Discreto resultado de la conferencia de Yeda sobre la guerra de Ucrania
Apenas la terminología diplomática, que no suele reconocer fracasos, describe el resultado de la conferencia de paz sobre la guerra ruso-ucraniana celebrada este fin de semana en Yeda, Arabia Saudí, la influencia internacional que ejerce el poderoso príncipe Mohamed bin Salman, el hombre fuerte del Reino, consiguió celebrar la reunión, darle cierto eco internacional y reunir a delegaciones de cuarenta países, entre ellas la de Estados Unidos, encabezada por un representante de escaso relieve en la Secretaría de Estado, y la de China, que le concedió mayor relieve al tratarse del país más relevante entre los aliados de Rusia, El Kremlin, por su parte, no aceptó la participación lo cual limitó de partida el interés que cabría esperar de la conversación, que no negociación, como fue descrita por los promotores y la práctica totalidad de los participantes.
El ministro de Relaciones Exteriores ucraniano, Dmitró Kuleba, afirmó que había sido muy interesante en la búsqueda de la pacificación y que podría ser el comienzo de otras conferencias similares para adelantar propuestas. Apenas han trascendido los asuntos abordados salvo los relacionados con los problemas creados para algunos países como consecuencia de la ruptura rusa de los acuerdos que permitían la exportación de grano e Ucrania desde los puertos del mar Negro. No es un problema exclusivo de Ucrania, que sufre las consecuencias para su economía, sino también para otros países que los necesitan para paliar sus necesidades ante la carencia de alimentos en unos momentos tan agravados por la sequía que se prolonga desde hace mucho tiempo.
La repercusión de la conferencia en los medios se vio eclipsada el lunes por la noticia de la detención de una mujer que había sido descubierta conspirando para el asesinato del presidente Zelenski.
Según detalles revelados en Kiev, se trata de una mujer que ejercía el espionaje a favor de Rusia filtrando información sobe planes estratégicos enemigos. Concretamente fue descubierta haciendo llegar a los rusos los detalles secretos del viaje que el presidente tenía previsto realizar sin anuncio previo a la ciudad de Mydelaiv. Una información que sirvió para promover su asesinato.
Respecto a la conferencia, de la cual no surgió ninguna propuesta para llegar a una negociación para poner fin a la guerra, el comunicado oficial que fue divulgado se limita a asegurar que discurrió en un ambiente “extremadamente honesto y abierto” y, a juicio del portavoz de la delegación de Ucrania, resultó “muy productivo”.