciones marroquíes. Después vienen países como Brasil (5,7%) y Estados Unidos (3,9%).