Emiratos se acoge a su derecho de defenderse de los terroristas en Yemen

“En respuesta a la declaración del Ministerio de Asuntos Exteriores de Yemen, Emiratos afirma su derecho de legítima defensa con respecto a todas las amenazas a las que se enfrentan las fuerzas de la Coalición Árabe”. Así comienza la declaración del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional de Emiratos Árabes Unidos (EAU), que han emitido ante la acusación que realizó este jueves día 29 de agosto la Oficina Presidencial de la República de Yemen contra el país del Golfo. “La declaración de EAU contra el terrorismo, y en defensa de la protección de las fuerzas de la coalición, es firme”, ha aseverado el ministro de Estado de Asuntos Exteriores de EAU, Anwar Gargash, en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter.
El Gobierno de Abd Rabbuh Mansur al-Hadi denunció que las fuerzas aéreas de Emiratos llevaron a cabo ataques en la mañana del jueves, “asesinando decenas de soldados, que ahora son mártires, e hiriendo a muchos otros en Abyan y Aden”, lo que estuvo acompañado “de incursiones, arrestos e, incluso, ejecuciones extrajudiciales de heridos en algunos hospitales de Abyan”.
En concreto, la ofensiva se llevó a cabo en el área de Dofas, localizada entre Zinyibar, capital de la provincia de Abyan, y Aden, sede provisional del Gobierno de Al-Hadi, tras su expulsión de Sanaa. El ataque causó la muerte de “40 efectivos del Ejército nacional y ciudadanos, y 70 heridos” y fue realizado “en apoyo al Consejo Transicional Sureño (STC, por sus siglas en inglés”, según denunció el ministro de Información yemení, Muamar al Eryani. El grupo de soldados se dirigía hacia Aden, para continuar la lucha contra los secesionistas del sur.
“La reciente escalada de las operaciones ofensivas contra las fuerzas de la Coalición Árabe y los civiles representa una grave amenaza para la seguridad de la coalición. En respuesta, EAU ha lanzado ataques precisos y directos entre los días 28 y 29 de agosto de 2019 contra las milicias terroristas, de conformidad con las normas de combate establecidas en la Convención de Ginebra y según el derecho internacional humanitario”, expone el comunicado del Ministerio de Exteriores de EAU. ““EAU reafirma que nunca dudará en proteger a las fuerzas de la Coalición Árabe siempre que surja la necesidad y conserve su derecho de respuesta y defensa propia”, se asegura en el comunicado”, se añade en esta línea.
Emiratos justifica, así, el lanzamiento de la ofensiva por los ataques cometidos contra la Coalición Árabe por “grupos armados afiliados a organizaciones terroristas” en el aeropuerto de Aden, causando dos heridos en las filas de la coalición.
Sin embargo, cabe destacar que en la declaración no aparece una referencia explícita a la ofensiva que ha dejado, al menos, 40 personas muertas, entre soldados y civiles, en la zona de Dofas, como han denunciado desde el Ejecutivo de Al-Hadi.
Los Convenios de Ginebra de 1949 – cuatro textos con protocolos adicionales que regulan el derecho de los conflictos armados – estipulan la prohibición de atentar “contra la vida y la integridad corporal” de los civiles, la toma de rehenes, y las condenas dictadas y las ejecuciones sin previo juicio, entre otros postulados. La cifra oficial de muertos y si entre ellos hay civiles, son cuestiones que todavía no se han esclarecido, a pesar de que el Gobierno de Al-Hadi aseguró que entre las víctimas había “ciudadanos”. De probarse, EAU estaría incumpliendo las obligaciones del derecho internacional humanitario, si bien el país del Golfo asevera que sus acciones se engloban siempre dentro de dicho marco legal.
“Los departamentos de inteligencia de EAU observaron en las últimas semanas que las redes terroristas comenzaron a acelerar su actividad en los territorios yemeníes de una forma peligrosa […] poniendo en riesgo los esfuerzos ejercidos por la coalición para combatir a la milicia hutí, que se beneficia de la inestabilidad y el terrorismo”. Estas afirmaciones, contenidas en la declaración del Ministerio de Exteriores de EAU, traen a colación que Emiratos, tradicionalmente, se ha enfrentado al partido Islah (Agrupación Yemení por la Reforma), una facción componente del Gobierno de Al-Hadi a la que EAU califica como una rama de la Hermandad Musulmana Islámica. Por ello, y de acuerdo con lo expresado en la declaración del Ministerio, es posible que EAU considerara que su ataque fue dirigido intencionalmente contra un grupo de milicianos de Islah que, si bien forman parte de la estructura gubernamental de Al-Hadi, no pueden ser calificados de soldados del Ejército Nacional como así lo ha considerado la Oficina de la Presidencia yemení.
En el comunicado de la Presidencia yemení también se acusó a Emiratos de haber contribuido a la reconquista de la ciudad de Aden por parte de los secesionistas este jueves, una urbe que había sido tomada por las fuerzas de Al-Hadi tan solo 24 horas antes: “Nos sorprendieron los ataques aéreos de EAU contra ciudadanos y miembros de nuestro Ejército Nacional dentro de los barrios poblados de Aden, lo que llevó a las fuerzas a retirarse para salvar a Aden y a su gente de las consecuencias de la destrucción loca de las milicias del STC, apoyado por una cubierta aérea y ataques militares con aviones de EAU”.
Las fuerzas secesionistas, nutridas del Cinturón de Seguridad, un cuerpo militar apoyado y entrenado por Emiratos, también han recuperado el control de Zinyibar, la capital de Abyan. En esta línea, cabe explicar que, de acuerdo con una fuente de alto nivel consultado por la agencia EFE, 8.000 hombres han llegado a Aden desde otras zonas para reforzar las filas de los separatistas.
Una nota publicada en el día de ayer en todas las Embajadas exteriores de Yemen recogía la petición desde el Gobierno de Al-Hadi a Emiratos para que detenga “todo tipo de apoyo financiero y militar a todas las formaciones militares fuera del control del Estado y el Estado de derecho”, en una referencia implícita al Cinturón de Seguridad.

En el mismo mensaje en el que Gargash aseguraba que la declaración de su Ministerio contra el terrorismo y en defensa de la coalición era firme, declaraba que “lo más importante es que la clara convicción de que el diálogo y la comunicación entre el Gobierno y el STC a través de la iniciativa saudita es la salida de la crisis”.
En este punto, cabe recordar que Arabia Saudí, ante el riesgo de desmembramiento de la coalición internacional que combate en Yemen tras los primeros enfrentamientos entre las tropas gubernamentales y el STC, propuso, a mediados de agosto, “una reunión urgente en Riad para discutir y resolver las diferencias recurriendo al diálogo”. Las conversaciones, cuyo escenario se ha traslado ahora a la ciudad de Jeddah desde la capital, fueron apoyadas desde el primer momento por el STC, pues su portavoz, Nazar Haithman, declaró, entonces, que existía una plena disposición a mantener un diálogo, ya que se encontraban “totalmente comprometidos con el alto el fuego en Aden” que se declaró en la ciudad a instancias de la coalición.
Un comunicado del STC publicado este jueves en la agencia local de noticias Aden Press ha continuado este enfoque: “La intención de proteger a los civiles y restaurar la estabilidad fue la que llevó a la aceptación del STC de participar en un proceso de diálogo en Jeddah con el Gobierno de Al-Hadi bajo la guía de Arabia Saudi”, una ronda de contactos a la que el Ejecutivo “se negó a participar […] y, en cambio, sobre el terreno, intensificó la situación en la gobernación de Shabwah”.
Por su parte, en la nota de denuncia contra Emiratos emitida por la Oficina de la Presidencia yemení, el Gobierno de Al-Hadi “expresa su gratitud y aprecio al Reino de Arabia Saudí, nuestros socios en la victoria y el destino, y líder de la Coalición Árabe”. Por ello, reiteran su “llamada [a Riad] a intervenir para parar esta intervención evidente en apoyo de las milicias y en el uso de bombardeo aéreo contra nuestras Fuerzas Armadas”. No obstante, no aparece ninguna mención a los diálogos propuestos por Jeddah y tampoco se ha hecho pública, hasta el momento, ninguna intención de acudir a la mesa de negociaciones.