Mauritania promociona el sector minero y lo abre al capital extranjero
09 de octubre de 2014 (22:32 h.)
Por Habiba El Barnaoui
Foto: Una mina de hierro propiedad de la empresa española Copisa en Mauritania.
El sector minero en Mauritania está experimentando un crecimiento tan rápido que va camino de ser la principal fuente de ingresos del país. Aunque no es una industria nueva, pues lleva más de medio siglo funcionando en el país, cada año, la extracción de hierro, oro y diamantes aumenta y el interés de los inversores internacionales también. Dicho interés crece gracias al descubrimiento de nuevas minas por todo el país y sobre todo a la llegada al poder del nuevo presidente, Mohamed Ould Abdelaziz, que ha dado muchas facilidades a las compañías extranjeras. Desde el 2009, año en el que Abdelaziz se afianzó en la jefatura del Estado, empresas como la canadiense Kinross o la suiza Glencore han firmado contratos para extraer los minerales de este país africano. Dentro del campo de la minería mauritana es necesario destacar el papel de la emblemática SNIM (Sociedad Nacional Industrial y Minera) dirigida por Abdallahi Ould Oudaa. Heredera de MIFERMA, fundada por Francia en la década de 1950, la SNIM se creó en 1974 siguiendo la política de nacionalización del sector. El verdadero motor de la economía mauritana, que son los recursos mineros, representa hoy aproximadamente el 30% del PIB del país y más de la mitad de sus ingresos por exportaciones. En este sector, la SNIM es un gigante empresarial nacional. Esta corporación es el segundo exportador de mineral de hierro del continente africano, con cerca de 11 millones de toneladas vendidas en 2010. En 2012, su facturación ascendió a 1.127 billones de dólares, y en 2013 superó los 1.800 billones de dólares, representando más del 50% de las exportaciones mauritanas. Es la primera empresa y el segundo empleador del país con más de 5.000 trabajadores. Pero el Gobierno mauritano quiere llegar a más. Prueba de ello es la puesta en marcha de una escuela de minas y geología y un centro de formación profesional destinado a formar técnicos de las diferentes especialidades científicas relacionadas con este sector. El objetivo de Nuakchot: formar a toda una generación que sea capaz de desarrollar su trabajo en el sector de la extracción de minerales.
Producción de oro
En septiembre del 2010, la multinacional canadiense Kinross adquirió el 100% de acciones de la mina de Tasiast. Es una mina de oro situada al noroeste de Mauritania, a unos 300 kilómetros al norte de Nuakchot. Así la compañía aurífera canadiense se convirtió en la mayor extractora de dicho mineral en el país. Esta empresa con base en Toronto, ha sido probablemente la más polémica, algunos de sus socios locales se han visto envueltos en más de un escándalo de corrupción, y en la mina ha habido largas huelgas de trabajadores descontentos con las condiciones laborales que les ofrecía Kinross. Pero estos problemas no le impidieron producir en 2013 unas 247.818 onzas de oro. Numerosos son los empresarios extranjeros que no se atreven a invertir en Mauritania. La opacidad, los obstáculos burocráticos y la corrupción que suelen encontrarse en el país los inversores extranjeros son un freno a la internacionalización de la economía mauritana. El caso de Kinross no es un asunto aislado, pues muchos inversores extranjeros ven como sus negocios se hunden por la mala gestión de sus socios locales. Sin embargo, cabe destacar que hay algunos signos de progreso tales como que en 2009, se creó la primera Estrategia Anticorrupción Mauritana.
Acabar con la corrupción
Es una plataforma destinada a “limpiar” la corrupción y facilitar el trabajo entre empresarios locales y extranjeros. Algunos hombres de negocios aseguran que esta estrategia anticorrupción no ha valido para mucho, porque siguen teniendo los mismos problemas de antes. Cada año, se celebra en Nuakchot la Feria Internacional Mauritana de Minería y Petróleo. Organiza este evento económico el Ministerio de Industria, Minas y Energía. Este año se celebrará del 13 al 15 de Octubre. Ofrecerá, como en anteriores ocasiones, tres días de sesiones plenarias, talleres técnicos, exposiciones y visitas a yacimientos locales. Es la forma que tienen los dirigentes mauritanos de promocionar el país y su sector minero. Algunas empresas españolas han invertido en el sector minero y en los hidrocarburos mauritanos. Es el caso de Repsol y de la compañía Copisa, que en 2012, a través de su división industrial, se adjudicó la ampliación de una planta de enriquecimiento de mineral de hierro cerca de Zouerate, por 100,5 millones de euros. El embajador español en Mauritania, Alonso Dezcallar, aseguró que “la minería es un sector de gran importancia para el futuro, y España puede ofrecer a Mauritania su experiencia en el mismo”. La pesca es también un sector muy importante para las empresas y los pescadores españoles en Mauritania, y Canarias es la comunidad clave en las relaciones económicas entre Madrid y Nuakchot.